La escuela que solo admita ni?os o ni?as no recibir¨¢ dinero p¨²blico

El Gobierno quiere limitar la financiaci¨®n de la educaci¨®n separada por sexos, las escuelas solo para ni?os o solo para ni?as, en su mayor parte religiosas, y lo ha hecho a trav¨¦s del anteproyecto de Ley de Igualdad de Trato y no Discriminaci¨®n que present¨® el 7 de enero en el Consejo de Ministros, cuyo texto definitivo se conoci¨® ayer. La norma proh¨ªbe de forma expl¨ªcita que las escuelas que separan reciban dinero p¨²blico, y puedan, por tanto, convertirse en colegios concertados -sostenidos por fondos p¨²blicos- o perceptores de dinero a trav¨¦s de convenios puntuales. Los colegios para ni?os o ni?as podr¨¢n seguir funcionando, pero no los pagar¨¢ la Administraci¨®n en caso de que este aspecto de la ley sea aprobado por el Parlamento. En Espa?a hay 67 centros concertados que separan por sexo, seg¨²n datos del Ministerio de Educaci¨®n.

El Supremo dej¨® a las autonom¨ªas la potestad de financiar o no estos colegios

Cantabria se neg¨® en 2009 a renovar la subvenci¨®n a un centro solo de chicos

El texto es claro: el apartado segundo del art¨ªculo 16, el dedicado al derecho a la igualdad de trato y no discriminaci¨®n en la educaci¨®n, dispone que "en ning¨²n caso los centros educativos que excluyan del ingreso en los mismos a grupos o personas individuales por raz¨®n de alguna de las causas establecidas en esta Ley podr¨¢n acogerse a cualquier forma de financiaci¨®n p¨²blica", y una de las "causas" establecidas en la norma es el sexo.

El punto m¨¢s peliagudo es si esa redacci¨®n significa solo que no se podr¨¢n concertar m¨¢s colegios que separen por sexo o si adem¨¢s implica que esos 67 centros segregados subvencionados que ya existen perder¨¢n el concierto la pr¨®xima vez que se revise (las comunidades deciden la concesi¨®n de los conciertos, por cuatro a?os, tras los cuales, se revisa si se siguen cumpliendo los requisitos). El Ministerio de Educaci¨®n no aclara este punto. Sin embargo, desde Sanidad y Pol¨ªtica Social, que ha integrado el antiguo Ministerio de Igualdad, entienden que si se aprueba la ley tal y como est¨¢ no podr¨ªan renovarse esos conciertos a no ser que se convirtieran en colegios mixtos.

En 2008 el Tribunal Supremo dijo que, aunque los centros que separan por sexo son legales, las comunidades podr¨ªan negarles la subvenci¨®n porque la admisi¨®n de alumnos es competencia de quien financia esos centros. Desde entonces, muchas autonom¨ªas empezaron a anunciar que acabar¨ªan con los conciertos con colegios separados por sexo.

Sin embargo, solo Cantabria lo ha hecho. Galicia lo anunci¨®, pero con la llegada al Gobierno del PP, se dio marcha atr¨¢s. En Andaluc¨ªa, el Tribunal Superior de Justicia tiene paralizada la orden que exig¨ªa a los centros segregados convertirse en mixtos si quer¨ªan seguir siendo subvencionados. Pero en Cantabria, el Tribunal Superior acaba de dar la raz¨®n al Gobierno aut¨®nomo, que en 2009 decidi¨® no renovar el concierto a Torrevelo, solo para ni?os. Los responsables del centro recurrir¨¢n esa decisi¨®n ante el Supremo.

En cualq uier caso, parece claro que la redacci¨®n de la ley impedir¨ªa que ninguna autonom¨ªa concediera conciertos nuevos a colegios segregados, cosa que ahora mismo pueden hacer si quieren.

En cualquier caso, el Gobierno insiste en que ese art¨ªculo 16 va m¨¢s all¨¢. Por ejemplo, pretende tambi¨¦n evitar la financiaci¨®n p¨²blica a los aquellos colegios concertados que no aceptan inmigrantes o lo hacen en mucho menor porcentaje que los directamente gestionados por el Estado.

Asimismo, el Gobierno aclara que el primer punto del art¨ªculo 16 -"Las administraciones educativas garantizar¨¢n la ausencia de cualquier forma de discriminaci¨®n"- no significa que los centros que separan por sexo se conviertan en ilegales. "Si est¨¢ justificado, bien, pero lo que no podr¨¢n hacer de ninguna forma es obtener dinero p¨²blico porque eso s¨ª est¨¢ directamente prohibido", indican fuentes de Sanidad.

Esta medida no se inclu¨ªa en el borrador que Igualdad ten¨ªa pr¨¢cticamente ultimado en septiembre y que fue adelantado por EL PA?S. Ha sido una decisi¨®n de ¨²ltima hora del Ejecutivo; la semana pasada, cuando el texto pas¨® al Consejo de Ministros, a¨²n no ten¨ªa decidido si introducirla o no.

El l¨ªder de Uni¨®, Josep Antoni Duran i Lleida, consider¨® ayer que el anteproyecto "atenta" contra la libertad de educaci¨®n, informa ?ngels Pi?ol. Antonio Rodr¨ªguez-Campra, presidente de la Confederaci¨®n Espa?ola de Centros de Ense?anza (CECE), que cuenta entre sus asociados a colegios que separan por sexo, record¨® que, seg¨²n la normativa europea, la educaci¨®n diferenciada (rechazan la palabra segregaci¨®n) no es discriminatoria, "sino otra opci¨®n pedag¨®gica, tan respetable como cualquiera". "Si fuera discriminatoria, ser¨ªa delito" y, como no lo es, tiene derecho a subvenci¨®n porque los padres tienen derecho a elegirla, dice.

Mientras, los detractores de la ense?anza separada defienden la educaci¨®n mixta como la mejor manera de educar en igualdad. "La coeducaci¨®n ha demostrado que funciona y separar siempre es negativo", dice la catedr¨¢tica em¨¦rita de Sociolog¨ªa de la Aut¨®noma de Barcelona Marina Subirats. Y a?ade: "Si hay alguien que se empe?a [en la educaci¨®n separada], que se lo pague".

A pesar de que en Espa?a la educaci¨®n separada siempre ha estado ligada a cierta concepci¨®n social y religiosa (la mayor¨ªa de los 89 centros separados tienen idearos cat¨®licos), sus defensores esgrimen cada vez m¨¢s argumentos de eficacia educativa, como que las diferencias biol¨®gicas de g¨¦nero condicionan el aprendizaje, por lo que se alcanza el m¨¢ximo potencial por separado. Una idea que rechaz¨® un estudio de la OCDE de 2009 sobre datos del informe PISA.