Consumado el embargo y precintado de la casa-museo de Jos¨¦ Padilla
Agentes judiciales presiden la clausura de la vivienda del m¨²sico universal
"Voy a seguir luchando por conservar ¨ªntegro el legado de mi t¨ªo". As¨ª lo aseguraba ayer con determinaci¨®n Eugenia Montero, sobrina del compositor Jos¨¦ Padilla cuya casa-museo, que ella ha dirigido durante 18 a?os, qued¨® a mediod¨ªa embargada por una actuaci¨®n judicial en ejecuci¨®n de un cr¨¦dito impagado. Montero, que resid¨ªa en la vivienda, ha sido desahuciada. El peque?o museo ocupa un chalet de la calle de Gabriel Abreu, 11, en la colonia Iturbe, junto a Torrespa?a.
Dos agentes judiciales del Juzgado n¨²mero 32, con cometidos sobre asuntos hipotecarios, presidieron la actuaci¨®n, que se consum¨® a media ma?ana con el cambio de cerraduras del chalet y su correspondiente precinto.
Madrid pierde una de las contadas casas-museo que la ciudad posee
La actuaci¨®n hab¨ªa sido inducida por particulares prestatarios del cr¨¦dito ejecutado, cuyo principal de 225.000 euros ha devenido en 1.080.000 euros, seg¨²n Eugenia Montero. Por encargo de aquellos, tres ocupantes de un cami¨®n de mudanzas se dispon¨ªan a desamueblar la casa-museo, pero desistieron.
"Ven¨ªan con el prop¨®sito de llevarse muebles, instrumentos musicales y cuadros, pese a haber sido considerados bienes culturales p¨²blicos por la Subdirecci¨®n de Museos Estatales y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura", explic¨® Eugenia Montero. "Adem¨¢s, este organismo ministerial ha establecido que los bienes que la casa alberga no pueden ser dispersados, ni tampoco trasladados mientras no exista un plan espec¨ªfico para asentarlos en un enclave apto para acogerlos, requisito que no cumplen", a?ade.
La casa-museo fue inaugurada por la infanta Cristina de Borb¨®n y por el alcalde ?lvarez del Manzano en 1992, con motivo de la designaci¨®n madrile?a como capital cultural europea. En ella Jos¨¦ Padilla pas¨® los ¨²ltimos a?os de su vida, entre 1953 y 1960. Conten¨ªa numerosas partituras hol¨®grafas, correspondencia con celebridades mundiales como Carlos Gardel, Josephine Baker o Maurice Chevallier, adem¨¢s de cuadros, carteles, estampas e instrumentos musicales -como un soberbio piano Pleyel- de quien fuera compositor de nombrad¨ªa no solo en Espa?a, sino tambi¨¦n en Francia, Italia, Portugal, Argentina y Estados Unidos. Algunas de sus composiciones, Valencia, El relicario, La Violetera, as¨ª como ?a c'est Paris, Estudiantina portuguesa, Fontane o Tango del Arrabal, dieron la vuelta al mundo e ilustraron hasta 300 filmes, como Luces de la ciudad, de Charles Chaplin. En Esencia de mujer, Al Pacino bailaba una de sus composiciones.
Almeriense de nacimiento, nieto de un violoncelista y compositor ya a los 14 a?os, su padre quiso que Jos¨¦ estudiase Medicina, pero ¨¦l desisti¨®. Empleado en un negocio familiar de sastrer¨ªa, un d¨ªa le hizo un traje al director de la Banda Municipal de Almer¨ªa, quien descubri¨® sus dotes musicales. Padilla viaj¨® a Madrid y estudi¨® en el Conservatorio, donde conoci¨® a Tom¨¢s Bret¨®n. En Par¨ªs sus composiciones adquirieron notoriedad mundial. Con el cierre de su casa-museo, Madrid pierde uno de los pocos recintos culturales de este tipo con los que cuenta.
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