Garz¨®n orden¨® las escuchas para evitar la evasi¨®n de los fondos G¨¹rtel

El juez Baltasar Garz¨®n compareci¨® ayer a declarar por tercera vez ante el Tribunal Supremo, en esta ocasi¨®n sobre las escuchas ordenadas a los principales implicados de la trama corrupta G¨¹rtel con sus abogados en prisi¨®n. Garz¨®n asegur¨® ante el magistrado instructor, Alberto Jorge Barreiro, que su intenci¨®n al intervenir las comunicaciones no era enterarse de la estrategia ni limitar los derechos de defensa de los abogados, sino investigar una trama de especial complejidad y evitar que los fondos de la trama corrupta saliesen de Espa?a.

El juez record¨® que los abogados imputados Jos¨¦ Ram¨®n Blanco Bal¨ªn y Manuel Delgado Sol¨ªs hab¨ªan organizado la estructura empresarial y los movimientos de dinero y ten¨ªan la misi¨®n de desvincular de las acusaciones al cerebro de la trama, Francisco Correa. Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, Garz¨®n explic¨® que otros dos abogados, Luis Miguel P¨¦rez y Jos¨¦ Antonio L¨®pez Rubal, Pepechu, colaboraron en los movimientos de salida de capitales. Otros dos letrados, uno de ellos Arturo Gianfranco Massana, ten¨ªan encomendado el env¨ªo de los fondos a Suiza y Estados Unidos.

Crimen organizado

Despu¨¦s de que estos letrados fueran imputados, Garz¨®n decidi¨® mantener las escuchas al tener indicios de que Correa y su lugarteniente Pablo Crespo no iban a cejar en su empe?o, y era factible que transmitieran informaciones a trav¨¦s de los nuevos letrados, incluso sin que ¨¦stos fueran conscientes de que les estaban utilizando. Garz¨®n precis¨® que esa t¨¦cnica es muy utilizada por las redes del crimen organizado. Posteriormente, y a instancias del fiscal, orden¨® expurgar las conversaciones que afectaban a la estrategia de defensa.

A preguntas del juez Barreiro, Garz¨®n dijo que orden¨® las escuchas al amparo de la Ley Penitenciaria -que exige la autorizaci¨®n judicial y para casos de terrorismo- porque los imputados estaban en un centro penitenciario. Pero tambi¨¦n cit¨® "los dem¨¢s art¨ªculos de pertinente y general aplicaci¨®n", entre los cuales est¨¢ el 579 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal , que no excluyen las escuchas en prisi¨®n.

El imputado no contest¨® a las preguntas de los abogados de la acusaci¨®n, entre los que estaban sus antiguos compa?eros, el ex juez Jos¨¦ Antonio Chocl¨¢n y el ex fiscal Ignacio Pel¨¢ez. A la salida, Pel¨¢ez se quej¨® de que el Colegio de Madrid no apoye su querella.