"Me han colocado en la c¨¢rcel junto a los pederastas"
La estancia de Julian Assange en la prisi¨®n de Wandsworth contiene una historia inquietante. Un d¨ªa, a la hora de comer, atac¨® un plato de arroz con jud¨ªas cuando, de pronto, not¨® que algo se quebraba en su boca. Adi¨®s a un diente. El objeto met¨¢lico se lo parti¨®. "No s¨¦ si hab¨ªa sido colocado all¨ª o fue un simple accidente". Al llegar a su celda de aislamiento, envolvi¨® el diente en un papel de color blanco. Sali¨® por espacio de una hora. Cuando volvi¨® a la celda, el diente hab¨ªa desaparecido. "Pronto estar¨¢ a la venta en Ebay", bromea el australiano, en la cocina de la mansi¨®n de su amigo Vaughan Smith, su protector en suelo brit¨¢nico, el hombre que le ha proporcionado un domicilio en el que pueda estar localizado durante su periodo en libertad bajo fianza.
"El apoyo ha sido mundial, sobre todo en Sudam¨¦rica y Australia"
"Tengo dos h¨¦roes en este mundo: Luther King y usted", le dijeron en la c¨¢rcel
"Nunca he tenido una relaci¨®n sexual con nadie sin consentimiento"
-?Y por qu¨¦ cree usted que se lo robaron?
-Supongo que porque no quer¨ªan que hubiese ning¨²n tipo de evidencia de que un episodio as¨ª hubiera ocurrido.
Assange concede su primera entrevista desde que sali¨® de la c¨¢rcel. Es la primera vez que dos periodistas penetran en la lujosa mansi¨®n de Smith, una casa de estilo georgiano rodeada de peque?os lagos y totalmente cubierta de nieve. El australiano tiene muy buena cara. Bebe t¨¦ y habla, como siempre, en un tono de voz muy bajo.
El editor, de 39 a?os, muta en el momento en que empieza la entrevista. La cercan¨ªa, las risas y su humor agudo cesan en el momento en que se enciende la grabadora. Toma aire y se transforma. Se mete en su papel de hombre que lucha por la libertad de expresi¨®n. De fundador de Wikileaks, la web que acaba de poner al desnudo a la diplomacia norteamericana mundial. De hombre perseguido por la justicia sueca por un supuesto delito de violaci¨®n. De hombre acosado por una mano movida por alguien que habla con acento norteamericano.
-Empezaremos con una pregunta muy b¨¢sica. ?C¨®mo se encuentra usted en estos d¨ªas?
-Es maravilloso haber abandonado el confinamiento en soledad. Me siento muy determinado. He visto que hemos recibido apoyo a escala mundial, especialmente en Sudam¨¦rica y Australia y parece como si todo el mundo en todas partes nos apoyara. Pero cuanto m¨¢s cercano est¨¢ un hombre al poder, menos predispuesto est¨¢ a apoyarnos, probablemente porque tiene m¨¢s que perder. En los ¨²ltimos 10 d¨ªas hemos visto a gente, incluso cercana al poder, que nos ha apoyado.
-Como el presidente Lula.
-Como Lula. Es un caso especial, porque se ha retirado, y eso le permite ser m¨¢s directo de lo que habr¨ªa sido. Ya no tiene que rendir ninguna pleites¨ªa a los Estados Unidos.
-El jueves sali¨® usted en libertad y pronunci¨® unas palabras en las escalinatas del Tribunal Superior en que...
-Fui tan r¨¢pido... Me podr¨ªa haber quedado all¨ª hablando durante una hora, pero la polic¨ªa estaba preocupada porque pudiera ser asesinado o algo as¨ª.
-?Fue ese el motivo por el que hizo una declaraci¨®n tan r¨¢pida?
-S¨ª.
-Varias figuras representativas de la pol¨ªtica norteamericana han dicho p¨²blicamente que hab¨ªa que acabar con usted. ?Recibe otras amenazas?
-Recibo amenazas de muerte todo el rato. Mi abogado las recibe, mis hijos las reciben.
-?De d¨®nde proceden?
-La mayor¨ªa parecen provenir de miembros de las fuerzas armadas norteamericanas.
-Dijo usted que en sus d¨ªas en prisi¨®n se hab¨ªa acordado de todas las personas que est¨¢n en prisi¨®n a lo largo y ancho del mundo. Pero, ?qu¨¦ han supuesto esos nueve d¨ªas para usted?
-Fui transferido tres veces. Primero estuve en las celdas para presos reci¨¦n detenidos. Todas las celdas por las que he pasado estuvieron siempre cerradas, al contrario de lo que ocurre con otros presos. Luego me transfirieron al ala Onslaw, que tiene 350 prisioneros: son los que corren un peligro f¨ªsico respecto de otros prisioneros o guardas, gente que supuestamente ha sido condenada por delitos sexuales, asesinatos de ni?os... Yo no pod¨ªa salir de mi celda, pero muchos presos deslizaban cosas bajo mi puerta. Hab¨ªa mucha curiosidad.
-?Notas, misivas?
-S¨ª. Todos los presos que hay en Wandsworth son gente que est¨¢ esperando a ser extraditada. Me pasaban actas de extradici¨®n norteamericanas. Pero se consider¨® que segu¨ªa siendo demasiado peligroso para m¨ª seguir en Onslaw.
-?Por qu¨¦?
-Por el peligro de que alguien me atacara o me matara. As¨ª que me movieron a la unidad de aislamiento, bautizada eufem¨ªsticamente como La Unidad de Cuidado y Separaci¨®n... donde env¨ªan a los prisioneros m¨¢s d¨ªscolos.
-?Cambiaban las condiciones de celda a celda?
-S¨ª, cada vez eran m¨¢s duras. Siempre hay una c¨¢mara grabando. Cada prisionero est¨¢ aislado. Hubo d¨ªas en que solo estaba yo en esa unidad. Hab¨ªa pederastas enloquecidos que gritaban toda la noche, gritaban sobre sus cr¨ªmenes.
El fundador de Wikileaks dice que el sistema de la prisi¨®n era muy "soviet". Muy burocr¨¢tico. Para llamar por tel¨¦fono hab¨ªa que iniciar procedimientos que duraban una eternidad. Solo consigui¨® efectuar cuatro llamadas a personas que no fueran sus abogados. Dice que la mayor¨ªa de las personas que lo custodiaban estaban de su lado. Un oficial le entreg¨® una tarjeta en la que hab¨ªa escrito: "Solo tengo dos h¨¦roes en este mundo: Martin Luther King y usted".
Aguant¨® entre rejas haciendo ejercicio todos los d¨ªas, escribiendo notas de an¨¢lisis sobre Wikileaks para entreg¨¢rselas a sus colegas, leyendo Pabell¨®n de C¨¢ncer, de Alexandr Soljenitsin. Pero se dio cuenta de lo importante que es poder hacer una llamada de tel¨¦fono. O llevar pantalones que tengan bolsillos.
El s¨¢bado pasado, The Guardian hizo una reconstrucci¨®n de c¨®mo fueron los d¨ªas que Assange pas¨® en Estocolmo en agosto, cuando se gestaron las dos denuncias. Tras acceder a testimonios que recogi¨® en aquellos d¨ªas la Fiscal¨ªa sueca, el diario brit¨¢nico daba todo tipo de detalles sobre las relaciones sexuales que mantuvo Assange con Miss A. y Miss W. "Como de costumbre, casi nada es lo que parece", dice al respecto. "Es la ¨²ltima acci¨®n de la campa?a de descr¨¦dito de que estoy siendo objeto". El ex hacker critica que The Guardian solo haya contado parte de la historia, ignorando algunas informaciones que, dice, contiene el pliego de alegaciones. Entre otras, dice Assange, el testimonio de una de las chicas, que alega, fue empujada a declarar por la polic¨ªa.
-En la reconstrucci¨®n de The Guardian dan todo tipo de detalles, pero, en cualquier caso, relata un momento en que usted mantiene relaciones con una persona que estaba dormida sin usar preservativo...
-Es una simple declaraci¨®n ante la polic¨ªa. Una alegaci¨®n que es falsa. Como la mayor parte en este caso.
-?Hasta qu¨¦ punto considera usted que el problema reside en las diferencias legislativas entre pa¨ªses en lo que se considera violaci¨®n?
Assange coloca las manos sobre la mesa y empuja su silla hacia atr¨¢s. Se pone muy serio.
-Lo que ha conseguido esta campa?a de descr¨¦dito es crear una inmensa caja negra. Y en el exterior de esa caja negra han colocado la palabra violaci¨®n. Pero se nos ha negado, a nosotros y al mundo, lo que hay dentro de esa caja negra. El p¨²blico ha ido consiguiendo poco a poco detalles de cada una de las alegaciones que contiene la caja. Incluso con lo que ha sido alegado, ninguna persona razonable dir¨ªa que eso es una violaci¨®n.
-?Lo que usted dice es que con lo que sabemos hasta ahora del caso, nadie pensar¨ªa que eso es violaci¨®n?
-Correcto.
-Se ha criticado que hay dos mujeres que est¨¢n pasando malos momentos ahora, que est¨¢n siendo desacreditadas desde m¨²ltiples foros; su identidad est¨¢ siendo revelada en la Red, donde han colgado fotos suyas.
-Hay rendijas en la ley sueca. Puedes ir a la polic¨ªa y no hacer una denuncia, sino decir que vas a pedir "consejo". Hay otra rendija sobre reportar informaci¨®n sobre enfermedades de transmisi¨®n sexual, que yo no ten¨ªa... Ambas rendijas fueron usadas en este caso. Una de las demandantes tiene una extensa experiencia en c¨®mo presentar querellas.
-?Qu¨¦ tipo de querellas?
-Querellas de g¨¦nero ante la polic¨ªa.
-?Usted dir¨ªa que nunca ha violado a nadie?
-No me gusta ver la palabra violaci¨®n junto a mi nombre. Yo nunca he tenido una relaci¨®n sexual con nadie sin su consentimiento. Ha sido muy dif¨ªcil conseguir detalles en este caso y nos quedan muchos por conocer. Ninguna documentaci¨®n me ha sido entregada a¨²n en ingl¨¦s, lo que constituye una violaci¨®n de la convenci¨®n europea de derechos humanos. Siempre ha sido f¨¢cil para m¨ª decir, saber, que nunca he tenido relaciones sexuales con nadie sin su consentimiento.
-?Qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de toda la campa?a de descr¨¦dito?
-No quiero decir que haya una cadena de ¨®rdenes desde Hillary Clinton hasta llegar a un periodista que trabaja en The Guardian, eso es rid¨ªculo, las cosas no funcionan as¨ª en el mundo real, que es mucho m¨¢s interesante y sutil. El gran poder crea un ambiente en el que los individuos, pr¨¢cticamente, chupan de lo que perciben que quiere el poder. En cada organizaci¨®n o grupo puede haber instrucciones directas, pero cada individuo y grupo act¨²a del modo que, percibe, maximiza sus propios intereses. Carreras ambiciosas, fama, mantener y crear alianzas, hacer favores, favores a amigos, parientes, entre miembros de un mismo partido... hacer las cosas por el miedo, sin que te las hayan pedido... todas esas cosas crean un ambiente.
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