Integraci¨®n real
El Ayuntamiento de Granada cuenta con 24 funcionarios de carrera con discapacidad intelectual
La historia de Casto Castillo y de Mari Cruz Oca?a es, como la de 22 personas m¨¢s, una muestra de integraci¨®n plena y real. Son funcionarios de carrera con discapacidad intelectual que trabajan en el Ayuntamiento de Granada. Nueve de ellos han tomado posesi¨®n esta semana. El Consistorio granadino fue pionero en la convocatoria de oposiciones especiales para este colectivo. Ya se ha celebrado la tercera y, tras esta experiencia, otros municipios andaluces y de otras comunidades, como el Pa¨ªs Vasco, han pedido informaci¨®n sobre el procedimiento a seguir.
Casto Castillo es s¨ªndrome de Down y lleva en el Ayuntamiento de la capital granadina desde 2001. "La edad no la digo que pertenece a mi intimidad", afirma resuelto. Le ha costado sacar su plaza, pero asegura que "con trabajo todo se puede lograr". Sonr¨ªe, como cada d¨ªa en la "zona noble" del Consistorio, que es donde dice orgulloso que desempe?a su trabajo. "Llevo los papeles a los jefes, ordeno el sal¨®n, atiendo al tel¨¦fono y hago fotocopias". Esas son algunas de las funciones que tiene como subalterno de Alcald¨ªa.
Mari Cruz Oca?a est¨¢ adscrita al ¨¢rea de Econom¨ªa. "Quiero seguir aqu¨ª hasta que me jubile", apunta. Ha obtenido la mejor nota de esta convocatoria y ha contado con la ayuda de la asociaci¨®n Borderline. La directora de Personal del Ayuntamiento, Mar¨ªa del Carmen Orantes, reconoce que se ha "sorprendido mucho" del nivel tan alto de conocimientos que tienen. El temario de oposici¨®n se ha adaptado sin perjuicio del respeto a las exigencias legales. Lo m¨¢s complicado, sin duda, la Constituci¨®n. "Ten¨ªa la cabeza como un bombo con lo de las leyes", comenta Castillo.
La parte pr¨¢ctica les era m¨¢s familiar puesto que la mayor¨ªa de los que han logrado la plaza ya llevaban a?os trabajando en el Ayuntamiento. "C¨®mo entrar en un despacho, hacer fotocopias, c¨®mo atender las llamadas o trasladar documentaci¨®n a otras sedes son los aspectos tratados", relata Mari Mart¨ªn, coordinadora de formaci¨®n e inserci¨®n laboral de la asociaci¨®n S¨ªndrome de Down de Granada. Ella es una de las que empez¨® hace a?os este proyecto de superaci¨®n que, subraya, "realmente permite una integraci¨®n total". De hecho, dos de estos funcionarios se han independizado y comparten piso con otros chicos con y sin discapacidad.
Un psic¨®logo, una trabajadora social y t¨¦cnicos tutores laborales de cada una de las asociaciones implicadas (S¨ªndrome Down, Aspace, Asprogrades, Borderline y S¨ªndrome Asperger) colaboran en el ajuste puesto-persona. El 4% de la poblaci¨®n en edad de trabajar en Andaluc¨ªa presenta alg¨²n tipo de discapacidad, seg¨²n el INE.
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