La conferencia sobre el clima de Bonn revive las diferencias

En medio de un clima de pesimismo, tras el fracaso de la cumbre de Copenhague del pasado mes de diciembre, se reanudaron ayer en Bonn (Alemania) las negociaciones de la ONU sobre un acuerdo para frenar el cambio clim¨¢tico. Delegados de 175 pa¨ªses intentan fijar un calendario de plazos y de acciones para que a final de a?o pueda sellarse en Canc¨²n (M¨¦xico) un acuerdo vinculante de reducci¨®n de emisiones contaminantes que sustituya al Protocolo de Kioto, una vez este expire en 2013.

Fuera del centro de Conferencias de Bonn, grupos de ecologistas desparramaron cuatro toneladas de cristales rotos. Encima de los vidrios pusieron un cartel que dec¨ªa "Copenhague", y al lado un grupo de personas sujetaba una pancarta con el lema: "?Es tiempo de recoger los trozos!"

La acci¨®n sintetiz¨® en una imagen la atm¨®sfera que acompa?a el encuentro. Hace cuatro meses, Copenhague fue salvada del desastre total en sus ¨²ltimas horas, durante una ronda de diplomacia dirigida por el presidente Barack Obama y otros l¨ªder gubernamentales. El documento redactado en la capital danesa est¨¢ considerado por muchos "un fracaso", ya que se queda m¨¢s bien en mero acuerdo de intenciones no vinculante, en el que los pa¨ªses determinaron cu¨¢les eran sus objetivos de reducci¨®n de emisiones. Los desencuentros entre naciones ricas y pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo marcaron la conferencia.

Ayer volvieron a hacerse evidentes las discrepancias. Distintos delegados de los 175 pa¨ªses pidieron un esfuerzo conjunto para volver a establecer la confianza entre pa¨ªses ricos y pobres. Pero nadie anunci¨® medidas concretas.