La Xunta mete el bistur¨ª
Los recortes presupuestarios enervan a los sindicatos del hospital de A Coru?a - En Cotobade no saben nada de la prometida reforma del centro de salud
Varias unidades del Complejo Hospitalario Universitario de A Coru?a ya funcionan desde hace tiempo con "d¨¦ficit hist¨®rico" de enfermeras -la plantilla lleva cinco a?os congelada- y todas las alarmas se dispararon con la reestructuraci¨®n de personal que la gerencia del centro anunci¨® a partir de junio como "experimental" pero con ¨¢nimo de mantenerla definitivamente tras el verano. El recorte en las dos salas de traumatolog¨ªa, que suman 49 camas y hasta ahora atendidas por 24 sanitarias, eliminar¨¢ cinco enfermeras y obligar¨¢ a dejar en el turno de noche a una ¨²nica profesional por sala en un servicio en el que los pacientes, con movilidad muy reducida y mayores, suelen ser muy dependientes.
"La situaci¨®n laboral se hace insostenible", asegura N¨²?ez, del CSIF de A Coru?a
Sanidade ignora tres peticiones de entrevista de los vecinos de Cotobade
Todos los sindicatos se han aliado contra los planes de la direcci¨®n del complejo, ya que agravan considerablemente el caso, denunciado pero nunca solucionado, de otras unidades como la de rehabilitaci¨®n en el centro de Oza (41 camas), de otorrino (30) en el hospital Materno o de m¨¢xilofacial (21). Estos servicios tambi¨¦n funcionan con una ¨²nica enfermera en los turnos de noche. "Es una aberraci¨®n y una temeridad, por mucho auxiliar que haya, ante cualquier emergencia o urgencia, se desatiende todos los dem¨¢s pacientes", se indigna Graciela N¨²?ez, del sindicato CSIF. "Vamos a seguir peleando porque es una rebaja considerable de la calidad asistencial", corrobora Mercedes Borque, del Sindicato de Enfermer¨ªa Satse.
El recorte a¨²n est¨¢ en estudio pero se aplicar¨¢ de facto desde el 1 de junio, dado que se cambiaron sin avisar turnos de vacaciones para reducir la enfermer¨ªa en traumatolog¨ªa. "Si hay alguna urgencia durante la noche que venga a echar una mano la enfermera del servicio de enfrente". Esta fue la respuesta, seg¨²n N¨²?ez, de la gerencia cuando se plante¨® la imposibilidad de dejar un ¨²nico sanitario a cargo de 24 camas.
En la unidad de rehabilitaci¨®n de Oza, un centro de referencia para toda Galicia, ya hubo varias denuncias del personal tras noches en las que se dieron dos o tres urgencias a la vez y la imposibilidad de atenderlas todas. Son 41 camas, con pacientes en algunos casos muy dependientes con da?os neur¨¢lgicos o f¨ªsicos y necesitados de atenci¨®n especial para alimentarse o moverse, destacan desde el CSIF. "La situaci¨®n laboral se hace insostenible", afirma N¨²?ez.
Los planes de reestructuraci¨®n del personal de Enfermer¨ªa en el hospital coru?¨¦s tambi¨¦n afectan al servicio de transfusi¨®n y el banco de sangre, atendidos ahora por 21 enfermeras y siete t¨¦cnicos de laboratorio. A partir de octubre se pretende reducir de 28 a 19 ese personal, eliminando 11 sanitarios y aumentando en tres el n¨²mero de t¨¦cnicos. "No es ninguna co?a andar con la sangre, se requiere personal especializado para las donaciones, preparar las plaquetas, atender las demandas", subraya Borque. Reducir personal en determinadas unidades para intentar cubrir "d¨¦ficits" en otras, sin aumentar la plantilla, agrava, para todos los sindicatos de la junta personal, una situaci¨®n en precario. Desde 2009, recuerda la secretaria general del Satse-Galicia Carmen Garc¨ªa no se cubren las sustituciones durante los turnos de vacaciones.
Consultas militares
Cotobade, en Pontevedra, anda estos d¨ªas revuelto por el tijeretazo que la Xunta ha realizado a los servicios sanitarios del municipio, donde estaba ya adjudicado por el anterior Gobierno aut¨®nomo un contrato para reformar uno de los dos centros de salud. "Entra agua por la cubierta, la calefacci¨®n es m¨ªnima, no tiene accesibilidad y hay carencias estructurales y tecnol¨®gicas", explica el portavoz del BNG Emilio Iglesias. Tanto es as¨ª que no tiene "nada de medios, ning¨²n tipo de tecnolog¨ªa nueva, no se puede hacer ninguna prueba, no hay ni conexi¨®n a Internet". Precisamente durante el pleno del jueves, el Bloque present¨® una moci¨®n para conocer los avances realizados por el Ejecutivo de Feij¨®o en la construcci¨®n de un nuevo edificio, como hab¨ªan prometido.
Los vecinos de Cotobade m¨¢s afortunados, los menos, acuden al nuevo centro de salud que con un ¨²nico m¨¦dico ronda el millar de tarjetas sanitarias. No obstante, el viejo aglutina el doble de usuarios pese a no disponer "de medios tecnol¨®gicos ni de m¨ªnimas condiciones sanitarias" que garanticen tratamiento adecuado. El edificio conserva las precariedades de una antigua escuela unitaria reformada hace dos d¨¦cadas "echando dos placas y poco m¨¢s" para acoger un centro m¨¦dico. Desde entonces, apenas se han acometido "labores de mantenimiento" que pueden costear las limitadas arcas municipales. Dos m¨¦dicos pasan consulta en despachos donde sus herramientas se reducen a "una mesa, un armario- botiqu¨ªn y una camilla de consulta militar, vamos, como las de la mili". El cuadro se completa con una sala de espera y otra de pediatr¨ªa "que tampoco re¨²ne las condiciones m¨ªnimas".
Al malestar de la falta de noticias se suma ahora el saber que en la reuni¨®n que se celebr¨® el pasado noviembre con vecinos y portavoces municipales y en la que el Sergas "plante¨® la posibilidad de construir un nuevo centro, ya sab¨ªan de antemano que se hab¨ªa rescindido el contrato para reformar el actual". Una noticia que no ha ca¨ªdo bien entre los vecinos, que se sienten enga?ados porque tampoco han recibido contestaci¨®n a las tres entrevistas pedidas a la Conseller¨ªa de Sanidade para avanzar sobre este asunto.
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