Valdemoro planta cara a 40 a?os de pestilencia

Valdemoro lleva m¨¢s de 40 a?os sufriendo los olores que emanan de una f¨¢brica de alimentos para animales de un municipio colindante, Torrej¨®n de Velasco, pero ha sido solo recientemente cuando un alcalde ha decidido llevar el asunto a la Fiscal¨ªa de Medio Ambiente, al Defensor del Pueblo y a la Guardia Civil. No existe legislaci¨®n de ning¨²n tipo sobre este asunto, por lo que la localidad del sur de Madrid puede ser pionera en poner freno a los hedores de la industria. Valdemoro ha crecido urban¨ªsticamente hacia el este y se ha dado de bruces con el aroma que desprende la empresa.

En el escrito remitido a la fiscal¨ªa, se acusa al Ayuntamiento de Torrej¨®n de Velasco y a la Comunidad de Madrid de "insuficiencia o falta de actuaci¨®n" en su deber de controlar los gases y los olores que emite Incoas, SA, que funciona desde 1969. "Imposibilitan que este Ayuntamiento de Valdemoro pueda garantizar y proteger el medio ambiente y los derechos de los ciudadanos en su propio municipio", contin¨²a la denuncia. La empresa no devolvi¨® ayer las llamadas de este peri¨®dico, mientras que un portavoz de Medio Ambiente resalt¨® que no existe una legislaci¨®n "ni auton¨®mica, ni a nivel nacional ni europeo" que aclare c¨®mo actuar en estos casos.

El alcalde acude a la Fiscal¨ªa de Medio Ambiente y al Defensor del Pueblo

No hay legislaci¨®n sobre el asunto: ni auton¨®mica ni nacional ni europea

La compa?¨ªa se dedica a tratar una serie de subproductos que provienen de restos de aves y pescados. Convierten las plumas y los esqueletos en harina que se suele destinar despu¨¦s al pienso animal. Los olores que emite llevan afectando a Valdemoro desde su apertura y, aunque se ha intentado corregir en muchas ocasiones, se siguen produciendo. Un estudio olfam¨¦trico reciente, que b¨¢sicamente lo redactan unos se?ores oliendo y tomando notas (no existe por ahora otra forma de medir), se?ala directamente a la f¨¢brica como la causante del problema.

Aunque el hedor se puede percibir casi desde cualquier punto del pueblo, los m¨¢s afectados son los 2.000 vecinos de un nuevo barrio construido hace cinco a?os en el este, cerca de la f¨¢brica. "Es nauseabundo", resume una vecina, "muy denso y en verano ya directamente es imposible de aguantar. Te cuento que est¨¢bamos haciendo una barbacoa en el chal¨¦ y tuvimos que meternos en el interior de la vivienda".

El alcalde de Valdemoro, Jos¨¦ Miguel Moreno, considera que ha agotado todas las v¨ªas de reclamaci¨®n. "Despu¨¦s de muchas gestiones no hemos llegado a ning¨²n sitio y nos vemos obligados a presentar la denuncia", afirma en conversaci¨®n telef¨®nica. "Siempre ha sido un problema. Lo recuerdo desde que era peque?o. Al final he decidido involucrarme personalmente en este asunto y estar al frente de la reivindicaci¨®n". Se siente impotente porque no haya una ley que penalice a las industrias que emiten altos ¨ªndices de malos olores, pero est¨¢ dispuesto a conseguir una sentencia judicial que siente jurisprudencia.

Las teor¨ªas de por qu¨¦ no se ha podido evitar la fuga de olores son diversas. C¨¦sar Puerta, un t¨¦cnico de medio ambiente, cree que el termodestructor de la planta, un quemador de gases, no funciona correctamente. Seg¨²n esta teor¨ªa, la f¨¢brica lanza "a la atm¨®sfera esos olores, que en ning¨²n caso perjudican al medio ambiente". Aun as¨ª, hasta hace poco era relativamente soportable, pero la construcci¨®n de unas viviendas en el l¨ªmite del t¨¦rmino municipal ha agravado el problema. "Algo debe de funcionar mal porque hay empresas en otros municipios y no existe este problema", a?ade.

El problema lo vienen padeciendo generaciones de vecinos del municipio. Se ha intentado instalar filtros, supervisar el termodestructor o realizar una serie de mediciones para atajar el olor. Nada ha dado frutos. La importancia ha dado pie a la creaci¨®n de una asociaci¨®n con el nombre Valdemoro Apesta. En su web escriben: "Nos preguntamos c¨®mo una f¨¢brica del poco calado de esta puede poner en jaque a todo un pueblo de 60.000 habitantes y no tener consecuencias ante las autoridades. C¨®mo se pueden vulnerar los derechos fundamentales que pasan por un medio ambiente limpio, un hogar donde puedas respirar y donde puedas disfrutar de un parque con tus hijos sin tener que irte a casa y cerrar las ventanas".

El Ayuntamiento considera en su denuncia que las acciones de inmisi¨®n de malos olores de Incoas lesionan el medio ambiente y los derechos de sus ciudadanos, que pueden calificarse de "graves y tener relevancia penal". Por ahora, Valdemoro ha dado el primer paso para acabar con el hedor y qui¨¦n sabe si ha abierto una v¨ªa para que se legisle sobre el tema.