Cuidado con pasarse de frenada

Si al ciudadano se le pregunta c¨®mo se ha comportado el sistema financiero espa?ol durante la crisis, la mayor¨ªa de las opiniones ser¨¢n negativas. En la calle se percibe que mientras las entidades (y sus ejecutivos) siguen ganando mucho dinero, el grifo del cr¨¦dito se ha cerrado. Sin embargo, los bancos espa?oles han demostrado una resistencia ante la crisis mayor que la mayor¨ªa de sus hom¨®logos. Las turbulencias financieras han obligado al Gobierno a desarrollar algunos mecanismos de ayudas -fondo de adquisici¨®n de activos financieros, avales del Estado para las emisiones de bonos o el FROB-, pero en Espa?a no se ha tenido que usar dinero p¨²blico para rescatar de la quiebra a buena parte del sistema como s¨ª ha ocurrido en EE UU, Reino Unido, Francia o Alemania.

Para Bot¨ªn, el tama?o no es el problema, sino el excesivo riesgo

Gonz¨¢lez pide que se vendan los bancos inviables sin ayudas p¨²blicas

En este contexto, los actores del sistema financiero espa?ol reconocen la necesidad de introducir cambios para que una crisis bancaria no vuelva a poner en jaque nunca m¨¢s la econom¨ªa mundial. Pero, amparados por la legitimidad que les otorga haber sobrevivido a las turbulencias en mejores condiciones que el resto, alertan de los peligros que supondr¨ªa un exceso de regulaci¨®n.

El Banco de Espa?a ha sido puesto como ejemplo de c¨®mo hacer las cosas durante la crisis. Su sistema de supervisi¨®n y algunos mecanismos conservadores en su normativa, como las provisiones antic¨ªclicas, han sido eficaces. El pasado 13 de abril, el gobernador de la instituci¨®n, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, inaugur¨® unas jornadas en Madrid con un discurso sobre las reformas que se avecinan. "El terremoto regulatorio internacional va a significar un cambio sustancial en el contexto de actuaci¨®n de los actores del sistema financiero de todos los pa¨ªses", advirti¨®. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez cree que las entidades espa?olas ya han empezado a prepararse. "Han comenzado a aumentar sus niveles de capital, en particular el de mejor calidad, adelant¨¢ndose a futuras exigencias regulatorias y fortaleciendo su solvencia. En el ¨¢mbito de la liquidez, han prestado siempre atenci¨®n a este tipo de riesgo, como demuestran sus emisiones de bonos o las titulizaciones a largo plazo".

El gobernador cree que no basta llenar el sistema de nuevas normas y es partidario de mejorar la supervisi¨®n. "La crisis financiera ha revelado la existencia en algunas jurisdicciones de importantes fallos en la supervisi¨®n, con lo cual algunas entidades terminaron acumulando riesgos excesivos", dijo. "Para conseguir una supervisi¨®n internacional efectiva, el primer paso es asegurar una supervisi¨®n nacional de buena calidad. El segundo paso es promover la convergencia de la mayor¨ªa de los pa¨ªses hacia unos est¨¢ndares supervisores homog¨¦neos".

Y termin¨® su discurso con un aviso para navegantes: "Habr¨¢ que admitir que esta nueva banca, por definici¨®n, va a estar menos dispuesta a prestar a actividades empresariales con determinado nivel de riesgo. Como se suele decir, no se puede sorber y soplar al mismo tiempo". Por ello, el nuevo sistema deber¨ªa estudiar, seg¨²n Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, la forma en que los emprendedores puedan contar con financiaci¨®n para sus proyectos.

Quiz¨¢ el banquero que m¨¢s claro ha hablado sobre la reforma del sistema haya sido Emilio Bot¨ªn, presidente del Banco Santander. Bot¨ªn expuso su opini¨®n durante el discurso que dio en la Conferencia de Banca Internacional, celebrada en Boadilla del Monte (Madrid) el 17 de noviembre de 2009. "Se necesita un equilibrio entre supervisi¨®n y regulaci¨®n. Los sistemas bancarios que han resistido mejor la crisis son aquellos precisamente donde existe una supervisi¨®n bancaria m¨¢s estrecha".

Una de las lecciones m¨¢s importantes de la crisis, seg¨²n Bot¨ªn, es que no se debe infravalorar el riesgo. "Pero no por ello debemos pasar al otro lado de la balanza y establecer indiscriminadamente mayores requisitos de capital, que afectar¨¢n al coste y accesibilidad del cr¨¦dito". "Estoy de acuerdo con la idea de a m¨¢s riesgo, m¨¢s exigencias de capital". Otra ense?anza es la importancia de la liquidez. Y, de nuevo, el problema no se resuelve necesariamente con m¨¢s regulaci¨®n. "Aqu¨ª tambi¨¦n es clave el papel del supervisor. Los niveles de liquidez deben responder a la estructura de balance y al modelo de negocio de cada entidad. Es importante que la definici¨®n de liquidez no responda a criterios meramente cuantitativos", explic¨® Bot¨ªn.

El Bot¨ªn m¨¢s beligerante surge contra la idea de limitar el tama?o de las entidades para evitar el riesgo sist¨¦mico. "Limitar o penalizar el tama?o de las entidades con m¨¢s requisitos de capital no soluciona el problema. Y, sin embargo, puede tener consecuencias adversas como penalizar los flujos financieros a la econom¨ªa real. Las entidades grandes e internacionales son necesarias". "Lo que hay que vigilar, y en su caso restringir, es el riesgo excesivo, no el tama?o por el tama?o".

Francisco Gonz¨¢lez, presidente del BBVA, dio su opini¨®n sobre las reformas en la ¨²ltima junta de accionistas del banco, celebrada el pasado 13 de marzo. "Defendemos una regulaci¨®n que impulse la transparencia, evite los conflictos de inter¨¦s, establezca requerimientos de capital m¨¢s exigentes y limite de manera eficaz el apalancamiento". Las nuevas reglas, seg¨²n Gonz¨¢lez, deben servir para asegurar una financiaci¨®n m¨¢s estable de las entidades y contrarrestar el car¨¢cter proc¨ªclico del cr¨¦dito bancario. "Este esquema habr¨¢ de ser m¨¢s exigente que el actual, pero se debe evitar la sobrerregulaci¨®n", advirti¨®.

Junto con la nueva regulaci¨®n, Gonz¨¢lez record¨® que hay otro problema por solucionar. "Existen entidades que se han beneficiado de ayudas p¨²blicas como consecuencia de sus propios errores. Con esos fondos est¨¢n compitiendo con ventaja con las pocas entidades, como BBVA, que no han cometido errores y no han necesitado ayudas. Por eso es importante que las entidades inviables sin ayudas p¨²blicas sean reestructuradas y adjudicarlas a los agentes privados m¨¢s s¨®lidos". -