La falta de colectores y de luz inutiliza la red de depuradoras de Louz¨¢n

En las parroquias de Loureza y Burgueira, del Ayuntamiento de Oia, estaba previsto instalar sendas depuradoras compactas del proyecto Deputrans 2004-05, gestionado por la Diputaci¨®n de Pontevedra con fondos europeos. La elecci¨®n respond¨ªa rigurosamente a los objetivos que marcaba el proyecto de sanear la cuenca del Mi?o mediante la instalaci¨®n de las depuradoras en n¨²cleos de poblaci¨®n de menos de 500 habitantes. Pero se puso el carro antes que los bueyes. Cuando las dos plantas ya estaban asignadas a las dos parroquias se descubri¨® con estupor que bajo sus calles no hab¨ªa colectores de saneamiento.

Esta "incidencia" menude¨® por otros lugares durante la ejecuci¨®n del proyecto Deputrans pese a la fase previa de consultas que realiz¨® la Diputaci¨®n, seg¨²n sus propias fuentes, con los responsables de los municipios beneficiarios del proyecto para fijar los emplazamientos de las depuradoras. En unos casos no hab¨ªa colectores, en otros faltaba (y falta) la imprescindible conexi¨®n a la red el¨¦ctrica, y si ambas redes exist¨ªan, la circulaci¨®n conjunta de aguas pluviales y fecales, en el primer caso, o la insuficiente potencia el¨¦ctrica, estragaba el funcionamiento de las depuradoras instaladas, que requieren la estanqueidad de las aguas fecales para depurarlas con un sistema biol¨®gico.

Todo ello explicar¨ªa, a su vez, el traj¨ªn de la Diputaci¨®n con las depuradoras, improvisando de aqu¨ª para all¨¢ los municipios receptores o los emplazamientos dentro de un mismo municipio. O que ignore el paradero exacto de las 39 depuradoras compradas con fondos europeos. No lo sospechaba Rafael Louz¨¢n cuando anunci¨®, en febrero de 2006, que todas las plantas estar¨ªan "a pleno rendimiento" semanas despu¨¦s si se superaba el principal problema, el de "la log¨ªstica del transporte".

Las de Loureza y Burgueira, destinadas a sanear el curso alto del r¨ªo Tamuxe, ¨²ltimo afluente del Mi?o, se movieron a Pedornes, en la costa, donde ya estaba previsto instalar una, y otras dos en Viladesuso y Moug¨¢s, que fue, esta ¨²ltima, de las primeras en arrancar. Con las cinco, Oia encabeza la concentraci¨®n de depuradoras de Deputrans y probablemente de los desprop¨®sitos que acompa?an la ejecuci¨®n del programa. Ninguna de las cinco cumple su objetivo inicial de sanear la cuenca del Mi?o, ya que tratar¨¢n aguas costeras.

De las tres de Pedornes, s¨®lo funciona una, y no desde que la instalaron. Carec¨ªa de conexi¨®n el¨¦ctrica con la potencia necesaria. El ayuntamiento lo compens¨® en 2008 con un generador a gas¨®leo (15.000 euros) que le permiti¨® una operatividad deficiente. Las otras dos se destinaron a tratar las aguas de la capital municipal, Santa Mar¨ªa de Oia, a 3,5 kil¨®metros de distancia. Pero no hab¨ªa tuber¨ªas que conectaran ambos extremos. As¨ª que todo el Plan E del municipio, 850.000 euros, se dedic¨® a ese objetivo, y tampoco fue suficiente: la obra se estanc¨® a 300 metros de Pedornes, el presupuesto no dio para m¨¢s.

La Conseller¨ªa de Medio Ambiente anunci¨® la semana pasada que asumir¨¢ el gasto de m¨¢s de 200.000 euros en la construcci¨®n de esos 300 metros de ca?er¨ªa, a¨²n sin fecha de ejecuci¨®n. "Tiene que ser urgente", dice el alcalde, Alejandro Rodr¨ªguez. "Antes de que vengan los eurodiputados a comprobar c¨®mo hemos hecho el Deputrans. ?Cu¨¢nto dolor de cabeza, mi madre!", comenta con alivio, viendo la situaci¨®n ya resuelta. Pero las tres depuradoras est¨¢n de modo incompatible en suelo de un pol¨ªgono acu¨ªcola, ?no tendr¨¢n que trasladarlas? "Eso son ganas de jorobar. Afecta a las que se vayan a construir, no a las que ya est¨¦n", cree Rodr¨ªguez.