_
_
_
_
Reportaje:ADICTOS AL SEXO

El mal de los insaciables

No son golfos, sino esclavos. Consumen sexo compulsivamente, pero disfrutan menos de lo que sufren. Puede que Tiger Woods lo sea, pero los sexoadictos reales no suelen ser ni ricos ni famosos. La insatisfacci¨®n, las carencias afectivas y las drogas est¨¢n detr¨¢s de un s¨ªndrome capaz de destruir a quien lo padece.

Luz S¨¢nchez-Mellado

Todo empieza con una ca?a. Te animas y te pules otras cuatro. Y una copita, y otra, y otra. Y alguien saca su coca, o t¨² la tuya. Y te haces una raya, y otra. Y te llama un colega para ir a un club, o vas t¨² solo. Y otra ca?a y otra copa y otra raya. Y te subes con una t¨ªa, y otra, y dos a la vez. Y de repente son las seis de la tarde y te das cuenta de lo que has hecho. De que llevas 30 horas desaparecido. De que tienes 40 llamadas perdidas de casa y del curro. De que te has gastado 2.000 euros en follar no sabes con qui¨¦n. De que te has ido a la mierda. Y te quieres morir. Juras no volver a hacerlo, pero vuelves. Siempre es as¨ª. Y empieza con una ca?a".

Arturo se calla y apura el Trina. Antes, ni ha reparado en el rictus de extra?eza del barman de esta cervecer¨ªa madrile?a, un veterano que seguro esperaba un pedido m¨¢s potente por parte de semejante cliente un viernes a las ocho de la tarde. Porque Arturo, este agente comercial de 36 a?os, impone lo suyo. Hace falta mucho aplomo para llevar ese traje pr¨ªncipe de Gales y esa corbata de apabullante nudo Windsor como quien lleva un pijama. Arturo puede. Exuda seguridad en s¨ª mismo. Cuando aparece, despliega un m¨®vil, una blackberry y un miniport¨¢til. Viene de negociar un pedido y le quedan flecos pendientes, explica mientras acribilla los teclados. Luego cierra sus chismes, mira a los ojos y suelta la anterior parrafada. ?l solo. Sin esperar preguntas. Sabe a qu¨¦ ha venido. A contar su vida. Y eso hace. Sin dramatismo. Sin autocompasi¨®n. Con pelos y se?ales.

"Te gastas 2.000 euros en PUTAS y luego te quieres morir, pero vuelves"
Un 32% de espa?oles ha pagado por sexo, frente al 0,3% de espa?olas. El 45% de los hombres querr¨ªa m¨¢s
"Yo veo un escote por la calle y no me basta con decir vaya t¨ªa buena. Tengo que ir a desahogarme"
"Un lud¨®pata puede huir de las tragaperras, pero yo no puedo huir de m¨ª"

"Al principio eres el rey del mambo: te lo haces con t¨ªas alucinantes que te comen la oreja y vas tan ciego que te lo crees. Hasta que un d¨ªa conoces el proceso, sabes que te est¨¢s destruyendo, y no puedes evitarlo. Yo mismo digo: ?c¨®mo he llegado a esto? No he perdido el trabajo de milagro, no me ha dejado mi novia de milagro, estoy vivo de puto milagro. Trabajo 16 horas, llevo una vida perra, el alcohol, la coca y el sexo son mis v¨ªas de escape, y bla, bla, bla, de acuerdo. Pero la culpa de lo m¨ªo es m¨ªa y el resto son excusas. Aqu¨ª donde me ves, soy un esclavo. Tengo todo controlado menos mi vida".

Arturo es un adicto al sexo real, con un trabajo real y un problema tan real y acuciante como para pedir auxilio urgente. Hoy ha ido por primera vez a la consulta de Carlos Dulanto, un m¨¦dico especializado en adicciones. Al despacho de Dulanto en la zona noble de Madrid acude m¨¢s de un centenar de personas buscando ayuda para liberarse de su yugo particular. Cocain¨®manos. Alcoh¨®licos. Lud¨®patas. Adictos a Internet. Compradores compulsivos. Y adictos al sexo. Algunos, a varias cosas o a todo a la vez. J¨®venes y maduros, profesionales y parados, gente lo bastante solvente para abonar los 80 euros de cada sesi¨®n semanal de una terapia que requiere un m¨ªnimo de un a?o. La mitad llegar¨¢ a esa meta rehabilitada o en v¨ªas de rehabilitaci¨®n. La otra abandonar¨¢ el tratamiento. Todos ser¨¢n adictos de por vida. La del sexo, como todas las adicciones, no se cura, dice Dulanto. Se controla o no se controla. O puedes con ella, o puede contigo.

Esa es la batalla interior que ha emprendido Arturo. Est¨¢ seguro de que ¨¦l formar¨¢ parte del 50% que sale del pozo. "He visto la luz", revela con la fe del converso reci¨¦n ca¨ªdo del caballo. Por ahora tiene s¨®lo una certeza: "No puedo permitirme coqueteos. Si pico, caigo". As¨ª que se autoaplica una pol¨ªtica de tolerancia cero: cero copas, cero rayas, cero ca?as. Trina -y Aquarius y Nestea y Fanta- a discreci¨®n. Lleva todo el d¨ªa alternando con clientes, ha trasegado litros de agua edulcorada y tiene el est¨®mago como una lavadora. Ahora mismo se tomar¨ªa una ca?ita para empezar el fin de semana. Pero no. Este es "el nuevo Arturo". Ya lo ha dicho antes. El alcohol es el interruptor que pone en marcha su circuito vicioso. La primera medida para apagarlo es no encenderlo. Marchando otro Trina para el caballero.

El problema de Pedro es que su circuito se enciende solo. No le hace falta ni una ca?a. Le basta ir por la calle y cruzarse con una chica con escote. O estar en casa y ver a Pilar Rubio mover las caderas en Mira qui¨¦n baila. Entonces ocurre. Se produce el clic. "Yo no me conformo con decir vaya t¨ªa buena. Ni con masturbarme en la cama. Yo me subo por las paredes y tengo que salir a desahogarme". Pedro habla en presente, aunque lleva un a?o yendo al Centro de Tratamiento y Rehabilitaci¨®n de Adicciones Sociales (Cetras) de Valladolid para intentar superar su adicci¨®n al sexo. Blas Bomb¨ªn, psiquiatra, fundador de esta entidad ben¨¦fica que cobra a sus pacientes una tarifa plana de 10 euros mensuales, cree que Pedro "va por buen camino, poco a poco". Pero el interesado es el primero en admitir la evidencia. "No estoy curado. Soy, si acaso, un adicto en rehabilitaci¨®n. Llevo tres euros encima, pero si ahora me das 50, ir¨ªa a fund¨ªrmelos a un puticlub".

Pedro acaba de salir de trabajar. Un empleo de ocho a tres en una factor¨ªa automovil¨ªstica de Palencia. Una sirena marca el fin de la jornada. Segundos despu¨¦s se materializa una legi¨®n de operarios al trote hacia el aparcamiento. Pedro, un hombret¨®n moreno, viene caminando. Ten¨ªa coche, pero tuvo que venderlo. Acepta la invitaci¨®n a comer, pero insiste en que sea en un modest¨ªsimo bar de men¨² del d¨ªa. Aunque quisiera, no puede pagar. Lo de los tres euros no es una met¨¢fora. Es la cuota diaria de los 20 que le da su madre cada semana para caf¨¦ y tabaco. Pedro tiene 35 a?os y vive con sus padres. Cobra 800 euros, pero cada mes le retiran de su cuenta 600 para amortizar las "decenas de miles" que debe por los "cuatro o cinco" cr¨¦ditos que ha pedido para costearse su adicci¨®n. ?l mismo ha anulado sus tarjetas. Ha ordenado al banco que no le deje sacar dinero. Ha clausurado su l¨ªnea ADSL para no pasarse las horas muertas merodeando por p¨¢ginas porno. Pedro est¨¢ en la ruina, admite, y no s¨®lo econ¨®mica.

Antes de intentar explicar qu¨¦ es la adicci¨®n al sexo -si es que existe, no hay unanimidad entre los especialistas-, quiz¨¢ sea mejor decir qu¨¦ no lo es. Todos sabemos de personas que dicen necesitar dos, tres, cuatro descargas sexuales al d¨ªa para sentirse en forma. Hombres que frecuentan prost¨ªbulos a espaldas de sus parejas. Mujeres tan promiscuas como el m¨¢s l¨²brico de los varones. Salidos de ambos g¨¦neros. Pues bien, probablemente ninguno sea adicto al sexo. Puede ser, sin embargo, que a su lado en su oficina, cubierto por el manto de respetabilidad de un matrimonio y dos ni?os o el halo de liberalidad de un soltero sin pareja, trabaje un sexoadicto. Alguien para quien el sexo es a la vez el cielo y el infierno. Un afectado por el mal de los insaciables.

"Una cosa son las conductas sexuales no convencionales y otra la adicci¨®n al sexo", ilustra Enrique Echebur¨²a, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa de la Universidad del Pa¨ªs Vasco. "Consideramos convencional la pr¨¢ctica del sexo basada en la afectividad con una pareja ¨²nica o sucesiva. Pero eso no significa que otro tipo de conductas, como la promiscuidad sin afecto o una alta actividad sexual, sean anormales o patol¨®gicas. Tampoco lo es la abstinencia. La sexualidad humana es muy diversa. Algunas pr¨¢cticas nos pueden producir rechazo o juicios de valor negativos. Pero lo aberrante es mezclar criterios morales con criterios m¨¦dicos: ser un golfo no es ser un adicto. Para poder hablar de una conducta psicopatol¨®gica se tiene que traspasar la l¨ªnea roja".

El adicto al sexo, seg¨²n los expertos, es el que pasa varias fronteras con peajes muy concretos. Los enumera Echebur¨²a. Uno: que sus pr¨¢cticas sexuales se conviertan en su prioridad hasta el punto de interferir negativamente en su vida cotidiana, le perjudiquen en sus relaciones personales, le creen conflictos internos y externos. Dos: que el afectado tenga la sensaci¨®n de falta de control sobre sus impulsos sexuales, que se sienta dominado por ellos, que una vez llevados a cabo sienta culpa y verg¨¹enza y aun as¨ª se sienta impelido a repetir el proceso. Y tres: que el sexo sea para ¨¦l una forma de superar o aliviar una carencia, de tal forma que lo practica compulsivamente no para estar bien, sino para no estar mal.

Seg¨²n esa f¨®rmula, Arturo y Pedro son dos sexoadictos de libro. La cuesti¨®n es que esa adicci¨®n no figura en ninguno. Al menos no en la biblia mundial de psiquiatras y psic¨®logos. El vigente Manual diagn¨®stico y?estad¨ªstico de los trastornos mentales (DSM-IV) no dice una palabra al respecto. Habla por una parte de los "abusos de sustancias qu¨ªmicas" o drogodependencias, y por otra, de los "trastornos del control de impulsos", entre los que incluye la ludopat¨ªa. Del sexo compulsivo, nada. Parece que el borrador de la pr¨®xima edici¨®n, el DSM-V, prevista para 2011, incluir¨¢ el s¨ªndrome, al que denomina "hipersexualidad", bajo la calificaci¨®n de "trastorno obsesivo-compulsivo".

Nomenclatura oficial aparte, el t¨¦rmino adicci¨®n es el m¨¢s utilizado por los profesionales que tratan a los afectados. Les parece el m¨¢s descriptivo para definir el problema al que se enfrentan. El primero en acu?ar la expresi¨®n fue el norteamericano Patrick Carnes en su libro Out of the shadows: understanding sexual addiction (1992). "Como un alcoh¨®lico incapaz de parar de beber, los adictos al sexo son incapaces de parar su conducta sexual autodestructiva, a pesar de las rupturas familiares, los desastres financieros, la p¨¦rdida del empleo y otros riesgos que su conducta pueda acarrear", escribe Carnes, autor de varios ensayos sobre el asunto y de un test, el SAST, que aplican los terapeutas estadounidenses para diagnosticar a los sexoadictos. Est¨¢ disponible en www. sexhelp.com/sast.cfm.

Se supone que Tiger Woods cumple los requisitos, porque Carnes es el alma de la cl¨ªnica Pine Grove, en Misisipi, donde el?astro del golf ha invertido dos meses -y 40.000 euros- en emprender el Gentle Path (sendero progresivo), el programa de rehabilitaci¨®n dise?ado por ¨¦l para desenganchar a sus pacientes. La abstinencia temporal de toda pr¨¢ctica sexual -autosatisfacci¨®n incluida-, la confesi¨®n de las infidelidades y la entonaci¨®n de una oraci¨®n de la serenidad cuando se sienta un "impulso inapropiado" forman parte del tratamiento. "He sido infiel. He enga?ado. Me confund¨ª con el dinero y la fama. Pas¨¦ las fronteras. Cre¨ª que ser¨ªa impune y podr¨ªa disfrutar de las tentaciones", musitaba hace unas semanas un cariacontecido Woods en su acto de contrici¨®n televisado a todo el planeta. Las tentaciones, que se sepa, son sus relaciones extramaritales con una docena de mujeres de bandera. Los patrocinadores que le hab¨ªan retirado su confianza -y sus contratos- tomaban nota del prop¨®sito de enmienda. Quince d¨ªas despu¨¦s, el ¨ªdolo hecho carne anunciaba su vuelta al redil. El dom¨¦stico y el deportivo.

El caso de Woods ha devuelto a la actualidad un asunto que nunca dej¨® de estarlo. Michael Douglas, David Duchovny, el futbolista brit¨¢nico George Best, el m¨ªtico Magic Johnson -cuando inform¨® al mundo de que era seropositivo, dijo tambi¨¦n que hab¨ªa copulado con miles de mujeres, 500 de ellas en el ascensor-, Colin Farrell, los presidentes Kennedy y Clinton y sus respectivas aventuras. La lista de presuntos sexoadictos c¨¦lebres es larga. Guapos, ricos, poderosos, con f¨¢cil acceso a mujeres y? casados. De qu¨¦ estamos hablando: ?adicci¨®n o coartada? ?Patolog¨ªa o excusa? ?Golfos o enfermos? Esa es la difusa l¨ªnea roja.

Seg¨²n Carnes, el 6% de los varones y el 3% de las mujeres padecen adicci¨®n sexual. Una cifra considerada "excesiva" por los especialistas espa?oles. Hagamos cuentas. Tomemos el censo electoral -34 millones redondos de varones y mujeres mayores de 18 a?os- y divid¨¢moslo por la mitad. Seg¨²n la teor¨ªa de Carnes, alrededor de un mill¨®n de espa?oles y medio mill¨®n de espa?olas son adictos al sexo. Suelte la cifra ante sus conocidos: "Ahora se llaman adictos, ya tienen la disculpa perfecta", es el comentario de muchas mujeres. "Me parecen pocos t¨ªos y demasiadas t¨ªas, que me presenten a una sola", el chiste de muchos varones. La reci¨¦n publicada Encuesta Nacional de Salud Sexual es ilustrativa. Un 32% de hombres admiten haber pagado por sexo, frente a un 0,3% de mujeres. Al 45% de los varones les gustar¨ªa practicar sexo con m¨¢s frecuencia, frente al 23% de las mujeres. Ni una l¨ªnea acerca de la adicci¨®n sexual. De hecho, el problema que m¨¢s preocupa -52%- a los encuestados en el ¨²ltimo Informe Pfizer es la falta de deseo sexual.

Independientemente del n¨²mero de afectados, el ansia de sexo provoca sufrimiento. Lo constatan cada d¨ªa los psiquiatras y psic¨®logos que le ven la cara. Dulanto, en Madrid; Bomb¨ªn, en Valladolid; Echebur¨²a, en Bilbao; Jos¨¦ Mar¨ªa V¨¢zquez Roel (cl¨ªnica Capistrano, en Mallorca) y Josep Maria Farr¨¦ (Instituto Dexeus de Barcelona) son algunos de los m¨¢s reputados. Sus pacientes, sumados al goteo de terapeutas en otros lugares, arrojan un total de medio millar de adictos al sexo en rehabilitaci¨®n hoy en Espa?a, tirando muy por lo alto. La masturbaci¨®n compulsiva, el uso incontrolado de pornograf¨ªa en Internet, la contrataci¨®n sistem¨¢tica de servicios sexuales o la b¨²squeda continua e indiscriminada de contactos son s¨®lo algunas de las formas en las que se concreta la adicci¨®n. Cada adicto es un mundo. Lo ¨²nico que les une es que les gusta el sexo. Mucho. Lo que m¨¢s. Como a todo el mundo, puede. "Pero la clave es la libertad", acota Blas Bomb¨ªn. "No es cuesti¨®n de tener m¨¢s impulso sexual, sino de la libertad de gestionarlo. El adicto es el que ha perdido esa libertad. El esclavo del deseo".

Pedro se ve en el retrato. "Soy un yonqui de m¨ª mismo. Un lud¨®pata puede huir de las tragaperras, pero yo no puedo alejarme de m¨ª. Tengo un deseo exacerbado, quiero hacerlo dos o tres veces al d¨ªa, lo necesito. Si no puedo estar con una mujer, lo hago solo. Pero tengo mono. Estoy agresivo, borde, de mala hostia, no dejo de pensar en lo otro, me lo pide la cabeza". Se lo lleva pidiendo desde adolescente. Pedro sal¨ªa a ligar y no ligaba. Los rollos ocasionales no le bastaban y sus escarceos con las chicas casi nunca duraban lo suficiente como para pasar a mayores. Un d¨ªa, "a los 22 o 23 a?os", se plant¨® en la Casa de Campo de Madrid y pag¨® a una prostituta un servicio completo. Con todos los extras. "Ah¨ª ca¨ª. Flip¨¦. Vi que quien paga, elige, y quien paga, manda".

Empez¨® a tirar de efectivo y tarjeta. As¨ª durante m¨¢s de 10 a?os. Hasta llegar a la ruina -no s¨®lo econ¨®mica- que le llev¨® a la consulta de Bomb¨ªn. No aspira a que se le entienda -"y menos una mujer"-, pero intenta explicarlo con un s¨ªmil automovil¨ªstico. "Hay Seat Le¨®n y Audi A-6. Los dos te llevan donde quieres. Pero no disfrutas igual conduciendo. Yo usaba el Le¨®n a diario, pero alguna vez me daba el gustazo de alquilar un A-6 y cog¨ªa a una scort [prostituta de lujo] en Madrid".

-A costa de endeudarse hasta las cejas, ?por qu¨¦?

-Por evolucionar.

-?Qu¨¦ es el sexo para usted?

-La forma de desfogarme.

-?Las mujeres?

-Lo que m¨¢s me gusta del mundo; pero, por lo que se ve, yo no les gusto a ellas.

-?Y las prostitutas?

-Profesionales que cumplen una labor social: satisfacer y consolar a t¨ªos como yo. Pero no s¨®lo, ?eh? Las t¨ªas alucinar¨ªan en un club. El 90% son casados a los que su mujer no les da lo que quieren. En cantidad o en calidad, o las dos cosas.

Arturo, el agente comercial, tampoco se considera un ave rara. "En mi ambiente, lo m¨ªo es lo normal. Muchos de mis colegas, solteros y casados, con o sin novia, beben, esnifan, intentan hac¨¦rselo con quien pueden y, si no lo logran, van de putas a follar a tiro hecho. Yo era el tuerto en el pa¨ªs de los ciegos. Lo que pasa es que ellos controlan. Yo he ca¨ªdo, y ellos no". Arturo vincula su adicci¨®n al sexo con su afici¨®n a las drogas. "Es causa-efecto", dice. "Yo no s¨¦ si soy alcoh¨®lico, cocain¨®mano o sexoadicto". "Pero la ca?a lleva a la raya, y la raya, al polvo. Quiero a mi novia. Y ella a m¨ª. Algo tendr¨¦, sabe que soy un putero y sigue ah¨ª. El sexo con ella es sano y cari?oso. Pero la coca me vuelve loco. Te cambia el chip. Es un tema de morbo. El cuerpo te pide un nivel de excitaci¨®n alt¨ªsimo, no tienes fin. Y muchas veces para no tener lo que se entiende por gratificaci¨®n sexual. Vamos, que ni siquiera te corres".

A Carlos Dulanto le suenan ese tipo de relatos. Historias como la de Rodrigo de Santos, el ex concejal del PP en Mallorca procesado por gastar 50.000 euros de fondos p¨²blicos en prost¨ªbulos masculinos. "Soy adicto a la coca¨ªna y no al sexo", dijo en su descargo el edil. Dulanto constata la "cantidad de profesionales de alto nivel" con parecido estilo de vida. Alguno ha visto en consulta. Un 30% de sus pacientes cocain¨®manos son sexoadictos. ?l opina que las dos dependencias van de la mano. "El adicto al sexo fet¨¦n es el que se toma un chocolate con churros y luego va a un club, pero lo normal es ir de putas puesto hasta la bola de algo. A m¨ª me vienen pidiendo ayuda por la coca, y s¨®lo despu¨¦s me cuentan su problema con el sexo. Un t¨ªo que se toma cuatro whiskys y dos gramos no va a tener una erecci¨®n. Entonces toma Viagra. Y empieza un crescendo que no tiene fin: cuatro o cinco chicas, sado-maso, horas y horas para nada, s¨®lo para cargar con la losa de la culpa".

-?Y las cocain¨®manas?

-En mi experiencia, la mujer cocain¨®mana no tiene un uso patol¨®gico del sexo. Se liberan de inhibiciones y tienden a practicar m¨¢s, pero no lo relatan como un problema. Quiz¨¢ porque ellas no necesitan recurrir a la prostituci¨®n. Si una mujer quiere sexo, muy mal tiene que irle para no tenerlo gratis.

Emilio Ambrosio confirma la relaci¨®n coca-sexo y la desproporci¨®n -el psiquiatra Josep Maria Farr¨¦, del Instituto Dexeus, estima una incidencia de un 85% de varones y?un 15% de mujeres- entre sexoadictos y sexoadictas. Catedr¨¢tico de Psicobiolog¨ªa de la UNED, Ambrosio investiga el mecanismo de la drogodependencia. En su laboratorio, ratas cocain¨®manas -se autodispensan libremente su dosis en la jaula- conviven con otras que -igual de libremente- no sienten el impulso de engancharse. La coca¨ªna dispara la dopamina, el mismo neurotransmisor que libera el deseo sexual. Cuando se administran coca, las ratas se ponen a mil.

Seg¨²n Ambrosio, el sexo compulsivo es una adicci¨®n en toda regla. "Tiene que ver con los circuitos del placer y recompensa", explica. "Las actividades necesarias para la continuidad de la especie -sexo, comida, sue?o- van acompa?adas de sensaciones placenteras para garantizar la supervivencia. Los adictos potenciales son especialmente sensibles a esa sensaci¨®n de refuerzo. Prueban el sexo, les gusta much¨ªsimo y quieren m¨¢s y m¨¢s. A fuerza de practicarlo de forma compulsiva, sufren el mismo da?o cerebral que produce el consumo cr¨®nico de drogas: las neuronas de la corteza prefrontal trabajan a medio gas, necesitan de su combustible: sexo o droga para funcionar. Es cuando el adicto dice que precisa su dosis para ser persona. Tiene su raz¨®n: el da?o afecta a la zona que regula la voluntad, la actividad neuronal en esa ¨¢rea est¨¢ reducida. Desaparece el control que ejerce la corteza cerebral sobre el comportamiento y aparece la compulsi¨®n. Quieren sexo y lo van a buscar caiga quien caiga, aunque sean ellos mismos".

-?Y eso no les sucede a las mujeres?

-S¨ª, a algunas. Pero olvidamos que somos mam¨ªferos. Los machos persiguen copular cuanto puedan para dejar sus genes en la siguiente generaci¨®n. Las hembras son m¨¢s conservadoras: ellas eligen, no suelen hacerlo con cualquiera. No es lo mismo ser hombre que mujer: nuestro sistema nervioso no funciona igual, el inter¨¦s en tener m¨¢s o menos contactos sexuales es diferente. Las mujeres, adem¨¢s, disfrutan m¨¢s las relaciones. Ellas, normalmente, se sacian. A ellos les queda un puntito de insatisfacci¨®n, por eso suelen querer m¨¢s.

Parece que eso de que ellos siempre dicen s¨ª no es s¨®lo una leyenda urbana. El problema es traspasar la l¨ªnea roja. Josep Maria Farr¨¦ ha dibujado un retrato robot del sexoadicto a trav¨¦s de sus pacientes. "Suelen ser buscadores de sensaciones. Ansiosos. Con un bajo control de sus impulsos y emociones y baja tolerancia a la frustraci¨®n. El 30% son adictos a t¨®xicos. Otros, adictos en cadena: al juego, a la comida, al ejercicio. Un 21% est¨¢n tambi¨¦n deprimidos. Son personas con carencias graves, y el sexo es su forma de compensarlas. Usan su cuerpo y el de los dem¨¢s como un objeto".

Los tratamientos son diversos. "Cada maestrillo tiene su librillo", dice Dulanto. Pero, en l¨ªneas generales, pasan por meses o a?os de psicoterapia para indagar en los problemas de fondo del sujeto y una reeducaci¨®n psicol¨®gica para intentar controlar los impulsos y ligar la actividad sexual a la afectividad, los sentimientos y la pasi¨®n.

En eso est¨¢n Pedro y Arturo. El palentino tuvo una reca¨ªda el pasado oto?o. "Me desfas¨¦, cambi¨¦ la n¨®mina de banco y me gast¨¦ la bonificaci¨®n en chicas". Ahora est¨¢ mejor. "Tengo m¨¢s autoestima. Salgo a correr, intento abrirme a la gente y a las mujeres. Yo no he tenido una educaci¨®n sentimental, he ido siempre a saco. Soy como un ni?o peque?o con tres euros en el bolsillo aprendiendo a vivir. Tengo que expulsar al Pedro que he llevado 35 a?os dentro. Imagino que saldr¨¦ de esto cuando encuentre a alguien que me quiera y a quien quiera. No es f¨¢cil, pero lo estoy intentando".

Arturo no contesta los correos electr¨®nicos, ni los SMS, ni las llamadas perdidas. Imposible pensar que un tipo permanentemente conectado como ¨¦l no los haya visto. El d¨ªa del Trina estaba caliente, reci¨¦n salido de su primera terapia. Animado por la euforia del principiante, se abri¨® en canal. Quiz¨¢ ahora se arrepienta. Dulanto da fe de que sigue acudiendo a consulta. Su batalla contin¨²a. Progresa adecuadamente. "A veces hace falta tocar fondo para empezar a emerger. Este chico tiene buen pron¨®stico, recursos y apoyo familiar. Saldr¨¢ de esto".

La sexoadicci¨®n puede destruir a quien la padece.
La sexoadicci¨®n puede destruir a quien la padece.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo

?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?

Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.

?Por qu¨¦ est¨¢s viendo esto?

Flecha

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.

?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.

En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.

Sobre la firma

Luz S¨¢nchez-Mellado
Luz S¨¢nchez-Mellado, reportera, entrevistadora y columnista, es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y publica en EL PA?S desde estudiante. Autora de ¡®Ciudadano Cort¨¦s¡¯ y ¡®Estereotipas¡¯ (Plaza y Jan¨¦s), centra su inter¨¦s en la trastienda de las tendencias sociales, culturales y pol¨ªticas y el acercamiento a sus protagonistas.

Archivado En

Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
_
_
universo-virtual.com
buytrendz.net
thisforall.net
benchpressgains.com
qthzb.com
mindhunter9.com
dwjqp1.com
secure-signup.net
ahaayy.com
soxtry.com
tressesindia.com
puresybian.com
krpano-chs.com
cre8workshop.com
hdkino.org
peixun021.com
qz786.com
utahperformingartscenter.org
maw-pr.com
zaaksen.com
ypxsptbfd7.com
worldqrmconference.com
shangyuwh.com
eejssdfsdfdfjsd.com
playminecraftfreeonline.com
trekvietnamtour.com
your-business-articles.com
essaywritingservice10.com
hindusamaaj.com
joggingvideo.com
wandercoups.com
onlinenewsofindia.com
worldgraphic-team.com
bnsrz.com
wormblaster.net
tongchengchuyange0004.com
internetknowing.com
breachurch.com
peachesnginburlesque.com
dataarchitectoo.com
clientfunnelformula.com
30pps.com
cherylroll.com
ks2252.com
webmanicura.com
osostore.com
softsmob.com
sofietsshotel.com
facetorch.com
nylawyerreview.com
apapromotions.com
shareparelli.com
goeaglepointe.com
thegreenmanpubphuket.com
karotorossian.com
publicsensor.com
taiwandefence.com
epcsur.com
odskc.com
inzziln.info
leaiiln.info
cq-oa.com
dqtianshun.com
southstills.com
tvtv98.com
thewellington-hotel.com
bccaipiao.com
colectoresindustrialesgs.com
shenanddcg.com
capriartfilmfestival.com
replicabreitlingsale.com
thaiamarinnewtoncorner.com
gkmcww.com
mbnkbj.com
andrewbrennandesign.com
cod54.com
luobinzhang.com
bartoysdirect.com
taquerialoscompadresdc.com
aaoodln.info
amcckln.info
drvrnln.info
dwabmln.info
fcsjoln.info
hlonxln.info
kcmeiln.info
kplrrln.info
fatcatoons.com
91guoys.com
signupforfreehosting.com
faithfirst.net
zjyc28.com
tongchengjinyeyouyue0004.com
nhuan6.com
oldgardensflowers.com
lightupthefloor.com
bahamamamas-stjohns.com
ly2818.com
905onthebay.com
fonemenu.com
notanothermovie.com
ukrainehighclassescort.com
meincmagazine.com
av-5858.com
yallerdawg.com
donkeythemovie.com
corporatehospitalitygroup.com
boboyy88.com
miteinander-lernen.com
dannayconsulting.com
officialtomsshoesoutletstore.com
forsale-amoxil-amoxicillin.net
generictadalafil-canada.net
guitarlessonseastlondon.com
lesliesrestaurants.com
mattyno9.com
nri-homeloans.com
rtgvisas-qatar.com
salbutamolventolinonline.net
sportsinjuries.info
topsedu.xyz
xmxm7.com
x332.xyz
sportstrainingblog.com
autopartspares.com
readguy.net
soniasegreto.com
bobbygdavis.com
wedsna.com
rgkntk.com
bkkmarketplace.com
zxqcwx.com
breakupprogram.com
boxcardc.com
unblockyoutubeindonesia.com
fabulousbookmark.com
beat-the.com
guatemala-sailfishing-vacations-charters.com
magie-marketing.com
kingstonliteracy.com
guitaraffinity.com
eurelookinggoodapparel.com
howtolosecheekfat.net
marioncma.org
oliviadavismusic.com
shantelcampbellrealestate.com
shopleborn13.com
topindiafree.com
v-visitors.net
qazwsxedcokmijn.com
parabis.net
terriesandelin.com
luxuryhomme.com
studyexpanse.com
ronoom.com
djjky.com
053hh.com
originbluei.com
baucishotel.com
33kkn.com
intrinsiqresearch.com
mariaescort-kiev.com
mymaguk.com
sponsored4u.com
crimsonclass.com
bataillenavale.com
searchtile.com
ze-stribrnych-struh.com
zenithalhype.com
modalpkv.com
bouisset-lafforgue.com
useupload.com
37r.net
autoankauf-muenster.com
bantinbongda.net
bilgius.com
brabustermagazine.com
indigrow.org
miicrosofts.net
mysmiletravel.com
selinasims.com
spellcubesapp.com
usa-faction.com
snn01.com
hope-kelley.com
bancodeprofissionais.com
zjccp99.com
liturgycreator.com
weedsmj.com
majorelenco.com
colcollect.com
androidnews-jp.com
hypoallergenicdogsnames.com
dailyupdatez.com
foodphotographyreviews.com
cricutcom-setup.com
chprowebdesign.com
katyrealty-kanepa.com
tasramar.com
bilgipinari.org
four-am.com
indiarepublicday.com
inquick-enbooks.com
iracmpi.com
kakaschoenen.com
lsm99flash.com
nana1255.com
ngen-niagara.com
technwzs.com
virtualonlinecasino1345.com
wallpapertop.net
nova-click.com
abeautifulcrazylife.com
diggmobile.com
denochemexicana.com
eventhalfkg.com
medcon-taiwan.com
life-himawari.com
myriamshomes.com
nightmarevue.com
allstarsru.com
bestofthebuckeyestate.com
bestofthefirststate.com
bestwireless7.com
declarationintermittent.com
findhereall.com
jingyou888.com
lsm99deal.com
lsm99galaxy.com
moozatech.com
nuagh.com
patliyo.com
philomenamagikz.net
rckouba.net
saturnunipessoallda.com
tallahasseefrolics.com
thematurehardcore.net
totalenvironment-inthatquietearth.com
velislavakaymakanova.com
vermontenergetic.com
sizam-design.com
kakakpintar.com
begorgeouslady.com
1800birks4u.com
2wheelstogo.com
6strip4you.com
bigdata-world.net
emailandco.net
gacapal.com
jharpost.com
krishnaastro.com
lsm99credit.com
mascalzonicampani.com
sitemapxml.org
thecityslums.net
topagh.com
flairnetwebdesign.com
bangkaeair.com
beneventocoupon.com
noternet.org
oqtive.com
smilebrightrx.com
decollage-etiquette.com
1millionbestdownloads.com
7658.info
bidbass.com
devlopworldtech.com
digitalmarketingrajkot.com
fluginfo.net
naqlafshk.com
passion-decouverte.com
playsirius.com
spacceleratorintl.com
stikyballs.com
top10way.com
yokidsyogurt.com
zszyhl.com
16firthcrescent.com
abogadolaboralistamd.com
apk2wap.com
aromacremeria.com
banparacard.com
bosmanraws.com
businessproviderblog.com
caltonosa.com
calvaryrevivalchurch.org
chastenedsoulwithabrokenheart.com
cheminotsgardcevennes.com
cooksspot.com
cqxzpt.com
deesywig.com
deltacartoonmaps.com
despixelsetdeshommes.com
duocoracaobrasileiro.com
fareshopbd.com
goodpainspills.com
kobisitecdn.com
makaigoods.com
mgs1454.com
piccadillyresidences.com
radiolaondafresca.com
rubendorf.com
searchengineimprov.com
sellmyhrvahome.com
shugahouseessentials.com
sonihullquad.com
subtractkilos.com
valeriekelmansky.com
vipasdigitalmarketing.com
voolivrerj.com
zeelonggroup.com
1015southrockhill.com
10x10b.com
111-online-casinos.com
191cb.com
3665arpentunitd.com
aitesonics.com
bag-shokunin.com
brightotech.com
communication-digitale-services.com
covoakland.org
dariaprimapack.com
freefortniteaccountss.com
gatebizglobal.com
global1entertainmentnews.com
greatytene.com
hiroshiwakita.com
iktodaypk.com
jahatsakong.com
meadowbrookgolfgroup.com
newsbharati.net
platinumstudiosdesign.com
slotxogamesplay.com
strikestaruk.com
trucosdefortnite.com
ufabetrune.com
weddedtowhitmore.com
12940brycecanyonunitb.com
1311dietrichoaks.com
2monarchtraceunit303.com
601legendhill.com
850elaine.com
adieusolasomade.com
andora-ke.com
bestslotxogames.com
cannagomcallen.com
endlesslyhot.com
iestpjva.com
ouqprint.com
pwmaplefest.com
qtylmr.com
rb88betting.com
buscadogues.com
1007macfm.com
born-wild.com
growthinvests.com
promocode-casino.com
proyectogalgoargentina.com
wbthompson-art.com
whitemountainwheels.com
7thavehvl.com
developmethis.com
funkydogbowties.com
travelodgegrandjunction.com
gao-town.com
globalmarketsuite.com
blogshippo.com
hdbka.com
proboards67.com
outletonline-michaelkors.com
kalkis-research.com
thuthuatit.net
buckcash.com
hollistercanada.com
docterror.com
asadart.com
vmayke.org
erwincomputers.com
dirimart.org
okkii.com
loteriasdecehegin.com
mountanalog.com
healingtaobritain.com
ttxmonitor.com
bamthemes.com
nwordpress.com
11bolabonanza.com
avgo.top