El fantasma de un emirato mediterr¨¢neo
El r¨¦gimen libio aplast¨® a los grupos radicales en los noventa, pero el islamismo moderado ha protagonizado un claro avance social en la ¨²ltima d¨¦cada
"Tememos la instauraci¨®n de un emirato isl¨¢mico en el este de Libia". Franco Frattini, ministro de Asuntos Exteriores de Italia, no recurri¨® a circunlocuciones para explicitar una de las varias pesadillas que genera la esperanzadora pero ca¨®tica situaci¨®n libia. ?Es fundamentado semejante alarmismo?
La preocupaci¨®n no es solo italiana, expotencia colonial. Fuentes diplom¨¢ticas europeas confirman que la obsesi¨®n por una deriva islamista ha pesado tanto como la seguridad energ¨¦tica en las relaciones que Europa mantuvo con el r¨¦gimen de Muamar el Gadafi. Sin embargo, tanto medios diplom¨¢ticos como acad¨¦micos coinciden en que si el islamismo ha protagonizado un avance social en Libia en los ¨²ltimos a?os, sus componentes radicales no tienen ni la estructura ni la capacidad de movilizaci¨®n como para representar una amenaza grave a corto plazo.
L¨ªderes islamistas renunciaron a la violencia en un plan de reconciliaci¨®n
"El movimiento islamista radical que desafi¨® seriamente a Gadafi en los a?os noventa ha sido aplastado por el r¨¦gimen", comenta en conversaci¨®n telef¨®nica Alia Brahimi, investigadora de la London School of Economics especializada en la materia. "La represi¨®n oblig¨® al islamismo a sumergirse bajo la superficie. Pero el r¨¦gimen toler¨® su labor social, y como resultado de ese proceso, hasta cierto punto, la sociedad libia ha resultado islamizada. Hay incluso sectores salafistas, como en toda la regi¨®n. Pero no creo que tengan una masa cr¨ªtica suficiente como para tener que preocuparnos ahora", opina Brahimi.
Cientos de miembros de organizaciones pol¨ªticas y guerrilleras islamistas -como el Grupo Isl¨¢mico Combatiente Libio, afincado en el este- han sido excarcelados en los ¨²ltimos a?os en el marco de un plan de reconciliaci¨®n nacional dirigido por Saif, uno de los hijos de Gadafi. "Los l¨ªderes liberados publicaron en ese marco una declaraci¨®n de renuncia a la violencia y a la agenda islamista radical. Queda por ver si se atendr¨¢n a ella en el futuro, pero el texto expresaba una elaboraci¨®n intelectual con fondo y cre¨ªble", analiza Brahimi.
"A diferencia de la revuelta de los a?os 90, que fue perpetrada por los islamistas, la actual tiene un muy amplio respaldo social", prosigue la investigadora. "No creo que el islamismo radical pueda establecer un feudo en Libia", concluye Brahimi.
La extrema volatilidad de la situaci¨®n actual, sin embargo, agita el sue?o de muchos. La fuente diplom¨¢tica consultada coincide en que el avance del islamismo -"evidente en las calles libias en los ¨²ltimos a?os"- ha sido sustancialmente social y moderado, y que el radicalismo resiste solo en reductos marginales. "Pero da pavor el caos en el que se halla de repente una sociedad que no tiene una espina dorsal institucional ni civil", explica el diplom¨¢tico. "En Libia no hay sociedad civil. En ese vac¨ªo, y peor todav¨ªa en una situaci¨®n de violencia y antagonismo, ciertas mechas populistas o radicales pueden prender f¨¢cilmente. No es inminente, pero el riesgo existe".
Gadafi no solo lamin¨® hace tiempo las instituciones del fr¨¢gil Estado libio; ¨²ltimamente, tambi¨¦n sofoc¨® el de por s¨ª d¨¦bil sistema universitario. "Las universidades en Libia son pr¨¢cticamente inexistentes, tienen presupuestos rid¨ªculos. En ciertos cursos apenas se imparte una clase por semana. El dictador tem¨ªa que se forjara una oposici¨®n intelectualmente consistente", comenta la fuente. La ausencia de instituciones y la fragilidad de la sociedad civil preanuncian en Libia una transici¨®n mucho m¨¢s complicada que en T¨²nez o Egipto.
Brahimi coincide en la excepcionalidad del desaf¨ªo que representa la transici¨®n libia. "?Pero no es insuperable! Existe una plataforma opositora laica en el exilio que puede desempe?ar un papel. Hay intelectuales capaces de dar sustancia al proceso. Algunos incluso, amparados por Saif, hab¨ªan expresado sus puntos de vista p¨²blicamente en los ¨²ltimos tiempos", relata la analista. "Y, sobre todo, no olvidemos que el fundamento primordial del islamismo radical es precisamente la rebeli¨®n ante reg¨ªmenes tir¨¢nicos. Ah¨ª empieza la afirmaci¨®n del islam como base para la justicia social. L¨ªderes radicales como Bin Laden y Zawahiri se alzaron originariamente como opositores a Gobiernos tir¨¢nicos".
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