?A qu¨¦ suena el Metro?
Sonidos de un accidente real o de megafon¨ªas, entre las instalaciones sonoras que la muestra de arte contempor¨¢neo JustMadrid incluye en la red subterr¨¢nea
El and¨¦n de Serrano es un cachondeo. Desde ayer por la ma?ana la megafon¨ªa emite a todo trapo el sonido de la llegada de un tren que no llega, pero la gente se pone de pie o se acerca a la v¨ªa, a veces sin levantar la mirada del peri¨®dico o del libro, mira a izquierda y a derecha a ver si es su tren y, desconcertada, se vuelve a sentar porque no viene ninguno por ning¨²n lado. Acto seguido mira a su alrededor como diciendo: ?Alguien m¨¢s ha o¨ªdo que ven¨ªa el Metro? Luego, pasa otro Metro invisible y por fin, cuando ya nadie le espera, llega un tren visible. En dos minutos se toma conciencia de lo bien engarzados que estamos en la maquinaria de la ciudad.
La experiencia proviene de una instalaci¨®n sonora llamada Invisible D¨¦j¨¤ vu realizada con los sonidos de la propia estaci¨®n y creada por Iv¨¢n Pinto (Barcelona, 1975) con motivo de la segunda edici¨®n de la muestra de arte contempor¨¢neo JustMadrid, que arranc¨® ayer y que permanecer¨¢ hasta el pr¨®ximo domingo en el edificio del n¨²mero 29 de la calle Vel¨¢zquez.
Se han elegido cinco estaciones para crear una ruta ac¨²stica
Las instalaciones sonoras son uno de los aspectos m¨¢s novedosos de esta propuesta art¨ªstica que cumple dos a?os. Y se presenta como la m¨¢s cool a lo largo de esta semana en la que Madrid es capital del arte contempor¨¢neo: con ARCO (pabellones 8 y 10 de Ifema), Art Madrid (Pabell¨®n de cristal de la Casa de Campo), Madrid de Arte (Palacio de Congresos de la Castellana) y Flecha (Centro Comercial Arturo Soria).
"Me bas¨¦ en una idea que le¨ª en un libro de William Burroughs [representante de la llamada generaci¨®n Beat junto a Jack Kerouak y Allen Ginsberg] que hablaba de c¨®mo el ej¨¦rcito americano utilizaba grabaciones como estrategia en sus guerras", cuenta Pinto. "Trasladado al Metro, me limit¨¦ a intentar alterar esa m¨¢quina del tiempo perfecto reproduciendo un tiempo pasado y dot¨¢ndolo de esa memoria que no tiene", explica.
Serrano no es la ¨²nica estaci¨®n que cuenta con este tipo de instalaciones. Por ejemplo, en Vel¨¢zquez, Francisco L¨®pez emite los sonidos de las megafon¨ªas de distintos puntos del planeta: "S¨ª, estoy oyendo una nueva megafon¨ªa, pero no s¨¦ lo que dice", comenta Lourdes, que es invidente y se baja del vag¨®n con su bast¨®n. En la estaci¨®n de Col¨®n, Pablo Iglesias (Geso, Madrid, 1977) reproduce sonoramente un accidente de tr¨¢fico real y despu¨¦s trata de evocar ese momento infinito llamado liminal que sucede despu¨¦s de esa fuerte colisi¨®n: "?Es un coche o qu¨¦?", pregunta una viajera. En Retiro, Suso S¨¢iz (C¨¢diz, 1957) ha intentado meter el sol bajo tierra con una pieza que trata de sugerir "el movimiento del sol": "Un poco subjetivo, pero puede ser", comenta un viajero. Por ¨²ltimo, en Banco de Espa?a, Regina Galindo, se ha tra¨ªdo los sonidos de Ciudad de Guatemala. Todo un recorrido sonoro por la red (de Metro).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.