Pruebas de resistencia

La propuesta m¨¢s audaz de la reci¨¦n terminada presidencia espa?ola de la Uni¨®n Europea (que, contra las versiones m¨¢s catastrofistas, no ha sido un fracaso) fue la determinaci¨®n de que se hagan p¨²blicas las pruebas de resistencia de las principales entidades financieras de la zona (stress test) para conocer el verdadero estado de salud del sistema bancario. Ello es necesario en s¨ª mismo (la transparencia no debe afectar solo a las Administraciones p¨²blicas, las empresas o los ciudadanos, sino tambi¨¦n a los bancos y cajas de ahorros), como por la multiplicaci¨®n de rumores acerca de los problemas, reales o ficticios, de cada una de las entidades.

En los ¨²ltimos tiempos se ha utilizado el car¨¢cter multiplicador de los medios de comunicaci¨®n (incluso de aquellos que son considerados infalibles biblias del capitalismo) para lanzar acusaciones de perjuicio al vecino y salvarse uno mismo. Rodr¨ªguez Zapatero y el gobernador del Banco de Espa?a, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, han pensado que la mejor forma de evitar que esas manipulaciones afecten por igual a sanos y enfermos es activar la pol¨ªtica de luz y taqu¨ªgrafos. Naturalmente parecen jugar con una posici¨®n de ventaja: la de que las entidades espa?olas salen beneficiadas, en general, en la comparaci¨®n.

Los test servir¨¢n para dificultar los rumores intencionados

En el Consejo Europeo del 17 de junio, cuando se tom¨® la decisi¨®n, las mayores reticencias surgieron de la canciller Merkel, quiz¨¢ porque sea cierto que algunos bancos germanos est¨¢n en la cola de esas pruebas de resistencia. En general, en la industria bancaria ha habido dos tipos de reacciones: la que representa, por ejemplo, el Royal Bank of Scotland y otras instituciones de la City londinense, que han declarado p¨²blicamente que las pruebas de resistencia a los bancos no solo son casi in¨²tiles sino que adem¨¢s pueden perjudicar la confianza del ciudadano. En el extremo contrario, el subgobernador del Banco de Espa?a, Javier Ar¨ªztegui, que dec¨ªa en la Universidad Men¨¦ndez Pelayo de Santander: "La publicaci¨®n de los resultados de los stress test mostrar¨¢n la solvencia del sistema bancario espa?ol".

Los problemas que est¨¢ afrontando la banca de todo el mundo son profundos: incertidumbre, recapitalizaciones, quiebras, p¨¦rdidas, morosidad, desplomes burs¨¢tiles, inyecciones p¨²blicas, crisis de liquidez, etc¨¦tera. Y como consecuencia de todo ello, un estrangulamiento del cr¨¦dito a empresas y familias que redunda en la recuperaci¨®n econ¨®mica general. Los retos de la industria bancaria se nutren de un mapa econ¨®mico convulso, con dificultades en el riesgo soberano y en el riesgo de liquidez (congelaci¨®n del mercado interbancario que recuerda episodios pasados como la quiebra de Lehman Brothers, que solo es mitigada de forma parcial por la pol¨ªtica del Banco Central Europeo de inyectar liquidez a tipos de inter¨¦s muy bajos). ?ngel Cano, consejero delegado del BBVA, dio la pasada semana una conferencia organizada por la Escuela de Periodismo UAM/EL PA?S y la Fundaci¨®n BBVA ("La reestructuraci¨®n del sistema financiero: lo que queda por hacer"), en la que afirm¨® que los problemas del sector en Espa?a est¨¢n concentrados en pocas entidades y en una cuarta parte de los activos. Las pruebas de resistencia ayudar¨¢n a identificarlos.

Las mayores necesidades de capital de muchas entidades se precisan para soportar un ciclo adverso muy largo, potenciar el crecimiento y absorber las p¨¦rdidas. Seg¨²n Cano, el corto y medio plazo estar¨¢ definido por un marco regulatorio muy exigente (cuando se apruebe), que impactar¨¢ en la rentabilidad por las mayores exigencias de capital y de liquidez y por el control del riesgo sist¨¦mico. Tambi¨¦n influir¨¢n los menores crecimientos del cr¨¦dito.

Las pruebas de resistencia para m¨¢s del 90% de los bancos y cajas europeos, aprobadas por el Comit¨¦ de Supervisores Bancarios Europeos, deben ser homog¨¦neas y no basadas en par¨¢metros nacionales. Hechas p¨²blicas a partir del pr¨®ximo d¨ªa 23, posiblemente conllevar¨¢n planes de recapitalizaci¨®n para quienes los necesiten y traducir¨¢n los impactos que suponen en el capital de los bancos -que es lo que indica su nivel de solvencia- de los diferentes ciclos. Son imprescindibles para reducir la incertidumbre y por una cuesti¨®n de simple justicia: el sector financiero ha sido el m¨¢s ayudado de todos en esta larga coyuntura de recesi¨®n y estancamiento. Entre garant¨ªas y recapitalizaciones, la Uni¨®n Europea ha movilizado m¨¢s de 4,1 billones de euros (la cantidad que produce en cuatro a?os un pa¨ªs como Espa?a) para salvar a sus entidades financieras.