"Pi?era maneja la pol¨ªtica y sus negocios al l¨ªmite de la ¨¦tica y la ley"

Antes de que el pasado 13 de septiembre el presidente de Chile, Sebasti¨¢n Pi?era, dirigiese el rescate de 33 hombres atrapados en la mina San Jos¨¦... Antes de que el 11 de marzo de 2010 lograra convertirse en el primer presidente de derechas elegido democr¨¢ticamente en los ¨²ltimos 50 a?os de su pa¨ªs... Mucho antes de todo eso, la Embajada de Estados Unidos en Santiago ya ven¨ªa escrutando sus pasos con cierto recelo.

En un despacho del 9 de octubre de 2009 se le describ¨ªa as¨ª: "Hombre de negocios competitivo y pol¨ªtico que tiende a tomar riesgos, Pi?era ha estado vinculado en el pasado a un n¨²mero de cuestionables acciones sobre sus negocios, pero los votantes parecen relativamente desinteresados por estas acusaciones".

Un cable recuerda que fue acusado de usar "informaci¨®n privilegiada"

"Hizo ostentaci¨®n de su lado elitista, dejando claro que se gradu¨® en Harvard"

El informe, redactado por la n¨²mero dos de la embajada, Carol Urban, cita la acusaci¨®n que sali¨® a relucir el 23 de septiembre de 2009 durante un debate electoral con el candidato presidencial de la Concertaci¨®n de centro-izquierda, Eduardo Frei. Frei sac¨® a colaci¨®n un informe de Transparencia Internacional en el que se indicaba que, en julio de 2006, cuando el actual presidente de Chile estaba al mando de la compa?¨ªa a¨¦rea LAN, compr¨® tres millones de acciones varias horas despu¨¦s de recibir un informe financiero de la compa?¨ªa que no hab¨ªa sido publicado.

Las autoridades burs¨¢tiles de Chile investigaron el caso y acusaron a Pi?era de "abuso de informaci¨®n privilegiada". Pi?era pag¨® una multa de 700.000 d¨®lares, abandon¨® la presidencia de LAN, pero neg¨® haber actuado de forma inapropiada. En las semanas siguientes, Pi?era acus¨® a Transparente, la filial de la ONG en Chile, de actuar movida por prejuicios pol¨ªticos. El debate sobre sus acciones se troc¨® en un debate sobre Transparente, hasta el punto de que un miembro de esta organizaci¨®n tuvo que dimitir.

Lo que llam¨® la atenci¨®n de la embajada fue la forma en que Pi?era consigui¨® volver las lanzas contra Transparencia. Eso fue posible, seg¨²n los diplom¨¢ticos, gracias a tres factores: un admirable equipo de campa?a deseoso de pasar al ataque, la mediocre estrategia comunicativa de su oponente y la ayuda de la "prensa de Santiago, generalmente conservadora".

En el cable se rese?a con crudeza el periodo en que Pi?era ejerci¨® de director general del Banco de Talca (1979-1980). "Como muchos otros bancos de la ¨¦poca -y no muy diferente de la reciente crisis financiera de Estados Unidos- el Banco de Talca concedi¨® muchos cr¨¦ditos arriesgados, que inicialmente generaban apreciables beneficios, pero finalmente llevaron a la bancarrota. Sin embargo, Pi?era y otros directivos del Talca fueron m¨¢s all¨¢ de las t¨ªpicas actuaciones inapropiadas de la ¨¦poca. Adem¨¢s de los cr¨¦ditos dudosos que aprobaron, tambi¨¦n crearon docenas de falsas compa?¨ªas, les concedieron cr¨¦ditos del banco y usaron esos fondos para comprar m¨¢s acciones del banco".

El informe concluye: "Tenaz y competitivo, Pi?era maneja tanto sus negocios como su pol¨ªtica hasta los l¨ªmites de la ley y la ¨¦tica. Algunas de sus acciones, como prestar dinero a empresas ficticias, parecen cruzar claramente la l¨ªnea de la incorrecci¨®n legal. Otras veces, sin embargo, parece m¨¢s una v¨ªctima de las circunstancias, de la negligencia o de la inmensa vastedad de su fortuna".

EE UU quer¨ªa seguir de cerca los pasos de aquel multimillonario empe?ado en ser presidente. El 13 de marzo de 2008 el embajador Paul Simons y su consejero pol¨ªtico Juan A. Alsace visitaron a Pi?era, quien ya hab¨ªa perdido contra Michelle Bachelet en 2005 (54% frente a 46% de los votos) y se preparaba para concurrir a las elecciones de 2009.

"Bachelet es una buena mujer, pero mala presidenta", les dijo Pi?era.

Cuatro d¨ªas despu¨¦s, el consejero pol¨ªtico redactar¨ªa en su informe que Pi?era tachaba al Gobierno de la Concertaci¨®n, tras 20 a?os en el poder, de "incompetencia y corrupci¨®n". "Sin embargo", agregaba el diplom¨¢tico, "Pi?era se queda corto a la hora de ofrecer soluciones".

Pi?era les asegur¨® que dispon¨ªa de "600 profesionales" -la mitad de ellos, con t¨ªtulos universitarios- trabajando en su programa de gobierno. Cuando el embajador le pidi¨® que concretase un poco m¨¢s, Pi?era respondi¨® con vaguedades.

El actual presidente, que se doctor¨® en Harvard con una tesis que se titulaba Econom¨ªa de la educaci¨®n en pa¨ªses en desarrollo, coment¨® que parte del problema de la educaci¨®n en Chile era que los siete principales responsables del Ministerio de Educaci¨®n pose¨ªan una pobre formaci¨®n y no sab¨ªan hablar ingl¨¦s. En ese punto, el consejero pol¨ªtico abri¨® un par¨¦ntesis en su relato: "Pi?era, que se gradu¨® en Harvard, hizo ostentaci¨®n de su lado elitista, dejando claro que los siete se hab¨ªa formado en 'escuelas mediocres".

Despu¨¦s de escrutarlo detenidamente y de analizar la situaci¨®n del pa¨ªs, los diplom¨¢ticos estadounidenses concluyeron que Pi?era ten¨ªa razones para mostrarse confiado en ganar las elecciones. Pero creyeron detectar su punto d¨¦bil cuando hablaron de cuestiones econ¨®micas y sali¨® a relucir el nombre del dictador Augusto Pinochet. Pi?era adujo que la Concertaci¨®n hab¨ªa hecho bien en continuar con la pol¨ªtica econ¨®mica de Pinochet y lo justific¨® con una frase que los diplom¨¢ticos citaron textualmente: "Uno no destruye las pir¨¢mides porque se hubieran perdido vidas al construirlas".

Cuatro d¨ªas despu¨¦s, el consejero pol¨ªtico escribir¨ªa: "Esta actitud caballerosa hacia el abuso sobre los derechos humanos del r¨¦gimen de Pinochet es uno de los talones de Aquiles del centro-derecha, una actitud que no casa bien con la mayor¨ªa de votantes de centro-izquierda". El diplom¨¢tico olvid¨® rese?ar que Pi?era se pronunci¨® contra Pinochet en el plesbicito de 1988 que abri¨® el camino a la democracia en Chile.

Sin embargo, pocos d¨ªas despu¨¦s de que Pi?era ganase las elecciones, el retrato del presidente en otro cable redactado por Carol Urban lo calificaba de un "anti-Pinochet centrista". El recelo que la embajada mostraba un a?o atr¨¢s desapareci¨® de pronto: "En el pasado forz¨® los l¨ªmites de su pol¨ªtica y sus negocios, pero ha movido sus ingentes inversiones para evitar conflictos de intereses". Desde ese momento, a Pi?era se le describir¨ªa como una persona famosa por trabajar siete d¨ªas a la semana, "inteligente y decidida". "Quiere controlar cada detalle, desde el contenido de un discurso hasta la posici¨®n de las c¨¢maras y las luces".

En la embajada auguraban que Pi?era ser¨ªa un presidente de los que toman bien las riendas. Y en el fondo, eso es lo que ocurri¨® nueve meses despu¨¦s con el rescate de los mineros: el presidente organiz¨® el equipo de salvamento, prob¨® la c¨¢psula donde subir¨ªan los 33, y a punto estuvo de bajar ¨¦l mismo a la mina.

• Nacionales
• Internacionales