Israel teme el avance islamista

Perder al casi ¨²nico amigo del bloque, cuando la relaci¨®n con el resto de los vecinos es m¨¢s bien mala, no son buenas noticias. As¨ª es como vive la rebeli¨®n egipcia Israel, un pa¨ªs temeroso de las intenciones del Gobierno que reemplace a su amigo leal en la regi¨®n, Hosni Mubarak, y que tiembla ante la perspectiva de quedarse rodeado de vecinos hostiles. Por eso, los israel¨ªes esperan con ansiedad el desenlace de la revuelta egipcia, que determinar¨¢ en buena medida el lugar de Israel en la regi¨®n e incluso en el mundo. Los temores de la clase pol¨ªtica son compartidos por el israel¨ª de a pie, admirador de la cultura egipcia, que teme perder adem¨¢s el acceso a uno de sus destinos tur¨ªsticos preferidos.

El Gobierno de Mubarak ha ejercido de amigo fiel para Israel

"Tememos que en Egipto se repita lo de Ir¨¢n", indica una fuente oficial israel¨ª

"No es que lo observemos con atenci¨®n, es que lo estamos viviendo. Es nuestra frontera sur y lo que pase all¨ª nos afecta directamente", explica una fuente oficial israel¨ª que prefiere no desvelar su identidad. El primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, ha ordenado que nadie del Gobierno se pronuncie en p¨²blico sobre la revuelta egipcia, lo que da una idea de la preocupaci¨®n con la que se vive el fin de un statu quo que ha durado 30 a?os y que ha permitido a Israel no tener que preocuparse por lo que pasara en su frontera sur.

Egipto es, junto con Jordania, el ¨²nico pa¨ªs del mundo ¨¢rabe que ha firmado un tratado de paz con Israel. La paz, en el caso de Egipto, ha ido mucho m¨¢s all¨¢ del cese de hostilidades. A pesar de que la poblaci¨®n egipcia desaprueba tanto como la del resto de la regi¨®n la pol¨ªtica israel¨ª en los territorios palestinos, el Gobierno de Mubarak ha ejercido de amigo fiel para los israel¨ªes. La colaboraci¨®n con Israel y tambi¨¦n con Occidente como mediador en el conflicto israelo-palestino ser¨¢ dif¨ªcilmente reemplazable, cavilan ahora en los despachos israel¨ªes. "Por eso le hemos apoyado hasta el final, porque a un amigo no se le abandona en los momentos dif¨ªciles. En Israel no se entiende el cambio de rumbo de la Casa Blanca", sostienen las mismas fuentes.

El origen de los temores radica en que la revuelta de Egipto termine por encumbrar a los Hermanos Musulmanes y que el cerco islamista, dicen, se estreche sobre los israel¨ªes. Hezbol¨¢ avanzando posiciones en el Gobierno liban¨¦s, Ham¨¢s al frente de la franja de Gaza, y ahora, en la frontera sur, piensan, Egipto. No es que crean que Egipto vaya a tener un Gobierno islamista de la noche a la ma?ana, pero s¨ª piensan que a un Gobierno de transici¨®n comandado por Omar Suleim¨¢n, y favorable a los intereses israel¨ªes, le puede suceder uno menos complaciente. Y que en cualquier caso la p¨¦rdida es irreparable. "Nunca va a ser lo mismo", se lamenta Eli Shaked, embajador de Israel en Egipto entre 2003 y 2005. "Aunque se quede Suleim¨¢n. Habr¨¢ reformas y el poder y la composici¨®n del Parlamento ser¨¢ otro, con mayor presencia de las voces antiisrael¨ªes", piensa Shaked.

La trayectoria de Ir¨¢n, el archienemigo israel¨ª, es otro de los grandes fantasmas que circula por el pa¨ªs. "Lo que tememos es que en Egipto se repita lo que sucedi¨® en Ir¨¢n, donde una oposici¨®n moderada dio paso a los extremistas actuales", indican las fuentes oficiales. Expres¨® esos temores con claridad la semana pasada Benjam¨ªn Netanyahu, en una de las escas¨ªsimas declaraciones oficiales: "Nuestro miedo es en qu¨¦ pueden desembocar. Que puedan dar lugar a reg¨ªmenes represivos del islam radical como ya ha sucedido en varios pa¨ªses, incluido Ir¨¢n".

De poco sirve que an¨¢lisis tras an¨¢lisis los historiadores y acad¨¦micos recalquen que los Hermanos Musulmanes no aspiran ni pueden hacerse con el control absoluto de un pa¨ªs en el que ha sido la poblaci¨®n m¨¢s laica la que ha impulsado la revuelta. Ha sido solo m¨¢s tarde cuando los islamistas se han subido al carro. Y que, en cualquier caso, los Hermanos no son lo mismo que Hezbol¨¢ ni que Ham¨¢s y mucho menos que Ir¨¢n. El miedo no entiende de razones, tampoco en Israel.

Para el israel¨ª de a pie, las noticias que llegan de su vecino del sur tambi¨¦n son motivo de preocupaci¨®n y por eso el seguimiento de los acontecimientos es exhaustivo. Los manifestantes de la plaza de la Liberaci¨®n cairota se cuelan en la primera p¨¢gina de los diarios desde el estallido de la revuelta, el d¨ªa 25 de enero. Este dato es significativo, en un pa¨ªs que tiende a mirar para dentro y a no prestar demasiada atenci¨®n a lo que ocurre en el resto del mundo.

El miedo sin embargo convive para muchos con el apoyo a la revuelta en pro de la democracia y de las libertades. Desean lo mejor para sus vecinos, a los que visitan en masa durante las vacaciones. Egipto es uno de los pocos pa¨ªses ¨¢rabes que los israel¨ªes se atreven y que les est¨¢ permitido pisar. Reflejaba ese sentimiento el artista israel¨ª Roy Arad en una columna que public¨® el diario Haaretz. "No tengo claro por qu¨¦ debemos tener miedo, o de d¨®nde sale la arrogancia de la gente para pensar que la democracia es solo un juguete para Occidente. Este momento ten¨ªa que llegar. No debemos sorprendernos ni tener miedo, tan solo preguntarnos por qu¨¦ no ha ocurrido antes".