El negocio de las casas anuncio

Dos pies gigantes con calcetines blancos calzados en unas chanclas de dedo se impon¨ªan desde hace d¨ªas en el paisaje de la plaza de Alonso Mart¨ªnez. "El verano es una ¨¦poca de cr¨ªmenes imperdonables", rezaba acertado el eslogan. La lona, que ya ha cambiado su imagen aunque sigue promocionando un canal de televisi¨®n, cubre la fachada de un edificio en obras, aunque all¨ª no trabaja un solo alba?il. Caso muy similar se repite en la Puerta del Sol. Convertir tu casa en un anuncio es un negocio redondo: el Ayuntamiento no controla el fraude, las tasas son irrisorias y los anunciantes llegan a pagar m¨¢s de 100.000 euros mensuales por promocionarse en un lugar tan emblem¨¢tico como el kil¨®metro cero.

Algunos edificios lucen lonas aunque no hayan iniciado las obras

Para que en el n¨²mero 6 de la Puerta del Sol luzca desde junio una lona de 390 metros cuadrados, con iluminaci¨®n incluida, el propietario pidi¨® una licencia para pintar la fachada. Aunque los trabajos, seg¨²n la empresa propietaria del andamio, no se prolongar¨¢n m¨¢s de tres meses, la normativa urban¨ªstica establece un permiso de seis meses -prorrogable a otros seis-. Conseguida la licencia, el due?o del inmueble, o la empresa de publicidad que media con el anunciante, ya puede pedir a la Concejal¨ªa de Medio Ambiente la autorizaci¨®n que permite instalar publicidad mientras dure la obra.

Los tr¨¢mites no deben ser muy complicados porque el a?o pasado se concedi¨® el 80% de las 800 solicitudes de instalaci¨®n de lonas que se recibieron, seg¨²n datos de Hacienda.

Los inquilinos de este inmueble, dedicado al alquiler de oficinas, no sal¨ªan de su asombro cuando se les comunic¨® que se cubrir¨ªa el edificio, rehabilitado hace cinco a?os, por una nueva reforma.El truco est¨¢ en que, tres meses despu¨¦s, mientras el enorme cartel ya se ha cambiado dos veces y el propietario puede estar embols¨¢ndose, seg¨²n fuentes del sector publicitario, unos 124.000 euros mensuales en el caso de la Puerta del Sol, all¨ª nadie ha cogido una brocha.

No es el ¨²nico que juega con los tiempos. Justo enfrente, en el n¨²mero 11, el andamio donde se anuncia la ¨²ltima pel¨ªcula de Jackie Chan lleva ya un mes de adelanto al comienzo de los trabajos de restauraci¨®n de la fachada. Y en el 7 de Alonso Mart¨ªnez algunos inquilinos, que a¨²n no saben c¨®mo entra la luz del d¨ªa por su ventana, aseguran que el propietario est¨¢ retrasando hasta el ¨²ltimo momento la retirada de la lona con la excusa de nuevos desperfectos.

La supervisi¨®n municipal se limita a la comprobaci¨®n por parte de Medio Ambiente de que no se superen los plazos solicitados para la instalaci¨®n de la publicidad, condicionados a la duraci¨®n de la obra. Una vez agotado el permiso, el edificio no podr¨¢ volver a exhibir un anuncio hasta cinco a?os despu¨¦s como estipula la ordenanza reguladora de publicidad exterior. En lo que va de a?o solo se han abierto 14 expedientes disciplinarios por lonas sin licencia o que no se ajustaban a la normativa, seg¨²n una portavoz de Medio Ambiente. Cuando el propietario no resuelve los incumplimientos, una vez advertido, la sanci¨®n puede alcanzar los 20.000 euros. Sin embargo, nadie impide la picaresca: que las obras se eternicen de forma ficticia.

"No dudo que haya gente que hace trampa, pero no es nuestro caso", explica uno de los cinco propietarios del inmueble de Alonso Mart¨ªnez. "Ha habido unas obras muy complejas y a¨²n no se han acabado. La empresa se ha comprometido a terminar el mes que viene", justifica el due?o, que revela que ingresa por la lona entre 12.000 y 40.000 euros mensuales, "dependiendo del mes y el anunciante". El precio, "ayuda a pagar la obra, pero no la financia", aclara. "Adem¨¢s, no todos los inquilinos est¨¢n en contra. Hay gente a la que le molesta la lona y el andamio por la inseguridad, pero otros lo han agradecido porque les ha servido de toldo".

Los vecinos, sin embargo, no han escondido su malestar porque cuando firmaron su contrato a finales del a?o pasado se les prometi¨® que en seis meses ya podr¨ªan disfrutar de la vista desde su sal¨®n. El due?o, dice, no ha pensado en compensarles. Este peri¨®dico tambi¨¦n intent¨® contactar, sin ¨¦xito, con el presidente de la comunidad del n¨²mero 11 de la Puerta del Sol donde hay instaladas dos lonas desde hace aproximadamente un mes.

La pr¨¢ctica comenz¨® a extenderse hace m¨¢s de 15 a?os. Es visible y rentable para los anunciantes que no tienen que pagar un canon elevado como s¨ª han de hacerlo para otros soportes.

Tambi¨¦n sale rentable a los due?os de los edificios. La comunidad de propietarios paga al Ayuntamiento dos tasas. Una mensual por la ocupaci¨®n del espacio p¨²blico con los andamios que, en una calle de m¨¢xima categor¨ªa, se limita a 9,99 euros por cada metro cuadrado y fracci¨®n de hasta tres metros de altura. Y otra fija de 242,75 euros por cada solicitud de colocaci¨®n de cartel. El pago de este ¨²ltimo tributo no tiene en cuenta el tama?o, el n¨²mero de soportes, la categor¨ªa fiscal de la calle o las condiciones de iluminaci¨®n.

Con estos datos sobre la mesa, en la Concejal¨ªa de Hacienda se plantean meter mano en el negocio. Un incremento de la exigua tasa actual por la instalaci¨®n de publicidad, por la que el a?o pasado solo se ingres¨® 155.360 euros, podr¨ªa disuadir a las comunidades de vecinos de convertir sus viviendas en escaparates y, de paso, aumentar considerablemente la recaudaci¨®n.

No es la primera vez que Hacienda intenta poner coto a este negocio. Hace 10 a?os, la Concejal¨ªa ya se plante¨® recuperar el impuesto sobre publicidad, pero tuvo que descartarlo porque depend¨ªa de la modificaci¨®n de la Ley de Haciendas Locales.

Tambi¨¦n estudi¨® en 2008 la posibilidad que retoma ahora de incrementar la tasa actual, siguiendo el camino de otros Ayuntamientos como el de Collado Villalba o el de Bilbao, pero renunci¨® por las dudas jur¨ªdicas que planteaba. De hecho, el Tribunal Supremo, ya hab¨ªa fallado a favor de dos empresas que recurrieron el gravamen impuesto por la instalaci¨®n de publicidad en los Ayuntamientos de Valencia y Las Palmas de Gran Canaria.

Pero ahora, seg¨²n el concejal del ¨¢rea, Juan Bravo, la reciente sentencia del alto tribunal que reconoce a los Ayuntamientos la facultad de aplicar un tributo por el aprovechamiento del espacio p¨²blico de las operadoras de telefon¨ªa m¨®vil, le abre la puerta a imponer una tasa "que tenga en cuenta el beneficio econ¨®mico que obtiene el que se sirve del dominio p¨²blico".

"Se trata de establecer un mayor equilibrio entre los ingresos que los propietarios perciben de la empresa de publicidad y lo que ingresa el Ayuntamiento", explica Bravo. "En cualquier caso la modificaci¨®n no busca tanto incrementar la recaudaci¨®n, sino hacer menos rentable este tipo de pr¨¢cticas cuando son fraudulentas", a?ade.

La iniciativa ya est¨¢ en marcha. Las cifras que maneja el Ayuntamiento son lo suficientemente golosas como para retomar el asunto y conseguir aprobar la modificaci¨®n en enero.

La modificaci¨®n de la tasa consistir¨ªa, seg¨²n Bravo, en establecer un coeficiente multiplicador basado en el ¨ªndice fiscal de la calle. La idea es recaudar un porcentaje equivalente al 25% del beneficio que obtiene el propietario. Es decir, que el due?o de un inmueble que mantiene una lona en su fachada por 100.000 euros mensuales durante seis meses pasar¨ªa de tributar 242,75 euros a 150.000. Estas cifras, que solo son aplicables a las zonas m¨¢s emblem¨¢ticas de la capital, estar¨ªan sujetas a los estudios econ¨®micos que deben realizarse previamente.

Subir la tasa no garantizar¨¢ el fin de la picaresca. Pero el atractivo negocio de la lona dejar¨¢ de ser solo para unos pocos.