Estalla un explosivo en una sede de empresas del metal de Vigo

Una olla cargada con un kilo de p¨®lvora prensada estall¨® en la madrugada de ayer ante la sede de Foncalor, la asociaci¨®n de fontaner¨ªa de Vigo. Revent¨® la verja que protege la puerta del bajo donde se ubican las oficinas, en la calle Mart¨ªnez Garrido, y caus¨® una humareda que se apag¨® antes de que los bomberos pudiesen hacer algo. Rompi¨® cristales, afect¨® a cuatro veh¨ªculos aparcados, a tres viviendas del edificio y a un local comercial anejo. No pas¨® nada m¨¢s porque a esa hora ninguna persona pasaba por delante de la fachada del local.

La sede de la asociaci¨®n hab¨ªa recibido el a?o pasado el impacto de un c¨®ctel molotov en medio del conflicto laboral abierto por el convenio del metal, del que es parte negociadora. Pero ahora, cuando la paz social reina en el sector, los empresarios no se explican la causa del suceso. "No buscamos una relaci¨®n directa entre una cosa y otra, a lo mejor ha sido coincidencia, pero los hechos est¨¢n ah¨ª", asegur¨® ayer su secretario, Rafael Carrera. El delegado del Gobierno, Ant¨®n Louro, apuntaba en direcci¨®n contraria. "No se deben hacer especulaciones en relaci¨®n con los autores de esta explosi¨®n porque la polic¨ªa est¨¢ investigando y tratando de esclarecer todos los hechos para encontrar a los autores".

La detonaci¨®n afect¨® a coches y viviendas del entorno del local

Lo cierto es que en los ¨²ltimos meses se han sucedido peque?os ataques de este tipo en la provincia de Pontevedra, aunque aparentemente no tienen v¨ªnculos en com¨²n. El 10 de marzo una botella encendida impact¨® en la casa sindical de O Porri?o causando da?os en las sedes de UGT y CC OO. En abril pas¨® lo mismo en el chal¨¦ de Nigr¨¢n del concejal de tr¨¢fico del ayuntamiento de Vigo, Xulio Calvi?o. Posteriormente, la sede del PP de la localidad sufri¨® un golpe similar. Los dos primeros ataques fueron reivindicados por el grupo Resistencia Galega por "deslealtad hacia la clase trabajadora".

Los responsables de la asociaci¨®n admit¨ªan ayer estar sorprendidos por lo sucedido. "No podemos trabajar, la explosi¨®n ha destrozado el material de oficina. No lo entiendo, somos gente luchadora que trabajamos duro", reflexionaba Carrera. El sindicato CIG fue el primero en condenar el atentado y en mostrar su satisfacci¨®n porque no haya alcanzado a ninguna persona. Foncalor conf¨ªa en volver a abrir al p¨²blico "lo antes posible".