La prostituci¨®n crece con la crisis y se oculta en pisos

En tiempos de crisis la prostituci¨®n muestra su peor rostro. Lo denuncian los colectivos dedicados a la atenci¨®n a prostitutas, que en apenas un a?o han constatado un incremento cercano al 10% en el n¨²mero de prost¨ªbulos en pisos privados y una transformaci¨®n en el perfil de las mujeres. Dejan de ser exclusivamente inmigrantes llegadas del Sur de Africa y Europa del Este y, cada vez m¨¢s, resulta frecuente encontrarse con espa?olas inmersas en situaciones de riesgo de exclusi¨®n social.

Cambia el perfil de la v¨ªctima y cambian las pautas del negocio. La recuperaci¨®n de los cascos hist¨®ricos en grandes urbes, como Vigo, est¨¢ empujando el negocio hacia las ¨¢reas metropolitanas y muy especialmente a viviendas en las que se refuerza la situaci¨®n de alegalidad. En Lugo, el caso Carioca que ha sacudido a la ciudad ha recrudecido tambi¨¦n el confinamiento al que los proxenetas someten a las mujeres.

El colectivo cifra en un 10% el aumento de personas que se prostituyen en casas

La confidencialidad que rodea los casos de trata y la inexistencia de un reconocimiento espec¨ªfico que identifique los casos de violencia contra la mujer en el marco de la prostituci¨®n, hacen muy dif¨ªcil valorar la situaci¨®n de riesgo vivida por las prostitutas. Una falta de concreci¨®n que contrasta con la magnitud de los datos oficiales: en el primer semestre del a?o la Secretar¨ªa Xeral de Igualdade concedi¨® 636 ¨®rdenes de protecci¨®n, 191 en Pontevedra y 260 en A Coru?a. A lo largo de ese mismo per¨ªodo el Centro de Informaci¨®n da Muller de Vigo atendi¨® a 180 mujeres y otras 24 acudieron al Centro de Emergencia acompa?adas de sus hijos para pedir asesoramiento.

Faltaba sin embargo un servicio de atenci¨®n personalizado para casos de prostituci¨®n y es a esa demanda a la que ha contestado Faraxa. Con poco m¨¢s de un a?o de vida y una plantilla multidisciplinar integrada por siete voluntarias, la asociaci¨®n dirigida por Carmen Lago toma el testigo de la desaparecida Alecr¨ªn para ofrecer amparo y asesoramiento all¨ª donde no llega la Administraci¨®n p¨²blica.

"Las prostitutas tienen miedo de visitar los centros de informaci¨®n porque muchas se encuentran en situaciones de irregularidad", comenta Lago. Y es esa constataci¨®n la que las lleva a realizar una labor centrada en las calles. Con su unidad m¨®vil y un coraje que ya las ha hecho irrumpir en prost¨ªbulos de toda Galicia, Faraxa recorre la comunidad asesorando a prostitutas con independencia de su situaci¨®n. Un trabajo que ya les ha dejado un a?o "duro, muy duro" y para el que piden un mayor apoyo institucional.