Aprender ya no es memorizar
La leve mejora de Galicia en el informe Pisa se debe, entre otros factores, a que se comienzan a aplicar t¨¦cnicas de ense?anza por competencias
En un folio, un mapa de Australia y una escala. La prueba, calcular su superficie. El resultado no tiene que ser exacto, pero obliga a los alumnos a razonar y a usar sus conocimientos matem¨¢ticos. En otro folio, una ecuaci¨®n. La prueba, resolverla. Puede estar bien o mal, no hay t¨¦rmino medio. Los estudiantes se encuentran algo muy parecido al primer modelo cuando se someten a las evaluaciones del informe Pisa, que tasan los conocimientos de los escolares de todo el mundo. Los chavales espa?oles, sin embargo, sol¨ªan estar acostumbrados a aprender y ser examinados con pruebas m¨¢s similares al segundo modelo. Es una de las razones, seg¨²n cuentan varios profesores, de que la clasificaci¨®n de Espa?a quedase siempre por debajo de la media de los pa¨ªses de su entorno. Pero esto est¨¢ cambiando.
El estatus del profesor, la familia y el esfuerzo marcan los resultados
Hay menos an¨¢lisis morfol¨®gicos y m¨¢s comprensi¨®n de textos
Desde que se aprob¨® la LOE, en 2006, el modelo te¨®rico de ense?anza se cambi¨® por el aprendizaje por competencias, que es lo que eval¨²a Pisa. Desde entonces -entre la prueba de 2006 y la ¨²ltima, de 2009 y conocida hace unos d¨ªas-, Espa?a ha subido unos puntos en su clasificaci¨®n y Galicia, tambi¨¦n. Los docentes consultados coinciden en que no es algo coyuntural y que lo razonable es que los resultados educativos sigan al alza. Pero el modelo de aprendizaje es solo uno de los muchos factores que influir¨¢n en esto.
Para empezar porque, como explica Luis Fern¨¢ndez, director del IES Carlos Casares de Viana do Bolo (Ourense), "los sistemas educativos son reacios al cambio y las transformaciones son lentas". Firme partidario de la "ense?anza por competencias", explica que en su centro se eval¨²an m¨¢s estas que los conocimientos meramente te¨®ricos. "Como profesor de ciencias, me interesa m¨¢s que un alumno sepa analizar la contaminaci¨®n de un r¨ªo a que recite de memoria el curso alto, medio y bajo", explica.
Los ex¨¢menes de hace cinco a?os en su centro, seg¨²n cuenta Fern¨¢ndez, poco tienen que ver con los actuales. "Cada vez es m¨¢s raro proponer un an¨¢lisis morfol¨®gico de una frase y m¨¢s com¨²n pedir que titulen un texto de prensa y que analicen el qu¨¦, el cu¨¢ndo y el d¨®nde", a?ade.
Las ¨²ltimas pruebas de Pisa ten¨ªan como eje, precisamente la comprensi¨®n lectora. Galicia alcanz¨® 486 puntos, siete m¨¢s que en el informe de 2006, y cinco m¨¢s que el promedio espa?ol. La comunidad se sit¨²a en el grupo intermedio, al nivel del Pa¨ªs Vasco, Asturias, Cantabria y Murcia.
Cristina Novoa, asesora de bibliotecas escolares de la Conseller¨ªa de Educaci¨®n, asegura que los planes para fomentar la lectura que se han impulsado en los ¨²ltimos a?os tambi¨¦n han podido influir en estos resultados. El plan de mejora de bibliotecas en los centros se puso en marcha en 2005. "La mayor presencia de los libros y la lectura en el d¨ªa a d¨ªa en los centros y la facilidad con que los ni?os tienen acceso a los libros, sin duda puede redundar en una mayor compresi¨®n lectora", se?ala Novoa.
Cada mejora se engrosa en una multitud de factores que determinan el rendimiento. Los m¨¢s importantes son los m¨¢s dif¨ªciles de cambiar, en opini¨®n del presidente de la Asociaci¨®n Gallega de Profesores de Matem¨¢ticas (Agapema), Manuel D¨ªaz Regueiro. Esfuerzo y aprecio por la tarea del docente son fundamentales para ¨¦l. "No tenemos una cultura en la que los alumnos se esfuercen y la consideraci¨®n de los profesores est¨¢ muy por debajo de otros pa¨ªses. Mientras siga as¨ª, ser¨¢ muy dif¨ªcil superarlos", dice.
A estos factores, Marcos V¨¢zquez, del IES Ant¨®n Fraguas de Santiago, a?ade el que ¨¦l considera principal: la familia. "El inter¨¦s que tengan en casa de que los ni?os estudien, que se molesten en preguntar c¨®mo van las cosas. Si nos preocupamos de que a los chavales les interese el estudio, ganaremos mucho", se?ala. Adem¨¢s del factor familiar, no menosprecia la importancia que pueden tener los m¨¦todos pedag¨®gicos -"los alumnos retienen lo que hacen, no tanto lo que memorizan"- o las nuevas tecnolog¨ªas.
Antes del Plan Abalar de la Conseller¨ªa de Educaci¨®n, que proporcionar¨¢ ordenadores a los alumnos gallegos y pizarras digitales y conexiones a Internet a sus aulas, muchos docentes ya pusieron de su parte para llevar las tecnolog¨ªas a clase. Uno de los ejemplos m¨¢s claros es el del colegio rural Nosa Se?ora do Faro de Ponteceso. Su directora, Rosa Barreiro, explica que tienen ordenadores desde hace 10 a?os gracias al esfuerzo de los profesores y a numerosos premios que han ganado en este tiempo. "Los equipos inform¨¢ticos te hacen plantear las cosas de otra forma", argumenta. Su centro, adem¨¢s, es uno de los pocos en Galicia que funcionan con certificados de calidad. Todos los a?os pasan auditor¨ªas que les sirven, seg¨²n cuenta, para saber en qu¨¦ cosas se puede mejorar, desde la comunicaci¨®n con las familias, hasta los asuntos de mantenimiento. "M¨¢s all¨¢ de que se use una empresa auditora [Aenor] como hacemos nosotros, es un m¨¦todo que se puede usar en cualquier centro", a?ade.
Pero el proceso, como recordaba Fern¨¢ndez, es lento. Muchos libros de texto siguen desfasados, seg¨²n dicen los docentes, y muchos profesores, tambi¨¦n. Aun con esto al d¨ªa, lo que pasa fuera del colegio puede ser tan importante como lo de dentro para mejorar las notas. Los resultados del pr¨®ximo informe Piso dependen de todos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.