"Hoy bien, pero me da miedo la semana que viene"
Los servicios m¨ªnimos devolvieron algo de normalidad ayer al metro de Madrid por segundo d¨ªa consecutivo. La jornada se vivi¨® entre los pasajeros con cierta tranquilidad (a pesar de las esperas y apretones algo mayores de lo normal) pero, tambi¨¦n, mucha inquietud ante el futuro. "Yo estoy de acuerdo con la protesta de los trabajadores, pero no con que no haya servicios m¨ªnimos", se quejaba ayer por la ma?ana Manoli, de 52 a?os, empleada en Torre Espacio, en la estaci¨®n de Plaza de Castilla. Mientras se indignaba al recordar el caos del martes y el mi¨¦rcoles ("fue vergonzoso"), los sindicatos amenazaron con m¨¢s huelgas totales para la semana que viene.
"Hoy muy bien, pero me da miedo la semana que viene, he o¨ªdo en la radio que los sindicatos han amenazado con volver a hacerlo", se angustiaba Raquel, de 31 a?os, de camino a su oficina, en Nuevos Ministerios.
En la estaci¨®n de Sol (l¨ªnea 2), Montse torc¨ªa el gesto al rememorar los "45 minutos" que lleg¨® tarde al trabajo cada d¨ªa. "Vengo de Majadahonda hasta Moncloa y luego hasta Banco de Espa?a. Tengo que tomar dos metros y el retraso se va sumando", lamentaba, hacia las 8.00. "Hoy van muy llenos", a?ad¨ªa. "Ya vamos 10 minutos tarde", conclu¨ªa su amiga Ana, justo antes de subir al vag¨®n.
L¨ªneas sin problemas
Otros se desplazaban sin problemas de estrecheces ni de tiempo. Como Julio, de 54 a?os, y su mujer, Mirta, de 60, en Arg¨¹elles (l¨ªnea 3). "Vamos bien por ahora", sonre¨ªa. Iban sin prisa de Collado-Villalba a Puerta de Toledo para cumplimentar una gesti¨®n administrativa. "Es cierto que siempre suelo ir con mucha previsi¨®n, pero no hemos tenido ning¨²n problema". Mientras, en el intercambiador de Plaza de Castilla, las colas kilom¨¦tricas en las paradas de autob¨²s eran historia.
Tampoco sufrieron ning¨²n imprevisto los logro?eses Carlos, de 27 a?os, y B¨¢rbara, de 28. Cargados de maletas, esperaron en Nuevos Ministerios unos cinco minutos para tomar el metro que les llevaba a Barajas. Iban a embarcar rumbo a Cuba. "Llegamos ayer a Madrid y vimos que el metro iba bien, as¨ª que hoy no hemos madrugado ni est¨¢bamos preocupados", dec¨ªa Carmen, hacia las 12.00. Eso s¨ª, iban con tiempo. Su vuelo sal¨ªa a las tres.
A los que los servicios m¨ªnimos no parecen haber ayudado es a los tenderos del metro. "La gente va con prisas y no se para tanto a mirar", lamentaba Irene, de 33 a?os, dependienta de una tienda de bisuter¨ªa en la estaci¨®n de Plaza de Espa?a. Las ventas cayeron un 40% durante los d¨ªas de la huelga total y ayer todav¨ªa no se hab¨ªan recuperado.
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