"Las causas humanitarias, que se las pidan a otros"
La cita con Lorena Yera se fragu¨® de forma particular: se gest¨® a trav¨¦s de Facebook y s¨®lo se recurri¨® al tel¨¦fono en ¨²ltima instancia para concertar una comida en un bar de tapas cerca de Las Ramblas. No es extra?o que fuera as¨ª porque Lorena y su amigo Eloy Costilludo utilizan desde agosto de 2008 la poderosa red social de Internet para convocar acciones absurdas y espont¨¢neas. Su ¨²ltima haza?a fue lograr que 800 personas recorrieran el Paseo de Gr¨¤cia sobre unos globos aeroest¨¢ticos en forma de caballito. Y la pen¨²ltima, que 260 personas, para el pasmo de muchos, fueran en ropa interior por el Metro.
"La gente normal no va por ah¨ª quit¨¢ndose los pantalones pero en grupo s¨ª. Estaba prohibido el exhibicionismo. No molestamos a nadie y es gratis", cuenta Yera, que resalta que sus acciones, colgadas en Internet, s¨®lo persiguen que la gente sonr¨ªa. "Con eso nos damos por satisfechos", explica. Todo naci¨® por casualidad: hace dos a?os qued¨® fascinada viendo un canal internacional en el que se hablaba de los flashmobs (acciones instant¨¢neas) o los happening (ensayadas y con coreograf¨ªa) por ciudades de todo el mundo. Y de ah¨ª surgi¨® la idea, junto a Eloy, de crear Barnamob, que cuenta con 2.500 simpatizantes en Facebook y que ha movilizado a miles de personas. Ahora se plantea hacer acciones m¨¢s minoritarias y esc¨¦nicas para no morir de ¨¦xito.
Esta joven convoca a miles de internautas a acciones absurdas para causar la risa
El secreto reside, seg¨²n ella, en que la gente necesita re¨ªrse, huir de la rutina y sentirse parte de un grupo. El movimiento no es reivindicativo; es cibern¨¦tico y c¨ªvico (proh¨ªbe da?ar el mobiliario). Han convocado 15 acciones, todas en Barcelona, como guerras con pistolas de agua o maullado ante el gato de Botero. En el imperio del absurdo, los participantes act¨²an y se dispersan. La cuesti¨®n es por qu¨¦ en un planeta tan herido no destinan toda esa energ¨ªa a causas humanitarias. "?Y por qu¨¦ es funci¨®n de Barnamob hacer cosas por la gente? ?Por qu¨¦ no se les pide a otros?", replica harta esta universitaria de 25 a?os con un halo de misterio: se niega a explicar qu¨¦ estudia porque quiere separar su vida privada -"No tengo nada que ocultar"- de Barnamob.
Con problemas de alergias alimentarias, le cuesta comer fuera de casa, pero ha encontrado en este bar hist¨®rico su peque?o santuario en el que pide un bocadillo de tortilla de queso y una coca-cola que siempre le sientan de cine. Pese a que su movimiento puede ser tachado de fr¨ªvolo, Yera aclara que no es apol¨ªtica y que se manifest¨® contra la guerra de Irak y en protestas antiglobalizaci¨®n. Pero avisa: "Si nos metemos en pol¨ªtica o religi¨®n duramos dos d¨ªas".
En estos tiempos de crisis, las agencias de publicidad les han propuesto rodar anuncios, pero ellos no piensan aceptar porque no quieren que nadie les utilice. Su acci¨®n so?ada ser¨ªa la de desplazarse dentro de una rueda gigante. Y mientras el d¨ªa llega, responde cientos de correos diarios sacrificando el ir de copas con los amigos y horas de sue?o porque visualiza las acciones mil veces. "Es casi un trabajo", resopla. "?Pero es super¨²til hacer re¨ªr a la gente!". Ya sab¨ªa eso Jorge de Burgos, el asesino de El nombre de la rosa, que mataba para que nadie leyera el Tratado de la Risa de Arist¨®teles. Y tambi¨¦n lo sab¨ªa la madre de Lorena Yera: le ha pedido que monte algo un lunes, su d¨ªa de fiesta, para re¨ªr un rato.
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