La necesidad de preservar la cultura del acuerdo

En la actual situaci¨®n de Espa?a de crisis econ¨®mica y de empleo, con cerca de cuatro millones de parados, es preciso destacar que hemos sido capaces de articular un Pacto de Estado que preserva del debate electoralista y el conflicto social la esencia misma de nuestro Estado de Bienestar: las pensiones. Gracias al m¨¦todo instaurado en el Pacto de Toledo, basado en la negociaci¨®n y el acuerdo, se ha conseguido realizar las reformas necesarias con una alt¨ªsima legitimaci¨®n social. Una legitimaci¨®n, por cierto, tanto de los contenidos de los propios acuerdos como de quienes los han hecho posibles.

Con este m¨¦todo nuestras pensiones est¨¢n insertas en un proceso peri¨®dico, casi podr¨ªamos decir que sistem¨¢tico, de reformas en las que llevamos embarcados m¨¢s de 15 a?os. Se han realizado varias reformas legislativas. Todas ellas engarzadas en una hoja de ruta clara y consensuada, presidida por las recomendaciones parlamentarias del Pacto de Toledo.

La se?a distintiva de todas estas reformas ha sido la de la negociaci¨®n y los acuerdos amplios en el ¨¢mbito pol¨ªtico (Congreso) y en el social (con sindicatos y empresarios). Esto ha hecho posible que todas ellas hayan estado presididas por la l¨®gica del equilibrio, que s¨®lo puede derivarse del debate y el acuerdo entre quienes representan el conjunto de intereses que conforman lo que llamamos "el inter¨¦s general". Hemos demostrado sobradamente que la negociaci¨®n no significa inacci¨®n, sino todo lo contrario.

Desde el movimiento sindical somos conscientes de que las reformas del sistema de pensiones son necesarias, pero no para calmar a los mercados (como est¨¢ argumentando el Gobierno) sino para garantizar la calidad de las pensiones y preservar sus niveles de protecci¨®n en el futuro como consecuencia del reto demogr¨¢fico y financiero que deben afrontar. Sabemos que el principal reto que hemos de abordar en pocas d¨¦cadas es el de tener que pagar m¨¢s pensiones, durante m¨¢s tiempo y m¨¢s altas. Para ello hemos puesto en la mesa de negociaci¨®n propuestas alternativas al retraso obligatorio y generalizado de la edad de jubilaci¨®n a los 67 a?os que plante¨® el Gobierno.

Es posible mejorar la protecci¨®n social y asegurar la sostenibilidad del sistema sin recurrir a meros recortes de derechos, actuando de forma equilibrada sobre los ingresos, los gastos y la equidad interna del sistema de pensiones; mejorando su contributividad, la protecci¨®n social de las mujeres y los j¨®venes como alternativa a la reducci¨®n del gasto.

Nuestro objetivo es garantizar la sostenibilidad del sistema y la cohesi¨®n social.

C¨¢ndido M¨¦ndez e Ignacio Fern¨¢ndez Toxo son los secretarios generales de UGT y CC OO.