Una rosa en la calle, un libro en la mano
Siga aqu¨ª una cr¨®nica en tiempo real de la jornada de Sant Jordi en Barcelona
19.00 Falta una hora para que los cientos de puestos de venta de libros cierren. Libreros, escritores y editores agradecen al dios de la meteorolog¨ªa su benevolencia. No ha llovido. A estas horas no se puede dar un paso por el centro de la ciudad. Miles de personas con su rosa, algunas con una bolsa de libros, algo m¨¢s que esta ma?ana. Es imposible obviar la impresi¨®n, que seguramente ser¨¢ rectificada por los libreros, de que este a?o se han vendido menos libros. Hemos visto a tantos lectores acercarse a sus escritores favoritos con libros llevados de su casa, tan pocas y delgaditas bolsas de libros que es inevitable pensar que la crisis no es ajena a la fiesta, fiesta ciudadana que sigue siendo fabulosa. Corto y cierro.
17.50. Un remanso atronador. Muchos paseantes ya arrastran los pies. Bares y terrazas est¨¢n a rebosar, igual que antes los restaurantes. Vuelve a lucir el sol. Ni amago de lluvia. La primavera es fant¨¢stica. Los m¨¢s cansados buscan refugio en el Palau Robert, en el cruce de Diagonal con Paseo de Gracia, pero es una trampa, ah¨ª no hay tregua. La m¨²sica de la emisora Flashback atrona. Manel Guix hace una versi¨®n de Que tinguem sort, de Llu¨ªs Llach. Los pies se mueven y muchos ojos se humedecen. La megafon¨ªa no es buena, pero la canci¨®n de Llach llega a todos. Aqu¨ª la alegr¨ªa es contagiosa. El tema del Palau Robert oficialmente es contagiemos el catal¨¢n. Cuatro jovencitas cantan ahora Boix per t¨², de Sau. La gente sigue entusiasmada. Si entras en el Palau Robert puedes visitar una exposici¨®n sobre Orhan Pamuk y Estambul. Jaimes, una de nuestras m¨¢s tradicionales librer¨ªas, ha puesto all¨ª una parada. El libro m¨¢s solicitado es un pack con La veritable hist¨°ria de Sant Jordi y una camiseta ad hoc.
17.20 Estoy sentada en un banco de la Diagonal. Ni asomo de lluvia por ahora, afortunadamente, pero ha aumentado el viento y baja un poco la temperatura. En este Sant Jordi espl¨¦ndido, un punto de tristeza. Suso de Toro, que est¨¢ firmando libros en la Illa Diagonal, y disfrutando con ello, dice que ¨¦ste es su ¨²ltimo Sant Jordi. Y que Siete palabras es su ¨²ltimo libro, por ahora. "Vuelvo a dar clases en un instituto en una peque?a poblaci¨®n que est¨¢ a una hora de Santiago de Compostela. Dejo la literatura. Este libro es el final. Estoy contento con ¨¦l. He dicho lo que ten¨ªa que decir. Hay m¨¢s cosas en la vida. Creo que el concepto de autor est¨¢ liquidado y no quiero competir m¨¢s. Ha sido muy duro". Su editor de Alianza Editorial, Manuel Florent¨ªn, dice que "es imposible que Suso no vuelva a escribir. Lo que es probable es que ya no lo haga como escritor profesional, lo har¨¢ cuando le vaya bien, y siempre le vamos a esperar". Suso volver¨¢ a dar clases de literatura y lengua gallega en el mismo instituto donde empez¨® hace muchos a?os. "Probablemente me encontrar¨¦ con los hijos de los que entonces fueron mis alumnos". Me ha dejado el coraz¨®n encogido.
16.37 La tropa de Alfaguara lleg¨® absolutamente derrengada al restaurante de Casa Fuster, en donde tambi¨¦n hab¨ªa editores y escritores de otras firmas repartidos por las mesas, tras de una intensa ma?ana de firmas y de moverse de un lado para otro. Algunos, como Javier Mar¨ªas o Jaime Bayly, decidieron aprovechar el tiempo para descansar. Manuel Rivas estuvo hablando de su pr¨®xima novela y de que est¨¢ pensando seriamente en escribir unas primeras memorias a partir incluso de art¨ªculos que ha publicado en la edici¨®n de El Pa¨ªs en Galicia. Unai Elorriaga se mostraba absolutamente estupefacto. "?Hoy es d¨ªa de fiesta en Barcelona? ?Qu¨¦ hace toda esta gente en la calle?", comentaba. "Te das cuenta en una ocasi¨®n como esta que los escritores escribimos para minor¨ªas, pero aqu¨ª, con tant¨ªsima gente, tantos lectores dando vueltas, te sientes de nuevo en el punto de mira". Pilar Reyes, la directora de Alfaguara, que vive su primer Sant Jordi, estaba exultante: "Es genial. No se trata solo de los r¨ªos de gente sino de este incre¨ªble ritual de regalar el libro y la rosa". Luc¨ªa Etxebarr¨ªa, siempre con el ¨¢nimo por las nubes, dec¨ªa tener "la mano cansada". "En s¨®lo una hora he firmado cien libros", a?ad¨ªa. "Dicen que los catalanes son fr¨ªos, pero son unos lectores muy fieles y cari?osos". La comida era de buffet aunque tambi¨¦n se pod¨ªa escoger servicio en mesa. En el men¨² se encontraba consom¨¦ de marisco, una ensalada de escarola, nueces y queso, carne guisada y varios postres a elegir. De todas maneras, la verdad es que el personal lo que realmente agradec¨ªa era la posibilidad de estar un rato sentado, bebiendo un Vichy o una ca?a, y descansando un rato para tomar fuerzas antes de volver "al tajo". Hemos apurado el caf¨¦ al m¨¢ximo.
16.30 La comida se alarga.
13.45 Me voy a las paradas del libro digital. La de Leqtor.com est¨¢ en Paseo de Gracia a la altura de Consell de Cent y la de Edi.cat se encuentra en Rambla Catalunya con Proven?a. En las dos hay mucha gente y destaca la curiosidad tanto de los mayores como los j¨®venes por averiguar c¨®mo funciona el sistema. Lo tocan, lo miran, grad¨²an la letra (eso les encanta), preguntan si es dif¨ªcil de hacerlo funcionar. En Leqtor dicen que esta ma?ana han vendido cinco lectores digitales (179 euros con el descuento de Sant Jordi; habitualmente vale 199 euros). En Edi-cat sortean un lector digital a trav¨¦s de internet y tambi¨¦n regalas diez t¨ªtulos electr¨®nicos a trav¨¦s de la web. En la parada de Leqtor estaba el escritor Marius Serra charlando con los lectores. "Esto no desplazar¨¢ el papel, pero hay que tenerlo en cuenta. Ser¨¢n sistemas complementarios, pero de todas maneras lo que me interesa m¨¢s es la incorporaci¨®n del audio, que se puedan escuchar tambi¨¦n los libros", comenta. Los de Leqtor aseguran que ya est¨¢n en ello y lo har¨¢n. Esta plataforma re¨²ne a 80 editoriales y ofrece m¨¢s de mil t¨ªtulos, aunque entre llso hay pocas novedades. Durante el d¨ªa, por su tenderete pasar¨¢n otros escritores como Gemma Lienas, Xavier Bosch, Eduard Pasqual o Joan Pera. Afirman que normalmente venden m¨¢s ciberlibros en castellan que en catal¨¢n, pero hoy es al rev¨¦s. Tambi¨¦n ofrecen el sistema de regalo ya que se puede comprar un libro y ellos lo mandan a qui¨¦n quieras. Los de Edi.cat son un plataforma, inicialmente impulsada por Angle, Bromera y Cosset¨¤nia, que re¨²ne ahora a otras 17 editoriales. Ya tienen 480 t¨ªtulos. La gente no para de pedir informaci¨®n. Es tarde. Me voy a la comida de Alfaguara. Volver¨¦ a las cuatro.
13.00 En la carpa de Crackovia, sobredecorada con la imagen de la marca de cerveza que patrocina el programa, hay una aglomeraci¨®n total. All¨ª no venden el libro por lo que todo el mundo lleva el libro ya comprado para que se lo firmen. Ahora escriben su dedicatoria los actores que hacen de Iniesta, ¨¦ste con la cara del personaje, y el que imita al presidente del Espa?ol, S¨¢nchez Llibre, que al natural se ve mucho m¨¢s joven de c¨®mo aparece en pantalla. Al otro lado de Paseo de Gracia est¨¢ la carpa de Ger¨®nimo Stilton. All¨ª un enorme y simp¨¢tico rat¨®n atiende cari?osamente a los peque?os lectores, les firma libros, habla con ellos. Me ha besado la mano. Seguir¨¢n firmando por la tarde. En Paseo de Gracia ya es dif¨ªcil dar un paso.
12.35 El final de La Rambla est¨¢ muy tranquilo. Los retratistas ocupan su plaza de siempre y hay turistas haci¨¦ndose retratos. Sin embargo, las populares figuras humanas han sido absorbidas por la marabunta. En esta zona se encuentran los m¨¢s militantes. Unos te explican porqu¨¦ hay que reformar la Constituci¨®n. Otros te hablan de las bondades de la consulta por la independencia. Hay carteles en los que se puede leer Rep¨²blica de Catalunya. En el momento en que un evangelista te persigue para contarte lo importante que es su religi¨®n, ves que es el momento de salir corriendo hacia el metro.
12.15 Buscando el bookcroosing llegamos al final de La Rambla, en el centro de Arte Santa M¨®nica, con much¨ªsimos puestos de libros de arte. Es la Feria del libro de arte, hasta el 25 de abril.
12.00 Si quieres comprar un p¨®ster del Che Guevara lo puedes encontrar por medio c¨¦ntimo de euro en la parada de la Fundaci¨®n de Estudios Socialistas Federic Engels. Bajando La Rambla puedes encontrar paradas de ONG. Hay un puestecillo muy peque?o de la Fundaci¨®n Joan Amades que est¨¢ teniendo mucho ¨¦xito porque venden unos libros de una colecci¨®n que se llama traducciones populares, muy bonitos, peque?os y que cuestan entre 6 y 8 euros. Hay much¨ªsimos turistas con c¨¢maras tratando de fotografiarlo todo. Se confirma que a esta hora adem¨¢s de colegios hay muchos parados y jubilado.
11.40. La Rambla es un hormiguero. A las diez de la ma?ana la han cortado al tr¨¢fico. Al principio del paseo est¨¢n instaladas las casetas de los partidos pol¨ªticos. Todos repartiendo globos. El que m¨¢s atrae a la gente es el de CiU. En el mostrador, en un lugar muy destacado, tres libros: La M¨¢scara de Artur de Pilar Rahola y los dos vol¨²menes de las memorias de Jordi Pujol. En estos momentos se ven m¨¢s rosas y globos que bolsas de libros. Entre las paradas m¨¢s solicitadas est¨¢ una que vende libros de segunda mano a muy buen precio y la de Central del Raval.
11.25 Casi imposible dar un paso por Pla?a de Catalunya. El Corte Ingl¨¦s ha instalado dos carpas y numerosas paradas. Regala una rosa a qui¨¦n compre un libro. En la carpa n¨²mero uno hay una cola inmensa para conseguir firmas de Quim Monz¨®, Carme Ruscalleda, ?ngeles Caso y Julia Navarro. En la n¨²mero dos, Jordi Punt¨ª y Jordi ?vole, entros otros, tambi¨¦n tienen decenas de seguidores. Hombres y mujeres, todos llevan rosa.
11.15 Regina, segunda parte. Los autores y sus editores y agentes alargaron su estancia en el Regina. Les espera una larga jornada de firmas. Kurdo Baski, autor de Mi amigo Stieg Larsson se ha mostrado muy impresionado por la aglomeraci¨®n, pero puntualiz¨®: "En mi pa¨ªs compramos libros cada semana". ?C¨®mo es posible que un pa¨ªs tan peque?o y apacible produzca tantos librosde novela negra? "La soledad y las largas noches obliga a la gente a leer mucho y nosotros escribimos para ellos".
11. 00 M¨¢s de 200 autores han acudido al tradicional almuerzo del hotel Regina -canap¨¦s, bocadillos, boller¨ªa, zumo de naranja y caf¨¦ con leche. Para tomar fuerzas antes de iniciar el ritual de las firmas. El problema ha sido la foto de familia. No cab¨ªan todos. Carles Sanz y Javier Sard¨¤, ambos con libro nuevo bajo el brazo, rogaron para que no llueva. "Es una fiesta fant¨¢stica y adem¨¢s es en d¨ªa laborable. Inimaginable en cualquier otro lugar", dice Sard¨¤. Manuel Gutierrez Arag¨®n vive su primer Sant Jordi. Ya antes de llegar al Regina se qued¨® pasamado con el ambiente ciudadano. "Es maravilloso que en lugar da manifestaciones y barricadas saquen libros y rosas a la calle. Creo que voy a disfrutar mucho firmando ejemplares de La vida antes de marzo". Con esta novela gan¨® el Herralde.
9.35 Una parada de rosas cada diez metros. Rosas de todos los colores, entre 3 y 4 euros, aunque hay vendedores que ya anuncian bajadas de precios para el mediod¨ªa. Hoy se vender¨¢n seis millones de rosas, un 10% m¨¢s que el a?o pasado. En el barrio de Sants de Barcelona, como en el resto de Catalu?a, Sant Jordi ya est¨¢ en marcha. Las librer¨ªas lo tienen todo preparado para abrir. Esta noche ha llovido en Barcelona, pero de momento el tiempo aguanta. Est¨¢ nublado. Entre los libros que se vender¨¢n hoy est¨¢ el de Julia Navarro, Dan Brown, P¨¦rez Reverte... hay montones en las paradas tambi¨¦n de Lorenzo Silva. En las quinielas tambi¨¦n figura el libro de Crac¨°via o la obra de Idelfonso Falcones. Comida no falta en Sant Jordi. Una c¨¦ntrica pasteler¨ªa del barrio muestra sus dragones de espinacas, sobrasada... unos enormes, otros peque?os, todos con la bandera catalana. Pr¨®xima parada: desayuno en el hotel Regina.
Babelia
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