Mal asunto

Utilizando un s¨ªmil futbol¨ªstico, la tribuna de ?ngel Cabrera Espa?a necesita un Madrid-Bar?a universitario concluye que el mal mayor de la Universidad es la elecci¨®n interna de sus cargos. El remedio propuesto, la designaci¨®n externa, es a la luz de los hechos un proceder inconveniente. Porque si, como se argumenta, deben estar en los consejos independientes que los nombren quienes pagan las facturas, en las universidades p¨²blicas decidir¨¢n los pol¨ªticos. Mal asunto. Al respecto conviene recordar otra reciente tribuna de este peri¨®dico, ?Por qu¨¦ hay tanta corrupci¨®n en Espa?a? La respuesta: demasiados cargos de libre designaci¨®n.

No es ese, sino la mediocridad inherente a no tener un modelo, el mayor mal universitario. Con la abundancia de t¨ªtulos, titulados y publicaciones se prima la mediocridad. Y con la docencia ninguneada, ?cu¨¢n lejos queda la reflexi¨®n de Ortega! No decidir¨¢ en la elecci¨®n del profesorado universitario el rango que como investigador posee el candidato, sino s¨®lo su talento sint¨¦tico y sus dotes de profesor. La promoci¨®n del profesor va ligada a sus publicaciones, aunque ¨¦stas den respuesta a preguntas que nadie hace. No extra?a que se afane en fraccionar su investigaci¨®n, a costa de la calidad, en MPU (Minimum Publishible Unit, "unidad m¨ªnima publicable").

S¨®lo primando desde el principio la calidad sobre la cantidad (en el s¨ªmil futbol¨ªstico utilizado, equivale a cuidar el f¨²tbol base) competiremos de manera sostenible con los mejores. Conviene recordar que muchos equipos de ¨¦lite acaban, mientras suspiran por una recalificaci¨®n urban¨ªstica que lo remedie, arruinados.