Primer trasplante de rostro completo
El joven, operado en Vall d'Hebr¨®n, podr¨¢ comer tras cinco a?os
Perdi¨® toda su cara hace cinco a?os por un accidente. Ni mand¨ªbula, ni nariz, ni p¨®mulos. Para comer y respirar, el joven necesitaba estar entubado. Tampoco pod¨ªa hablar. Hab¨ªa pasado ya por nueve operaciones que no hab¨ªan servido de nada. Hace tres semanas un equipo del hospital de la Vall d'Hebr¨®n en Barcelona le practic¨® un trasplante de cara, el primero total del mundo, seg¨²n los m¨¦dicos. "Agradecemos al paciente su confianza, es una cirug¨ªa a vida o muerte", dijo Joan Pere Barret, jefe del Servicio de Cirug¨ªa Pl¨¢stica y Quemados del hospital. El paciente contin¨²a ingresado. Su evoluci¨®n es buena, pero a¨²n no puede comer porque no debe forzar la musculatura facial tras la compleja operaci¨®n. En todo caso, la nueva mand¨ªbula y la nueva musculatura le permitir¨¢n volver a masticar en breve.
Hasta ahora se hab¨ªa realizado una decena de trasplantes de cara parciales en varios centros del mundo. El primero, en 2005 en Francia. En Espa?a, el primer trasplante parcial de cara lo efectu¨® el pasado verano Pedro Cavadas, en el hospital La Fe, de Valencia; el segundo fue en el Virgen del Roc¨ªo, en Sevilla.
La intervenci¨®n del trasplante total dur¨® 24 horas y cont¨® con la participaci¨®n de un equipo de 30 profesionales. En primer lugar, se le extrajo toda la cara al donante, sobre el que no se ha dado ning¨²n dato para preservar su intimidad. Los m¨¦dicos realizaron un minucioso trabajo para extraer los huesos de la mand¨ªbula, la nariz, los p¨®mulos y parte de la cavidad de los ojos, y todos los tejidos blandos de la cara, incluyendo la musculatura, las venas y los nervios "que dan movilidad a la cara, a los p¨¢rpados y la boca" una vez trasplantada, explic¨® Barret. Mientras, se preparaba la cara del receptor, extirp¨¢ndole las partes deformes de la cara y dejando a raya su sistema inmune para evitar el rechazo.
Para trasplantar la cara al enfermo se tuvieron que reconectar cuatro venas yugulares, adaptar los huesos extra¨ªdos a la cara del receptor y unir toda la musculatura y los vasos sangu¨ªneos. "Una cara no sirve de nada si no se mueve", afirma Barret. La cicatriz rodea todo el rostro, pasando por donde se encuentra la ra¨ªz del pelo, las orejas y por debajo de la barbilla, ya que tambi¨¦n se ha trasplantado una parte del cuello.
Ahora, el receptor continuar¨¢ ingresado y empezar¨¢ con una dieta blanda cuando las pruebas para evaluar su capacidad de degluci¨®n sean positivas. A¨²n necesita respiraci¨®n artificial. Para recuperar otras funciones como el habla, la respiraci¨®n e incluso sonre¨ªr, deber¨¢ realizar ejercicios de rehabilitaci¨®n. Barret relat¨® que una semana despu¨¦s de la intervenci¨®n el paciente pidi¨® mirarse al espejo y se mostr¨® satisfecho con el resultado. Los familiares del receptor afirman que su fisonom¨ªa es similar a la que ten¨ªa hace cinco a?os, cuando a¨²n no hab¨ªa pasado por el accidente que le cost¨® la cara.
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