Los due?os intentan aplazar el derribo del tanatorio ilegal de Pontevedra

"Puede haber un problema social agud¨ªsimo", dice Alfonso Iglesias, responsable de Central Funeraria, SL, una de las empresas que promovi¨® la construcci¨®n en 1993 del tanatorio de Montecelo, en Pontevedra. La fecha de derribo est¨¢ fijada para el d¨ªa 12, despu¨¦s de que el Tribunal Supremo ratificase que la licencia de obra que concedi¨® la Conseller¨ªa de Pol¨ªtica Territorial era ilegal. Iglesias entiende que si se tira el tanatorio no habr¨¢ suficiente sitio en la ciudad para velar los cad¨¢veres.

Central Funeraria, junto a Pompas F¨²nebres y Alianza y Barros, tendr¨¢ que hacer frente a la factura que les pase la Xunta, que ejecutar¨¢ el derribo. Pero dado que construyeron con licencia, podr¨¢n reclamar judicialmente que el Gobierno pague las obras y les indemnice por los da?os y perjuicios. De momento las funerarias no se han puesto de acuerdo, pero un portavoz anuncia que se har¨¢ algo antes del d¨ªa 12.

Iglesias pide que el tanatorio pueda seguir funcionando, aun "en precario", mientras no se construya un emplazamiento alternativo. Seg¨²n ¨¦l, la tasa de mortalidad en Pontevedra, que sit¨²a en torno al 8,5 por mil, es demasiado alta para que la ciudad se pueda permitir el derribo.

Juan Perdiz, responsable del tanatorio de San Mauro -que s¨ª tiene los papeles en orden- tacha de falsas las previsiones de su competencia y asegura que la demanda "se cubrir¨¢ totalmente". Afirma que sus instalaciones, junto a las que posee el asilo de ancianos y el propio hospital de Montecelo, son m¨¢s que suficientes, y que muchos muertos se velan en centros de otros municipios.