Las razones de los mercados
Muchos nos preguntamos por qu¨¦, si la crisis productiva de Espa?a est¨¢ tocando fondo y se han comenzado las reformas requeridas por la Comisi¨®n Europea y el Banco Central Europeo, "los mercados" la siguen atacando con fuerza, elevando los tipos de financiaci¨®n de la deuda espa?ola e incrementando su diferencial con los tipos de los bonos alemanes hasta niveles cercanos a los 300 puntos b¨¢sicos, no vistos desde la entrada de Espa?a en la Uni¨®n Econ¨®mica y Monetaria (UEM).
En mi opini¨®n, la desconfianza de los mercados procede de varios frentes. El m¨¢s importante es el elevado endeudamiento de la econom¨ªa espa?ola frente al exterior que obliga a las instituciones y a las empresas a demandar financiaci¨®n externa cuando vencen sus obligaciones de pago. No basta con decir que el nivel de endeudamiento del Estado est¨¢ todav¨ªa por debajo de la mayor¨ªa de los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea, hay que tener en cuenta el elevado crecimiento del endeudamiento de las comunidades aut¨®nomas y los Ayuntamientos, as¨ª como tambi¨¦n el de las entidades financieras (especialmente el de las cajas de ahorros) y el de muchas empresas.
Espa?a ha "hecho los deberes", pero solo parcialmente, y eso no genera confianza
Pero la desconfianza surge m¨¢s a¨²n por la falta de transparencia en cuanto a la informaci¨®n econ¨®mica especialmente financiera. Cuando Joaqu¨ªn Almunia, espa?ol y director en la Comisi¨®n Europea, ha expresado estas dudas, muchos han arremetido contra la informaci¨®n econ¨®mica en general. Sin embargo, hay que diferenciar entre varios tipos de informaci¨®n. Una cosa son los datos econ¨®micos estad¨ªsticos (PIB, EPA e indicadores diversos), en general responsabilidad del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), que cumplen estrictamente con las condiciones de puntualidad y transparencia exigidas por la Uni¨®n Europea, y otra son algunos datos, administrativos, de gasto y financieros, que o no cumplen con la puntualidad, o son casi desconocidos, no solo para el p¨²blico, sino tambi¨¦n para las autoridades econ¨®micas y financieras.
Concretamente, las comunidades aut¨®nomas, hasta ahora, no ofrecen informaci¨®n de la ejecuci¨®n detallada del gasto. Cada una sabr¨¢ sus propias cuentas, pero la Secretar¨ªa de Estado de Hacienda las desconoce. Cuando se aprueba el presupuesto del Estado para un a?o (2011) se determinan las transferencias de las que dispondr¨¢n las comunidades aut¨®nomas en funci¨®n de las previsiones de ingresos de los impuestos. Pero cuando los ingresos al a?o siguiente no alcanzan las cifras previstas, las comunidades aut¨®nomas que en teor¨ªa deber¨ªan devolver parte del dinero se lo han gastado y no lo devuelven. Seg¨²n la ministra de Econom¨ªa, esto va a cambiar, se les va a exigir datos trimestrales de ejecuci¨®n de gasto y el ajuste final de las cuentas, pero de momento falta transparencia en la informaci¨®n, y los mercados lo saben. El endeudamiento y las correspondientes necesidades de financiaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas y de las Corporaciones locales se conocen a trav¨¦s del Banco de Espa?a y por la informaci¨®n aparecida en el Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE), as¨ª como las crecientes necesidades de financiaci¨®n a trav¨¦s de las emisiones de deuda de cada instituci¨®n.
Dado que la recaudaci¨®n de impuestos va a tardar en recuperarse por el moderado crecimiento de la actividad econ¨®mica, la reducci¨®n del gasto p¨²blico se hace indispensable. El Estado ha aplicado algunas medidas dr¨¢sticas para 2011, pero ser¨ªa necesario un recorte importante en el gasto de las comunidades aut¨®nomas. Ser¨ªa necesario recortar el exceso de personal que se ha contratado en estos ¨²ltimos a?os y tomar alguna medida adicional respecto al d¨¦ficit de la sanidad, totalmente transferida a las mismas. Establecer un sistema de copago, regulando excepciones para los m¨¢s desfavorecidos, permitir¨ªa evitar el despilfarro y mejorar la eficiencia del sistema.
En cuanto a las reformas estructurales, si bien es cierto que se ha iniciado la reforma laboral y el Gobierno parece mantenerse firme, tenemos a los sindicatos que no solo ponen dificultades para avanzar en el tema de la negociaci¨®n colectiva (uno de los temas pendientes de reformar), sino que intentan incluso volver atr¨¢s en la aplicaci¨®n de la reforma ya aprobada.
Otra reforma que los mercados internacionales siguen de cerca es la del sistema financiero. Aun admitiendo que el sistema bancario est¨¦ en condiciones aceptables, la reforma de las cajas de ahorros va demasiado lenta y la nueva Ley de Cajas no parece suficiente. No ha habido valor para aplicar medidas dr¨¢sticas de intervenci¨®n (excepto en una), como se ha hecho en otros pa¨ªses, incluso con bancos privados de gran entidad. Tambi¨¦n la reforma del sistema de pensiones est¨¢ aplazada y en discusi¨®n.
Los mercados no dudan de los datos estad¨ªsticos de crecimiento ni de empleo, dudan de que se puedan cumplir las previsiones del Gobierno sobre crecimiento en 2011 y de que sea capaz de continuar con las reformas necesarias para atajar los problemas de la creciente financiaci¨®n del endeudamiento de la econom¨ªa espa?ola. Fundamentalmente no entienden y carecen de datos sobre el funcionamiento de las comunidades aut¨®nomas y de las cajas de ahorros. Espa?a ha "hecho los deberes", pero solo parcialmente, y eso no genera confianza.
Carmen Alcaide es analista y ex presidenta del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).
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