Las v¨ªctimas de las inundaciones en Pakist¨¢n claman por la falta de ayuda

Pakist¨¢n est¨¢ sumido en el peor desastre natural de su historia, con 20 millones de afectados. Y cada d¨ªa parece m¨¢s claro que lo peor puede estar por llegar. Una quinta parte de la superficie del pa¨ªs ha resultado afectada tras casi tres semanas de fuertes lluvias e inundaciones. La ayuda internacional llega con cuentagotas. Con cientos de localidades bajo el agua y decenas de puentes y carreteras inutilizables, apenas un mill¨®n de supervivientes han recibido hasta ahora raciones de comida, agua potable y refugios, seg¨²n los datos de Naciones Unidas.

La desesperaci¨®n se extiende entre las v¨ªctimas, que piden ayuda. Los cortes de carreteras en se?al de protesta se repitieron ayer. "Las inundaciones no duran 30 segundos, pero las necesidades humanitarias son mayores que en el terremoto de Hait¨ª", afirm¨® el portavoz de la ONU, Maurizio Giuliano, a Reuters. Millones de personas todav¨ªa no han recibido asistencia. Ayer, el Banco Mundial se comprometi¨® a desviar a Pakist¨¢n fondos por valor de 900 millones de d¨®lares (unos 700 millones de euros). "Estamos intentando que los fondos est¨¦n disponibles de forma inmediata", dijo la portavoz Mariam Altaf. De los 459 millones de d¨®lares (360 millones de euros) pedidos por la ONU a los donantes para ayuda inmediata, se ha recibido o se ha prometido hasta ahora la mitad. Espa?a ha aportado en total 3,6 millones de euros.

Hay consenso de que la comunidad internacional no est¨¢ siendo suficientemente generosa ni r¨¢pida en la ayuda a Pakist¨¢n. "Necesitamos mucha m¨¢s ayuda y mucho m¨¢s r¨¢pida para poder salir adelante en un desastre de magnitudes sin precedentes", asegura a este diario Ahmad Kamal, el portavoz de la Autoridad para la Gesti¨®n de Desastres de Pakist¨¢n. Las razones para la aparente apat¨ªa o lentitud en el socorro internacional al pa¨ªs surasi¨¢tico son varias. "Puede ser que en ¨¦poca vacacional la gente est¨¦ menos pendiente de lo que pasa. Tambi¨¦n que el tren de desastres en los ¨²ltimos meses ha causado un cierto cansancio entre los donantes", cuenta Josep Prior, coordinador del proyecto de M¨¦dicos sin Fronteras en el valle del Swat.

Por otra parte, los expertos coinciden en que Pakist¨¢n tiene muy mala imagen en el exterior por el terrorismo y los talibanes. Adem¨¢s, los gobernantes del pa¨ªs, donde la corrupci¨®n est¨¢ generalizada, tienen escasa credibilidad ante la opini¨®n internacional. "Aun as¨ª, es muy importante que Occidente ayude a Pakist¨¢n en esta crisis; si no, habr¨¢ m¨¢s pobreza, m¨¢s militancia y m¨¢s terrorismo", asegura el reconocido analista Rahim Ullah Yousafzai.

Tras las inundaciones, los organismos de ayuda temen una segunda oleada de muertes por las epidemias, que se pueden transmitir muy r¨¢pidamente dadas las p¨¦simas condiciones de salubridad en las que viven los afectados: sin agua potable, sin comida, sin refugio y sumergidos en agua contaminada. Millones de personas lo han perdido todo y los talibanes pueden aprovecharse de la situaci¨®n. El ministro de Exteriores, Shah Mahmood Qureshi, reconoci¨® en una entrevista a la BBC que la gente que est¨¢ sufriendo podr¨ªa aceptar la ayuda de quien sea, incluidos los extremistas.

Con el gran trabajo de reconstrucci¨®n que queda por delante en Pakist¨¢n, la estabilidad del pa¨ªs est¨¢ en juego, seg¨²n los analistas. "Si el Gobierno no maneja apropiadamente el trabajo de reconstrucci¨®n y rehabilitaci¨®n, la ira de la gente se va a volver en su contra", asegura el analista pol¨ªtico y de defensa Hasan Askari Rizvi. El primer ministro, Yusuf Raza Giliani, se ha comprometido a formar una comisi¨®n independiente para gestionar los fondos.