"Puede haber amor en un centro comercial"
R¨¦gine Chassagne explica las claves de 'The Suburbs', lo nuevo de Arcade Fire
Arcade Fire vuelven a la carga ma?ana con The Suburbs, y no lo tienen f¨¢cil para cumplir con las expectativas. Con Neon Bible (2007) y su deb¨², Funeral (2006), clasificarlos entre lo mejorcito que llevamos de siglo se convirti¨® en algo habitual. El mundo se rindi¨® a esos finales in crescendo, a la intensidad de su m¨²sica. Con sus oscuros arreglos de acorde¨®n, viol¨ªn y clavecines les llovieron etiquetas como "indie orquestal". Consiguieron seducir incluso a David Bowie, que empez¨® a recomendar a aquellos chicos con pinta de no haber sido de los m¨¢s populares del instituto.
R¨¦gine Chassagne (33 a?os, canadiense de padres haitianos) es la esposa de Win Butler, el l¨ªder del grupo. Esta multiinstrumentista canta, toca el piano, el acorde¨®n y lo que la canci¨®n pida. "Todo empez¨® porque Win recibi¨® un email con una fotograf¨ªa de un amigo, y eso desat¨® un mont¨®n de im¨¢genes", explica Chassagne, de buen humor, por tel¨¦fono. "Hicimos un viaje en carretera de Texas a Lousiana. Es interesante ver sitios donde creciste: f¨ªsicamente est¨¢s all¨ª, pero todo ha cambiado. Ya no te pertenece. Aun as¨ª, todo es tan familiar...". De ah¨ª que las calles de los suburbios les resulten tan evocadoras.
Esta vez Arcade Fire suenan m¨¢s ligeros y directos. Incluso se atreven a dar un cierto aire de rockabilly a Month of May y hay algunos ritmos programados. "Suena diferente porque el tema es diferente", subraya Chassagne. "En Neon Bible todo era m¨¢s oscuro". El resultado es m¨¢s de una hora de m¨²sica en la que la variedad no impiden que sigan sonando a ellos mismos.
Cuando Butler lleg¨® a Montreal, mont¨® el grupo y conoci¨® a R¨¦gine. "Montreal y Houston
[Texas, de donde es Win] son culturas muy distintas, pero hay cosas que compartimos. Cuando ¨¦ramos peque?os, ten¨ªamos esa misma sensaci¨®n de perder el tiempo, de querer escapar. Despu¨¦s descubres que esos momentos tambi¨¦n forman parte de tu vida". Arcade Fire le debe mucho a esa complicidad que tienen. "Componemos juntos, claro. Estamos casados", explica. "Por ejemplo, estamos en el sof¨¢, ¨¦l est¨¢ tocando la guitarra y le grito: ?Eh, toca eso otra vez!. Es nuestra vida diaria. Estar en casa nos permite tener una conexi¨®n real. S¨ª, los conciertos y las giras son geniales, pero no son la atm¨®sfera m¨¢s creativa". Arcade Fire pasar¨¢n por Espa?a el 5 de septiembre (Santiago de Compostela) y el 20 de noviembre (Madrid) y el 21 (Barcelona).
El t¨ªtulo y otras im¨¢genes (el viaje en coche, la pureza) son ideas que se repiten, vertebrando el ¨¢lbum. R¨¦gine destaca su variedad: "Hay muchos sonidos que van apareciendo, como en una pel¨ªcula". Que nadie se extra?e cuando la oigan cantar en lo que parece pop bailable de los 80: "Te refieres a Sprawl II ?no? Bueno, era el sonido que nos pareci¨® adecuado para describir el ambiente de un centro comercial."
R¨¦gine no quiere que la comparen ni compararse con otras bandas. "Lo que los dem¨¢s hagan, bien hecho est¨¢", ataja. "Solo me preocupo por la m¨²sica. Tienes que hacer algo puro, honesto". Su risue?a timidez se acent¨²a cuando se comenta su acercamiento al estilo de Bruce Springteen. "?Influencia? No s¨¦. Tal vez. ?l es genial", se?ala. Su perplejidad es mayor cuando se menciona la palabra indie: "Es gracioso, nunca supe que significaba eso... me propuse averiguarlo. Hasta que me dijeron que mi banda es indie. Dicen que lo somos... No s¨¦, no me gustan las etiquetas".
No se preocupe si el disco le provoca sentimientos contradictorios. A ellos tambi¨¦n les pasa: "Hemos navegado entre impresiones muy diferentes. Podr¨ªas simplemente lamentarte porque ahora todo se hace en centros comerciales. Pero tambi¨¦n all¨ª puede surgir una bella historia de amor ".
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