"Buscamos socios privados para infraestructuras militares"
"No vamos a invertir en sistemas que no vayamos a usar y tampoco vamos a gastar el dinero que no tenemos", advierte el secretario de Estado de Defensa, Constantino M¨¦ndez Mart¨ªnez (Pontecesures, Pontevedra, 1950). Parece una perogrullada, pero no siempre ha sido as¨ª.
Pregunta. Defensa, como ministerio inversor, se enfrenta a un ajuste muy duro para contribuir a la reducci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico. ?C¨®mo lo afronta?
Respuesta. Con las dificultades obvias. Para nosotros supone un enorme esfuerzo el plan de austeridad, pero no podemos ser ajenos a la situaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs. Tenemos que gestionar mejor y obtener mejores resultados con menos recursos.
P. Usted calific¨® de "aut¨¦ntico fest¨ªn del gasto" la gesti¨®n de los Gobiernos del PP.
"No compraremos lo que no usamos ni gastaremos lo que no tenemos"
"El nuevo veh¨ªculo 8 - 8 se adjudicar¨¢ en el primer semestre de 2011"
R. Fue una forma dulce de referirme a un grav¨ªsimo problema. El esfuerzo por proporcionar a nuestras Fuerzas Armadas los m¨¢s modernos sistemas fue positivo, pero nadie reflej¨® con claridad los compromisos de gasto que se asum¨ªan para el futuro. Ahora nos toca gestionar una deuda que no contrajimos.
P. La deuda asciende a unos 27.000 millones de euros. ?C¨®mo se va a pagar?
R. Estamos negociando con Hacienda e Industria. Tenga en cuenta que la cuota anual, que en 2008 era de unos 700 millones, superar¨¢ los 1.000 en 2011, con un cap¨ªtulo de inversiones de menos de 1.500. No puede ser que el pago de la adquisici¨®n de los sistemas de armas nos deje sin recursos para mantener esos mismos sistemas o atender las prioridades de las Fuerzas Armadas, que son b¨¢sicamente seguridad, transporte, inteligencia, observaci¨®n, mando y control... Aquellas capacidades que nos permiten actuar en zona de operaciones con la m¨¢xima seguridad para nuestras tropas. Queremos alargar el calendario de pagos en cinco a?os, hasta 2030.
P. ?Tiene sentido mantener el compromiso de comprar 87 aviones de combate Eurofighter?
R. No ser¨¢ extra?o que en los pr¨®ximos meses recortemos el tama?o de algunos programas cuya capacidad ya est¨¢ adquirida. Estamos revisando todos para ver su prioridad y si su dimensi¨®n est¨¢ por encima de las necesidades reales de las Fuerzas Armadas. En el caso del Eurofighter, los cuatro pa¨ªses socios nos estamos replanteando la tranche 3B, que para Espa?a supone 12 aviones. Si hay ventas a terceros pa¨ªses, ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil revisar la cifra total. Estamos trabajando en las exportaciones para recuperar parte de la inversi¨®n.
P. ?Cu¨¢nto supone para Espa?a el sobrecoste del A400M?
R. El sobrecoste de la cuota de participaci¨®n en el programa supone 350 millones. Adem¨¢s habr¨¢ que aportar un pr¨¦stamo de otros 225, aproximadamente.
P. ?Y sigue siendo rentable?
R. Absolutamente. Proporciona una capacidad militar imprescindible, pero tambi¨¦n es rentable en t¨¦rminos tecnol¨®gicos e industriales. Para Espa?a supone unos 2.000 empleos directos y hasta 5.000 indirectos, al menos hasta 2025.
P. ?Se plantea dar entrada al capital privado en la financiaci¨®n de infraestructuras, como ha hecho Fomento?
R. Nuestra legislaci¨®n no facilita el partenariado p¨²blico-privado como en el mundo anglosaj¨®n, pero tampoco lo impide, y estamos explorando ya esas f¨®rmulas. Se trata de que el sector privado financie la construcci¨®n de nuevas infraestructuras y se haga cargo tambi¨¦n de su sostenimiento -limpieza, electricidad, seguridad, etc¨¦tera-, de forma que el pago no se haga de una sola vez como hasta ahora, sino fraccionado en el tiempo, durante un periodo de hasta 30 a?os, englobando ambos conceptos. Estamos trabajando en los pliegos y condiciones para aplicar este modelo al concurso de la nueva sede del Estado Mayor de la Defensa o al Plan Nogal de infraestructuras del Ej¨¦rcito de Tierra. Tambi¨¦n estamos interesados en rentabilizar la capacidad excedentaria de instalaciones militares, como las maestranzas del Ej¨¦rcito del Aire, en colaboraci¨®n con el sector privado. Eso nos permitir¨¢ obtener ingresos por instalaciones desocupadas, y a las Fuerzas Armadas, dedicarse a sus tareas espec¨ªficas. Queremos utilizar una f¨®rmula similar en los sistemas de armas que tenga en cuenta no s¨®lo el coste de la adquisici¨®n, sino el del sostenimiento, lo que se aplicar¨¢ ya al 8 - 8.
P. El programa del nuevo veh¨ªculo 8 - 8 ya lleva retraso...
R. Someteremos al Consejo de Ministros el programa 8 - 8 despu¨¦s de que se apruebe el plan de ajuste, porque ¨¦ste nos va a fijar a todos el horizonte financiero. Nuestra previsi¨®n es aprobarlo este a?o y hacer la adjudicaci¨®n en el primer semestre de 2011. Ser¨¢n 300 veh¨ªculos en una primera fase, por unos 1.500 millones.
P. ?Y es compatible ese gasto con la reducci¨®n del d¨¦ficit?
R. S¨ª, porque el grueso de las entregas se producir¨¢ en los a?os 2014 a 2016, una vez concluido el plan de ajuste. -
Vacas flacas para la industria
"La industria debe ser consciente de que ha concluido un ciclo de modernizaci¨®n y pasar¨¢ mucho tiempo hasta que se planteen inversiones de una envergadura similar", advierte Constantino M¨¦ndez. "Esta situaci¨®n coincide con un contexto de restricciones presupuestarias, y aunque quisi¨¦ramos alargar ese ciclo, no podr¨ªamos. Finalmente, han cambiado las prioridades y los nuevos sistemas son menos onerosos", subraya.
La industria espa?ola de Defensa -850 empresas, unos 3.600 millones de euros de facturaci¨®n, 18.000 empleos directos y 50.000 indirectos- se enfrenta a a?os de vacas flacas. Su cartera de exportaciones -el 40% de la producci¨®n- deber¨¢ crecer si quiere sobrevivir. La alternativa es la reconversi¨®n.
"Es una industria que se ha cualificado, tecnol¨®gicamente madura y en condiciones m¨¢s que razonables para salir adelante. Hay nichos de actividad en los que nuestras empresas tienen nivel de excelencia. Pero se enfrenta a graves retos. Ya no puede vivir s¨®lo del presupuesto del Estado". ?Es necesaria la reestructuraci¨®n? "No tengo ninguna duda", responde. "Tenemos un sector muy atomizado, con m¨²ltiples actores y duplicidades, aunque el 80% de la facturaci¨®n corresponde a las cuatro grandes (Navantia, Santa B¨¢rbara Sistemas, EADS e Indra). Estamos decididos a apoyarlas e impulsar su internacionalizaci¨®n". "Es verdad", reconoce, "que hemos tardado en tomar conciencia de la importancia de tener una pol¨ªtica de exportaci¨®n. Ese proceso debe apoyarse en la marca Espa?a, que es muy buena: somos un pa¨ªs seguro, que atiende bien a los clientes. Pero debemos acompa?ar a las empresas con las relaciones entre gobiernos, algo que otros pa¨ªses hacen con naturalidad; por eso hemos creado una consultar¨ªa de apoyo de la exportaci¨®n, CIDIS, dentro de la empresa p¨²blica Isdefe".
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