La UE entra en la guerra del presupuesto
Cameron convence a Merkel y Sarkozy para suscribir una carta dirigida a Barroso en la que se pide la congelaci¨®n de los gastos de la UE desde 2013 a 2020
Reino Unido trata una vez m¨¢s de ensombrecer los avances en la defensa del euro y sobre el Gobierno econ¨®mico de la UE alcanzados en la pasada cumbre europea con la apertura de una batalla sobre el presupuesto comunitario. El primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, ha convencido a la canciller alemana, ?ngela Merkel, y al presidente franc¨¦s, Nicol¨¢s Sarkozy, para suscribir una carta en la que solicitan la congelaci¨®n del ya escu¨¢lido presupuesto, que actualmente est¨¢ entorno al 1% del producto interior bruto (PIB) de la UE. Unos 126.500 millones para 2011. La misiva, suscrita tambi¨¦n por los primeros ministros de Holanda, Mark Rutte, y de Finlandia, Mari Kiviniemi, fue enviada ayer al presidente de la Comisi¨®n Europea, Dur?o Barroso.
La iniciativa ha causado malestar entre los nuevos socios comunitarios
Espa?a, que en 2014 ser¨¢ contribuyente, no quiere abrir el debate por ahora
Los cinco l¨ªderes, todos pertenecientes a pa¨ªses que son contribuyentes netos, proponen que en el pr¨®ximo marco plurianual de las perspectivas financieras (2014 -2020), los compromisos de gasto "no deben exceder el nivel de 2013, con un crecimiento en todo caso inferior a la inflaci¨®n". El texto sostiene que "el reto de los pr¨®ximos a?os no ser¨¢ para UE gastar m¨¢s, sino gastar mejor". Los cinco mandatarios afirman que "la puesta en marcha de pol¨ªticas ambiciosas al servicio de los ciudadanos es posible con un volumen estable de gastos". Los firmantes abogan por "un seguimiento preciso de los gastos comprometidos" y "la simplificaci¨®n del marco financiero".
La iniciativa ha causado un fuerte malestar a los nuevos socios comunitarios, que se incorporaron a la Uni¨®n en 2004 o 2007, especialmente a Polonia, Hungr¨ªa, Bulgaria y Rumania, principales receptores de fondos comunitarios. Donald Tusk, primer ministro de Polonia, ha manifestado que "lo m¨¢s importante desde nuestro punto de vista es que el presupuesto no sea reducido significativo, porque creemos que los fondos que fluyen hacia Polonia y otros pa¨ªses nos ayudan a luchar contra la crisis"
Cameron, al anunciar su intenci¨®n de presentar la carta, se?al¨® que su intenci¨®n era lograr "al menos una congelaci¨®n en t¨¦rminos nominales del presupuesto para este periodo". El primer ministro brit¨¢nico justific¨® su decisi¨®n se?alando que "en un momento en el que estamos aplicando recortes en nuestros propios pa¨ªses es inaceptable seguir gastando cada vez m¨¢s en la UE".
Cameron ha lanzado esta iniciativa como continuaci¨®n de "la victoria" lograda en el presupuesto de 2011, al conseguir que su aumento fuera s¨®lo del 2,9%, en lugar del 6,18%, que ped¨ªa el Parlamento Europeo. Los eurodiputados tras lograr que participar¨ªan en las negociaciones de las perspectivas financieras, lo que les permitir¨¢ intervenir en la elaboraci¨®n de los nuevos principios propios de la UE".
A pesar de esta imagen de triunfo que Cameron quiere atribuirse en el campo de los presupuestos de la UE, otras fuentes estiman, no obstante, que el l¨ªder conservador brit¨¢nico ha tenido que replegar velas y rebajar sustancialmente su propuesta inicial para lograr apoyos. Las mismas fuentes estiman que las pretensiones iniciales brit¨¢nicas aspiraban a un reducir el gasto comunitario hasta el 0,85%. La carta ha sido rubricada por menos pa¨ªses de los que se anunci¨® al principio. Suecia, Austria y Eslovenia no la han firmado por el momento, en contra de lo previsto.
La verdadera batalla del presupuesto no empezar¨¢, sin embargo, hasta junio de 2011, cuando la Comisi¨®n Europea presente su primera propuesta formal sobre las perspectivas financieras para el periodo 2014 -2020.
Espa?a, que hasta ahora ha sido uno de los grandes receptores netos y pasara a ser contribuyente neto a partir de 2014, mantiene una posici¨®n no beligerante. Diego L¨®pez Garrido, secretario de Estado para Asuntos Europeos, coincide con los nuevos pa¨ªses en el sentido de considerar que "ahora no es el momento para abrir este debate y que lo pertinente es esperar la presentaci¨®n de la propuesta de la Comisi¨®n el pr¨®ximo junio". Barroso asegur¨® que escuchar¨¢ la propuesta de los pa¨ªses que defienden una congelaci¨®n del gasto pero asegur¨® que la Comisi¨®n Europea presentar¨¢ su propuesta teniendo en cuenta "el inter¨¦s general".
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, neg¨® que existiera un pulso con Reino Unido, a quienes sosten¨ªan que est¨¢bamos ante una versi¨®n de la crisis de 1984, cuando la primera ministra Margaret Thatcher, exigi¨® y logr¨® que se le devolviera parte de su aportaci¨®n neta (el cheque brit¨¢nico), por estimar que era excesiva. Van Rompuy ha puntualiz¨® con cierto humor "somos gente educada y leeremos todas las cartas que nos dirijan".
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