Credibilidad y transparencia

Parte de las dificultades de financiaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola y del aumento del riesgo soberano -con los incrementos de los tipos de inter¨¦s al que le someten los mercados para tomar deuda espa?ola- se deben a la falta de credibilidad.

Las elevadas necesidades de financiaci¨®n se reflejan en un d¨¦ficit por cuenta corriente. Aunque ha mejorado ligeramente durante la crisis, su previsi¨®n oficial todav¨ªa se sit¨²a en un 4% del PIB en 2010. Y lo que es peor, existe una debilidad en nuestras cuentas exteriores por la falta de competitividad de nuestros productos, que se agudiza en cuanto crece algo m¨¢s la actividad por la necesidad de aumentar las importaciones. Hecho solo justificable en cuanto a las importaciones de petr¨®leo y de otros productos de los que carecemos, pero no en aquellas manufacturas de las que en otras ¨¦pocas ¨¦ramos proveedores.

En la web del Ministerio de Econom¨ªa se pueden ver los ingresos y gastos de cada comunidad aut¨®noma

La cultura de la transparencia deber¨ªa generalizarse al conjunto de la sociedad

Como he comentado en otras ocasiones, la falta de credibilidad de los mercados y analistas extranjeros se basa fundamentalmente en su falta de entendimiento y compresi¨®n en dos aspectos: el funcionamiento y estado de las cajas de ahorros dentro del sistema financiero espa?ol y la financiaci¨®n y resultados de las comunidades aut¨®nomas.

Contra esta falta de credibilidad solo se puede luchar con transparencia de la informaci¨®n, de manera que con datos veraces y cre¨ªbles se pueda conocer mejor la verdadera situaci¨®n de las instituciones y de la situaci¨®n financiera del pa¨ªs.

La pol¨ªtica de consolidaci¨®n fiscal se ha convertido en pieza clave de los ajustes dentro de la Uni¨®n Europea. De momento, los datos conocidos con detalle de la ejecuci¨®n presupuestaria del Estado permiten asegurar que se va en la l¨ªnea correcta. En el momento de escribir este art¨ªculo se acaban de presentar por primera vez los resultados de d¨¦ficit en t¨¦rminos de ejecuci¨®n presupuestaria tanto agregados para el conjunto como para cada una de las comunidades aut¨®nomas.

Los datos ofrecidos son bastante positivos, ya que el d¨¦ficit acumulado en los tres primeros trimestres asciende al 1,24% del PIB y, en opini¨®n del Gobierno, este d¨¦ficit es compatible con el objetivo previsto para las comunidades aut¨®nomas en el a?o (2,4% del PIB) y para el conjunto de las Administraciones p¨²blicas para cumplir con la senda de consolidaci¨®n fiscal comprometida con la UE (9,3% del PIB).

Es la primera vez que se dispone de una informaci¨®n en t¨¦rminos homog¨¦neos y adem¨¢s se comprometen a dar esta informaci¨®n cada trimestre. Es una buena noticia. Aunque en un primer momento parec¨ªa que solo se trataba de los datos del d¨¦ficit, en la p¨¢gina web del Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda, secci¨®n de estad¨ªsticas territoriales, pueden encontrarse los detalles de los ingresos y gastos de cada comunidad aut¨®noma en t¨¦rminos homog¨¦neos. As¨ª, los ciudadanos podr¨ªan enjuiciar la gesti¨®n de sus autoridades respectivas y los analistas podr¨ªan profundizar en sus estudios y comparaciones de las mismas.

En cuanto a la transparencia en las entidades financieras, el Banco de Espa?a, que siempre ha mantenido una regulaci¨®n estricta respecto a la capitalizaci¨®n y provisiones de bancos y cajas, quiere profundizar en la transparencia de la informaci¨®n detallada sobre su exposici¨®n al sector de promoci¨®n y construcci¨®n, as¨ª como los porcentajes de cr¨¦ditos de dudoso cobro, las garant¨ªas, las coberturas y el grado de provisi¨®n de los dudosos en el sistema financiero espa?ol. De manera que con datos suficientes los mercados y las instituciones valoren en su justo t¨¦rmino el estado y salud del sistema financiero espa?ol. Solo con un elevado grado de transparencia pueden evitarse las dudas y suspicacias, as¨ª como las falsas similitudes con otros sistemas financieros que est¨¢n en situaciones mucho peores. Como ha se?alado el gobernador del Banco de Espa?a, "la reacci¨®n m¨¢s adecuada es proporcionarles la mayor y mejor informaci¨®n posible".

Estamos pues en la buena direcci¨®n y parece que la cultura de la transparencia comienza a tener m¨¢s fuerza y deber¨ªa generalizarse al conjunto de las Administraciones y de la sociedad en general. Otro d¨ªa, ya el pr¨®ximo a?o, analizaremos el tema de la poca competitividad de nuestros productos.

Carmen Alcaide es analista y ex presidenta del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).