Los franceses vuelven para ganar

La Batalla de Bail¨¦n no acab¨® en el verano de 1808, cuando las tropas de Napole¨®n doblaron por vez primera la rodilla en suelo espa?ol. Dos a?os despu¨¦s, los franceses volvieron al lugar en el que hab¨ªan sido humillados para arrasar con todo lo que se les puso por delante. Y este rev¨¦s sufrido por los soldados espa?oles se ha escenificado este fin de semana en Bail¨¦n y ha sido una de las principales novedades de los actos con los que el municipio jiennense ha retrocedido dos siglos en el tiempo.

Pero el plato fuerte ha vuelto a ser la recreaci¨®n de la batalla en la que las tropas del general Casta?os (que quit¨® todo el protagonismo al combatiente general Reding) vencieron a las comandadas por el franc¨¦s Dupont, en lo que fue todo un ba?o de moral y autoestima para el pueblo espa?ol. La lluvia ca¨ªda en las horas previas impidi¨® que esta cuarta escenificaci¨®n de uno de los episodios m¨¢s cruciales de la Guerra de la Independencia se llevase a cabo en el mismo campo de batalla en el que dos siglos atr¨¢s combatieron las tropas espa?olas y francesas, la Huerta de San L¨¢zaro.

Voluntarios galos escenificaron las escaramuzas en las calles del pueblo

200 a?os despu¨¦s est¨¢ desterrada cualquier connotaci¨®n b¨¦lica

Finalmente, fue el recinto ferial el escenario en el que unos 300 figurantes pertenecientes a asociaciones de recreaci¨®n de toda Espa?a, Francia, Reino Unido y Portugal volvieron a protagonizar los combates cuerpo a cuerpo y donde se volvi¨® a escuchar el estruendo de los ca?ones y los 80 kilos de p¨®lvora empleados. Tampoco falt¨® la r¨¦plica de la noria de la que se abastec¨ªan de agua las tropas espa?olas gracias al arrojo de un grupo de mujeres bailenenses comandadas por la hero¨ªna Mar¨ªa Bellido.

"Es una forma de sacar la historia a la calle y de hacer cultura con el hermanamiento de otros pueblos", comentaba el historiador local Miguel ?ngel Alonso, quien, junto a la concejala Mar¨ªa Torres, hicieron de narradores ante los miles de espectadores congregados. Eso s¨ª, Alonso, que es el presidente de la Asociaci¨®n de Voluntarios de la Batalla de Bail¨¦n, cree que 200 a?os despu¨¦s est¨¢ desterrada cualquier connotaci¨®n b¨¦lica. "Al final, los combates terminan con un gesto de buena voluntad entre los pueblos", resalta.

Los voluntarios franceses llegaron a Bail¨¦n el d¨ªa anterior y all¨ª escenificaron las escaramuzas en las que las tropas galas, debido a la poca resistencia encontrada, se abrieron paso por las calles incendiando casas y pajares y obligando a la poblaci¨®n bailenense a huir hacia el monte, sin duda un pasaje menos conocido que el que dos a?os antes glorific¨® el nombre de Bail¨¦n al suponer la primera derrota en suelo espa?ol de las tropas napole¨®nicas. Despu¨¦s de Bail¨¦n vendr¨ªa el desastre napole¨®nico de las campa?as rusas y, en 1815, la derrota en Waterloo.

La recreaci¨®n de la contienda fue el eje central de un ambicioso programa que tambi¨¦n ha contado con teatro en calle, desfiles, homenajes, un mercado de la Independencia y un campamento de ¨¦poca con demostraciones en vivo, todo ello con la participaci¨®n de los grupos culturales y de recreaci¨®n locales. Aunque la crisis econ¨®mica ha recortado el presupuesto de esta conmemoraci¨®n, el alcalde de Bail¨¦n, Bartolom¨¦ Serrano, asegura que "la austeridad no ha ido en detrimento de la calidad de los actos" al tiempo que reitera la apuesta del municipio por convertir la Batalla de Bail¨¦n en un elemento de atracci¨®n tur¨ªstica.

Adem¨¢s de proteger el campo de batalla, la localidad cuenta tambi¨¦n con el Museo de la Batalla. La de Bail¨¦n es una de las tres recreaciones m¨¢s importantes de Espa?a junto a la de la Batalla de Gamonal (Burgos) y la Albuera (Badajoz). Tambi¨¦n la Diputaci¨®n de Ja¨¦n y la Junta de Andaluc¨ªa han situado a la Batalla de Bail¨¦n como epicentro de la Ruta de los Castillos y Batallas, que incluye adem¨¢s las de Ba¨¦cula (con pol¨¦mica sobre su localizaci¨®n entre los municipios de Bail¨¦n y Santo Tom¨¦) y la de las Navas de Tolosa, ambas en suelo jiennense.

Otro aliciente tur¨ªstico que ha recuperado Bail¨¦n ha sido las catacumbas del siglo XVI localizadas en los s¨®tanos de la iglesia de la Encarnaci¨®n. Las autoridades locales las han abierto al p¨²blico este fin de semana y llevaron a cabo un acto de homenaje a la hero¨ªna local Mar¨ªa Bellido, que arriesg¨® su vida para dar de beber con su c¨¢ntaro a las tropas del general Reding en pleno campo de batalla. Sus restos mortales se cree que est¨¢n enterrados en estas catacumbas.

Un visitante ilustre de Bail¨¦n durante el siglo XIX fue el escritor dan¨¦s Hans Christian Andersen, autor de cuentos tan famosos como La sirenita y El patito feo. Andersen conoci¨® Bail¨¦n 60 a?os despu¨¦s de la c¨¦lebre batalla y este fin de semana ha sido recordado por iniciativa de la Asociaci¨®n Caecilia. El homenaje consisti¨® en el descubrimiento de una placa y una exposici¨®n sobre la vida y obra del escritor rom¨¢ntico cedida por la embajada de Dinamarca en Espa?a.