Israel exigir¨¢ lealtad al Estado jud¨ªo para dar la nacionalidad

Las personas no jud¨ªas que aspiren a la nacionalidad israel¨ª tendr¨¢n que jurar lealtad al "Estado jud¨ªo democr¨¢tico". El nuevo juramento, aprobado ayer por el Gobierno de Benjam¨ªn Netanyahu como enmienda a la Ley de Ciudadan¨ªa, fue aplaudido por la ultraderecha y criticado tanto por los ministros laboristas, que votaron en contra, como por los diputados ¨¢rabes israel¨ªes, que lo definieron como "la salva de inicio de una legislaci¨®n megarracista". Tres ministros del Likud, el partido de Netanyahu, tambi¨¦n se opusieron.

El primer ministro coment¨® que con la nueva f¨®rmula no se hac¨ªa otra cosa que "reforzar la esencia del sionismo democr¨¢tico". El diputado Mohamed Barakeh, presidente del partido izquierdista Hadash, que integra a ¨¢rabes e israel¨ªes a favor de la convivencia en un solo Estado, consider¨® en cambio que la enmienda elevaba a Israel hasta los primeros lugares en la lista de los pa¨ªses racistas y a?adi¨® que Netanyahu hab¨ªa "disparado un misil contra las negociaciones".

La enmienda es el precio para que la ultraderecha acepte el proceso de paz

Podr¨ªa ser que el nuevo juramento, que en principio deber¨ªa afectar a pocas personas (los palestinos de los territorios ocupados no pueden optar a la ciudadan¨ªa), afectara al maltrecho proceso de paz. Pero tambi¨¦n podr¨ªa ser que lo favoreciera: algunos miembros del Gobierno comentaban confidencialmente que la enmienda era el precio que Netanyahu hab¨ªa pagado a sus ministros de ultraderecha para que aceptaran una nueva moratoria sobre la construcci¨®n en los territorios ocupados, la condici¨®n exigida por el presidente palestino, Mahmud Abbas, para seguir negociando.

El Consejo de Ministros decidi¨® remitir a un comit¨¦ interministerial dos propuestas, una del ministro de Justicia, Yakov Neeman, y otra del ministro de Defensa, Ehud Barak, destinadas a suavizar el juramento de lealtad al Estado jud¨ªo. Neeman pidi¨® que tambi¨¦n los nuevos ciudadanos jud¨ªos tuvieran que formular el juramento, para evitar una discriminaci¨®n grosera. Barak pidi¨® que se a?adiera a la f¨®rmula la frase "en el esp¨ªritu de la Declaraci¨®n de Independencia", para recordar que en el acta fundacional de Israel se defini¨® al nuevo Estado como jud¨ªo, pero tambi¨¦n como democr¨¢tico y opuesto a cualquier tipo de discriminaci¨®n.

La ultraderecha, en cualquier caso, se mostr¨® exultante. El diputado Michael Ben-Anri, de Uni¨®n Nacional, declar¨® que "al cabo de 20 a?os del asesinato del rabino Meir Kahane, el Likud admite que ten¨ªa raz¨®n. Es refrescante comprobar que el Likud, que persigui¨® a Kahane por su campa?a para que los ¨¢rabes ciudadanos de Israel prestaran un juramento de lealtad, llega ahora a la conclusi¨®n correcta". Kahane, asesinado en Nueva York en 1990, no exig¨ªa solo ese juramento: en otras ocasiones exigi¨® una ley que prohibiera las relaciones sexuales entre jud¨ªos y no jud¨ªos, y la expulsi¨®n de Israel de todos los ¨¢rabes. El partido fundado por Kahane, Kach, figura en la lista de las organizaciones terroristas en Estados Unidos y la Uni¨®n Europea.