La Xunta lleva cuatro meses sin pagar a comedores escolares

El men¨² en el colegio Os Dices del ayuntamiento de Rois (A Coru?a) consisti¨® ayer en bocadillos de jam¨®n serrano y queso y pl¨¢tanos de postre. Y el panorama amenaza con que los bocatas sean tambi¨¦n la comida de los pr¨®ximos d¨ªas. Desde diciembre llevan en el centro sin recibir dinero de la Conseller¨ªa de Educaci¨®n para el comedor y ya no hay m¨¢s presupuesto para los men¨²s ni m¨¢s margen para deber facturas a los proveedores.

La Xunta admite un retraso en los pagos del segundo trimestre del curso -los del primero llegaron cuando ya estaba acabando, a finales de diciembre- y lo achaca a un problema relacionado con el cambio de ejercicio econ¨®mico. Ahora, dicen desde la Conseller¨ªa de Educaci¨®n, est¨¢n intentando agilizar los tr¨¢mites: "Hoy o ma?ana [por ayer y hoy] esperamos ya liberar los pagos". El retraso afecta a todos los centros, ya que los cobros se autorizan por provincias. Educaci¨®n admite que el dinero deber¨ªa haberse abonado a finales de febrero o principios de marzo, a pesar de que el a?o pasado se hizo "el 7 de abril".

La central intersindical CIG Ensino denunci¨® ayer que los colegios que no tienen remanentes "comienza a sufrir problemas con los proveedores por la falta de pagos". "Los centros est¨¢n buscando alternativas", explic¨® su portavoz, Anxo Louzao, como elaborar men¨²s m¨¢s baratos o negociar con los proveedores.

Harto de quejarse de la situaci¨®n a la Xunta, el director del colegio Os Dices, Rodrigo Costoya, tom¨® la decisi¨®n de repartir bocadillos. Pero es consciente de que la situaci¨®n no se puede mantener durante muchos d¨ªas, por equilibrio en la alimentaci¨®n de los ni?os, pero tambi¨¦n por cuestiones monetarias. Costoya calcula que se podr¨¢n mantener "dos o tres d¨ªas m¨¢s" o, quiz¨¢s, "hasta final de semana" porque los m¨¢s peque?os no tienen clase por las tardes los jueves y viernes y no usan el comedor. Si la conseller¨ªa no ingresa el dinero antes, tendr¨¢n que cerrar el comedor, que ya cuenta con una cocinera menos de las que deber¨ªa por n¨²mero de comensales. De las intenciones de Educaci¨®n de agilizar los cobros no saben nada: "No tenemos ning¨²n tipo de comunicaci¨®n oficial. Estamos a la espera".

La idea, sin embargo, no convence a algunos padres, que prefirieron que sus hijos coman estos d¨ªas en su casa, aunque un comedor abarrotado testifica que fueron muy pocos. En el colegio, defiende el director, apuestan siempre por un men¨² variado y equilibrado e incluso reparten fruta a los ni?os en el recreo, pero, por ahora, 190 personas entre alumnos y personal se sientan en el comedor ante unos bocadillos y con una gran pancarta detr¨¢s: "Hoxe bocatas por impagos da Conseller¨ªa de Educaci¨®n".