Una Espa?a sin fantasmas
La selecci¨®n, menos cosida pero m¨¢s directa, se redime ante Honduras y solo le falta punter¨ªa
Entre las virtudes de cualquiera debiera prevalecer conocer sus defectos. Espa?a, su selecci¨®n, es un equipo con conciencia, repleto de chicos aplicados que interiorizan muy bien el juego y sus axiomas. Mayoritariamente, les gusta el f¨²tbol, lo que no es ninguna perogrullada. Por ello saben diagnosticarse y cu¨¢l es la receta. Tambi¨¦n Vicente del Bosque, que propicia la reflexi¨®n desde la mesura y el respeto, incluso cuando no recibe consuelo de su predecesor, que ha roto su silencio para poner banderillas en las millonarias ondas ¨¢rabes. A solas y en paz, Del Bosque y sus futbolistas rebobinaron el duelo con Suiza, tomaron apuntes y Espa?a, con el mismo credo, fue otra. Nada de abanicar la pelota como un tr¨¢mite funcionarial. Ante Honduras, la selecci¨®n tambi¨¦n gravit¨® sobre el bal¨®n, pero con el turbo de Navas y Fernando Torres, con la idea de percutir, de agrietar al adversario. No fue el equipo pulcro, pero de vuelo raso del primer d¨ªa. Todo tuvo mayor consistencia, peor intenci¨®n y Espa?a de nuevo fue Espa?a, caballera con la pelota, inquilina del ¨¢rea rival, bien abrochada en la propia y, sobre todo, sabia y humilde para la rectificaci¨®n. Ahora su camino es otro, ha recuperado el paso tras un leve accidente. Eso se recordar¨¢ si no hay vuelta atr¨¢s el viernes ante Chile.
Fernando Torres y Navas son id¨®neos para dar cilindrada al conjunto
La alineaci¨®n de Navas y Torres fue toda una se?al de humo. Dos futbolistas vertiginosos y picantes, id¨®neos para dar mayor cilindrada al equipo. No es que Silva e Iniesta, titulares ante Suiza, sean prescindibles, ni mucho menos, pero en su faena hay multitud y la selecci¨®n requiere m¨¢s registros. Por suerte para Del Bosque, abundan los recursos. El efecto de la mutaci¨®n se hizo patente desde el inicio. Con Torres, Villa no es el punto final del ataque. El Guaje se siente mejor si se ancla en la izquierda. Al gol no necesariamente se llega de frente. Para Villa, el costado no es m¨¢s que un atajo. Ante los hondure?os, le bastaron 15 minutos para rematar m¨¢s cicuta que en toda la tarde ante los suizos. Su prematuro estacazo al larguero de Valladares fue preludio del primer gol. A un pase en diagonal con escuadra y cartab¨®n de Piqu¨¦, respondi¨® Villa en estado puro, con tres rivales cayendo del tendal a su paso hacia la red, conquistada con un remate en arco. Un gol de delantero may¨²sculo: control, regate y disparo, tres arietes en uno. La diana fue sedante para Espa?a, que se sacudi¨® cualquier atisbo fatalista, m¨¢xime tras los petardazos de Yuichi Nishimura, un El Ghandour a la japonesa mudo ante un manotazo de Izaguirre tras un sombrero de Torres y un empuj¨®n de Mendoza con Ramos a una cuarta de la l¨ªnea de gol.
El cambio de tercio no solo activ¨® a Villa, que tambi¨¦n actu¨® de analg¨¦sico tras el descanso, con un segundo gol. En la zona orbital del juego, Xavi, Alonso y Busquets se sintieron m¨¢s libres sin otro centrocampista. A los dos primeros, sobre a todo al azulgrana, les beneficia jugar con extremos (Navas y Villa), con compa?eros que exijan la pelota al espacio. Entonces, sus opciones de asistencia se multiplican, sus pases son m¨¢s de ida que de ida y vuelta. Tambi¨¦n aplaudi¨® Busquets, nada que ver con el futbolista acartonado de la primera jornada. Anoche fue el eslab¨®n perfecto, solidario con los defensas, auxiliar de los medios y, en ocasiones, padrino de los delanteros. Templado, Busquets aparenta muchas m¨¢s horas de vuelo de las que tiene. Conoce los entresijos del f¨²tbol barrial, donde el juego se desarrolla en un campo de minas, y la academia azulgrana le ha dado un trazo m¨¢s sutil.
Reconstruida Espa?a, el partido se jug¨® a su antojo. Los chicos de Del Bosque bajaron notablemente sus porcentajes de posesi¨®n respecto al fallido reto con Suiza. El ¨²nico motivo, el juego m¨¢s directo, la catarata de acciones que tuvieron un inicio y un desenlace ante la meta centroamericana. Se dir¨¢ que Honduras no es un equipo "oscarizado", pero tampoco lo son Nueva Zelanda y Argelia, por ejemplo, y han causado alg¨²n se¨ªsmo. La selecci¨®n de Reinaldo Rueda es un grupo muy atl¨¦tico, fibroso, pero corto de ingenio. Su f¨²tbol no tiene her¨¢ldica y le falta cuajo. Opuso toda la resistencia que pudo ante un rival que bien le pudo haber destripado. Con Torres a la cabeza, el conjunto de Del Bosque pas¨® la noche en la sala de espera del gol. Fall¨® no menos de una docena de ocasiones que cualquier otro d¨ªa le hubieran condenado, incluido un penalti que se le fue a Villa. Tras la lesi¨®n, Torres a¨²n no tiene tacto y el gol necesita mimos. Se le vio desesperado, pero precisa paciencia. Su primera victoria ya la tiene, haber logrado llegar con el alta al Mundial. Con su sola presencia, Espa?a se estira, se vuelve profunda. No solo Torres se alter¨® a un cent¨ªmetro del gol. Al equipo le pudo la ansiedad, le falt¨® precisi¨®n y, a veces, le sobraron arabescos. Pero anoche la cuesti¨®n era otra. Hab¨ªa que medir la reacci¨®n an¨ªmica y futbol¨ªstica de un equipo que se vio en el despe?adero cuando menos lo esperaba. Reaccion¨® Espa?a, sabios como son sus jugadores y su t¨¦cnico. A¨²n le queda faena con Chile. Pero Suiza pesa mucho menos.
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