La paradoja del IVA

Mi posici¨®n sobre la subida del IVA qued¨® bastante clara en otro art¨ªculo publicado, en estas mismas p¨¢ginas, cuando el Gobierno espa?ol tom¨® esta decisi¨®n. La actualizo en dos puntos.

1. La subida del IVA en Espa?a es necesaria a medio plazo por dos razones. Porque va a ayudar a un esfuerzo presupuestario que sit¨²e el d¨¦ficit en la zona del 3% del PIB, evitando as¨ª el incremento de la deuda p¨²blica, que, aun siendo tolerable, se est¨¢ disparando. Y porque no hay ninguna raz¨®n para que el IVA espa?ol sea inferior al de la mayor¨ªa de los pa¨ªses de la zona euro, cosa que permite a otros miembros denunciar la incoherencia de aportar ayudas a Espa?a.

2. Incrementar el IVA cuando todav¨ªa estamos en una situaci¨®n de recesi¨®n es muy arriesgado y no deb¨ªa haberse anunciado a finales de 2009, sin tener la seguridad de que el mal tiempo habr¨ªa pasado a mitad de 2010. Desdecirse ahora de lo que se aprob¨® podr¨ªa ser, tal vez, un error mayor que el de entonces. Quienes ahora lo piden acabar¨ªan denunciando, con raz¨®n, los bandazos del Gobierno.

Las rentas m¨¢s altas contribuyen a la financiaci¨®n del Estado del bienestar por debajo de lo que les corresponder¨ªa

Dicho esto, quiero destacar una paradoja. El IVA es un impuesto claramente regresivo. Se aplica a todos igual y, por tanto, pesa mucho m¨¢s sobre las rentas m¨¢s bajas. Por ello, toda subida debe acompa?arse de un trato favorable a este sector de ciudadanos mediante un IVA reducido sobre un grupo importante de productos b¨¢sicos. Trat¨¢ndose de un impuesto regresivo, llama la atenci¨®n que sean precisamente los partidos de la derecha los que se oponen a la subida y los de la izquierda los que la defienden. Ya s¨¦ que estos est¨¢n gobernando y aquellos, en la oposici¨®n, lo que da perspectivas diferentes. Y tambi¨¦n entiendo que les preocupe un probable efecto negativo sobre el consumo. Pero no puedo dejar de pensar que la posici¨®n en contra no es m¨¢s que un reflejo de una posici¨®n m¨¢s general que piensan convertir en bandera: "No hay que subir ning¨²n impuesto; al contrario, hay que bajarlos".

Me gustar¨ªa examinar esta estrategia, inteligente y de gran impacto electoral, pero cargada de peligros para la convivencia. Las modificaciones introducidas en el sistema fiscal espa?ol desde mitad de la d¨¦cada de 1990 lo han hecho mucho m¨¢s regresivo. En este periodo, las rentas del trabajo (asalariado y aut¨®nomo) se han incrementado poco, y han aumentado mucho m¨¢s las rentas provenientes del capital y de las plusval¨ªas originadas en la inversi¨®n inmobiliaria y financiera. En lugar de aplicar medidas de redistribuci¨®n, finalidad b¨¢sica del sistema fiscal, se ha hecho lo contrario. Se han separado las rentas del trabajo de las del ahorro (incluye las plusval¨ªas). Se ha mantenido la carga fiscal sobre el trabajo (con un techo del 42%) y se ha establecido una escala especial m¨¢s reducida sobre las otras rentas (con una cuota fija del 18%). Y, adem¨¢s, sin modificar las deducciones aplicables a las rentas del trabajo, se han establecido mecanismos (?privilegios?) que permiten reducir de forma importante la tributaci¨®n del resto de rentas, hasta llegar al extremo de los SICAV, que tributan al 1%. Todo ello, junto con la supresi¨®n del impuesto sobre el patrimonio, la pr¨¢ctica desaparici¨®n del impuesto de sucesiones y las nuevas modalidades de retribuci¨®n extra salarial de los altos directivos, han configurado un escenario claramente desequilibrado.

Es muy f¨¢cil hacer demagogia sobre esto, y no la quiero hacer. Pero entiendo que se puede describir la situaci¨®n diciendo que una parte importante del Estado del bienestar en Espa?a (educaci¨®n, sanidad, asistencia a la dependencia, etc¨¦tera) est¨¢ soportado mayoritariamente por los impuestos que pagan las rentas medias y medias-altas (procedentes, sobre todo, del trabajo), mientras que la contribuci¨®n de las rentas m¨¢s altas (especialmente las de tipo financiero o especulativo) es proporcionalmente inferior.

En esta situaci¨®n se me aclara la paradoja del IVA y los partidos de la derecha. La oposici¨®n a la subida del IVA es la oposici¨®n a toda modificaci¨®n fiscal. No toquemos el sistema actual... Y la bandera de la reducci¨®n de impuestos podr¨¢ tener mucho calado electoral en las clases medias...

Yo creo que la bandera que necesitamos es la contraria: reformar el sistema fiscal, hacerlo m¨¢s progresivo, eliminar privilegios y acabar de construir una sociedad m¨¢s cohesionada y equitativa que pueda hacer frente a situaciones como la que las barbaridades financieras internacionales nos han deparado.

Joan Maj¨® es ingeniero y fue ministro de Industria.