De Roma a Barcelona por amor al libro

?Qu¨¦ saben los amantes de la literatura italianos de la Diada de Sant Jordi? La revista Leggere Tutti -180.000 ejemplares gratuitos al mes- se ha propuesto descubrir a Italia la fiesta del libro y la rosa que cada 23 de abril se celebra en Catalu?a. Y como una imagen vale m¨¢s que mil palabras, ha organizado junto a la naviera Grimaldi un crucero literario que ayer por la tarde, tras 20 horas de navegaci¨®n desde el puerto romano de Civitavecchia, desembarc¨® en Barcelona a 800 escritores y lectores italianos que hoy vivir¨¢n su primer Sant Jordi.

Que pocos pasajeros de un crucero suban a cubierta para pasear o tomar el sol en una traves¨ªa de casi un d¨ªa no es frecuente, aunque ayer el cielo plomizo que cubri¨® la autopista mar¨ªtima de Roma a Barcelona invitaba poco a ello. Pero mucho menos frecuente es que los pasajeros de un nav¨ªo, aunque sea de ruta regular entre dos ciudades, paseen por los diversos niveles de puentes con un libro bajo el brazo, que discutan sobre la obra de un escritor en los salones de descanso o las cafeter¨ªas, que festejen los versos de un poeta con ansias de m¨¢s poes¨ªa recitada sin echar ojo al reloj en plena hora del almuerzo y que adquieran un ejemplar de la ¨²ltima novela de un autor y le pidan que se lo dedique.

En 'La nave de los libros', los pasajeros debat¨ªan sobre poes¨ªa en cada rinc¨®n

Todo esto y m¨¢s se ha vivido en la traves¨ªa del crucero literario, bautizado como La nave de los libros, camino de Barcelona. Un crucero que ha unido a lectores y escritores. Autores italianos y tambi¨¦n cinco procedentes de Catalu?a y Baleares con obra traducida en Italia, los cuales viajaron -tres en barco y dos en avi¨®n- a Roma para acompa?ar a su colegas en el trayecto.

Maite Carranza, Pau Faner, Vicen? Llorca, Eduard M¨¢rquez y Marc Pastor son los cinco escritores catalanes que han compartido navegaci¨®n con sus colegas italianos. Ruta, debates y presentaciones, incluso anteanoche se sentaron en un div¨¢n virtual junto a sus colegas italianos para confesarse ante los lectores. No hubo color. Los italianos ganaron por goleada en posesi¨®n de micr¨®fono, egos, filias, fobias e incluso exhibici¨®n de alguna hostilidad. Claro que la moderadora, la directora de Booksweeb.tv, Alessandra Casella, mand¨® a retiro al traductor de castellano al italiano alegando que la concurrencia entend¨ªa a los autores que se expresaban en espa?ol. Lo cual no era del todo cierto y merm¨® las posibilidades de comunicaci¨®n real de los catalanes. Aunque Marc Pastor, autor de La mala mujer, premio Crimen de Tinta, logr¨® su minuto triunfal cuando confes¨® que su verdadera profesi¨®n es la de polic¨ªa cient¨ªfico.

La originalidad de la iniciativa de este crucero literario fue, sin embargo, muy celebrada por Carranza, Faner, Llorca, M¨¢rquez y Pastor, pese a lamentar la escasa atenci¨®n de que fueron objeto. Para ellos, sin embargo, no fue obst¨¢culo contactar con sus lectores italianos, a los que conocieron por primera vez y a los que, incluso, dedicaron sus libros. "No me he podido reprimir y he inmortalizado el momento del encuentro con mi primer lector italiano que conozco. Me he fotrografido con ella, una universitaria que tambi¨¦n conoc¨ªa la obra de Eduard M¨¢rquez", contaba satisfecha Maite Carranza.