Gadafi reprime la revuelta con morteros y ametralladoras

El l¨ªder libio, Muamar el Gadafi, opt¨® ayer por reprimir las protestas libias con fuego de mortero y ametralladoras, seg¨²n testigos citados por el canal de televisi¨®n Al Yazira. Las primeras im¨¢genes que salen del pa¨ªs, v¨ªdeos caseros grabados por los propios manifestantes muestran grupos armados persiguiendo a la gente y a hombres cayendo por las balas.

Al menos 15 personas fallecieron en Benghazi por disparos de las fuerzas de seguridad, que abrieron fuego contra los participantes en una marcha f¨²nebre, seg¨²n inform¨® un m¨¦dico del hospital Al Jalah en declaraciones a la cadena pan¨¢rabe. Los disparos habr¨ªan causado adem¨¢s decenas de heridos. La marcha era para recordar a varios de los manifestantes fallecidos en los ¨²ltimos d¨ªas de protestas.

"Fracase o no, ser¨¢ la revoluci¨®n m¨¢s sangrienta", afirma un exiliado libio

Hay francotiradores que disparan contra la multitud, seg¨²n una web

Gadafi impuso ayer un manto de silencio sobre su pa¨ªs y en el quinto d¨ªa de protestas contra su r¨¦gimen trascendieron a¨²n menos informaciones que en d¨ªas anteriores sobre la sangrienta represi¨®n de la rebeli¨®n popular que pide a gritos su ca¨ªda. En Libia no hay prensa internacional, como hubo en Egipto o en T¨²nez, para cubrir unas revueltas que los medios de comunicaci¨®n locales pr¨¢cticamente ignoran.

Gran parte de la informaci¨®n sale del pa¨ªs a trav¨¦s de las redes sociales, pero el viernes el r¨¦gimen cort¨® el acceso a Twitter y a Facebook y, ayer, a Internet, siguiendo el ejemplo de lo que hizo a principios de mes el presidente Hosni Mubarak en Egipto. Al Yazira, la televisi¨®n pan¨¢rabe, no ha sido autorizada a entrar en Libia, pero ahora el r¨¦gimen se esfuerza para que tampoco pueda ser vista en el pa¨ªs interfiriendo la se?al del sat¨¦lite.

Esta opacidad hace a¨²n m¨¢s dif¨ªcil averiguar lo que de verdad sucede en el m¨¢s pr¨®spero y menos poblado de los pa¨ªses del ?frica mediterr¨¢nea, pero tambi¨¦n pone de relieve, junto con la despiadada represi¨®n, la determinaci¨®n de Gadafi, que lleva ya casi 42 a?os en el poder, a convertirse a cualquier precio en un gobernante sempiterno.

Las escasas informaciones que salen del pa¨ªs se obtienen, en buena medida, a trav¨¦s de llamadas telef¨®nicas o gracias, por ejemplo, a un v¨ªdeo sacado a escondidas por alg¨²n viajero. Es as¨ª, por ejemplo, como la ONG estadounidense Human Rights Watch (HRW) ha podido, telefoneando a algunas de sus fuentes, dar ayer un balance de muertos confirmados.

La cifra provisional de manifestantes v¨ªctimas de los disparos de la polic¨ªa y del Ej¨¦rcito, asciende, seg¨²n HRW, a 84, de los que 49 habr¨ªan fallecido el jueves (24 en Bengasi y 23 en Al Baida) y 35 el viernes, todos ellos en Bengasi. El n¨²mero real de muertos debe de ser bastante m¨¢s alto. "Fracase o no ser¨¢ la revoluci¨®n m¨¢s sangrienta", afirma un exiliado libio desde Holanda.

Poco despu¨¦s de que HRW diese a conocer su balance, un m¨¦dico libio se?alaba a la televisi¨®n CNN que ayer, s¨¢bado, otras 30 personas hab¨ªan perdido la vida en Bengasi. El secretario del Foreign Office brit¨¢nico, William Hague, indicaba, por su parte, que ten¨ªa constancias de que solo en un hospital hab¨ªa 35 cad¨¢veres. Quryna, el diario del hijo Seif el Islam, el hijo de Gadafi, ha reconocido ya 24 muertos en Bengasi abatidos cuando intentaban asaltar comisar¨ªas y un cuartel.

S¨ª parece que Bengasi (1,09 millones de habitantes) y Al Baida (210.000 habitantes) han escapado, al menos parcialmente y durante largas horas, al control de las autoridades; que para amedrantar a la gente la polic¨ªa coloca a francotiradores que disparan sobre la multitud. Tambi¨¦n se abre fuego sobre la muchedumbre desde helic¨®pteros.

Gadafi reprime, pero ¨¦l, tan propenso a hablar en otras ocasiones, guarda silencio ante la mayor crisis que padece su r¨¦gimen desde hace 42 a?os. La televisi¨®n libia sigue difundiendo, por quinto d¨ªa consecutivo, im¨¢genes de sus partidarios con retratos del l¨ªder y ensalzando sus virtudes.