Lo que ahorramos, seguro, son accidentes

"La limitaci¨®n de la velocidad a 110 kil¨®metros por hora es una medida que pretende ahorrar gasolina y punto final". El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, trat¨® de zanjar as¨ª, el martes, la pol¨¦mica abierta sobre el plan aprobado el 25 de febrero en el Consejo de Ministros. "Punto y seguido", debi¨® decir. Las v¨ªctimas y los ecologistas piden que la medida, "excepcional y transitoria" en los 8.800 kil¨®metros de autopistas y autov¨ªas espa?olas, sea permanente. Clubes de conductores protestan e incluso algunos reclaman lo contrario: un aumento de la velocidad m¨¢s all¨¢ de los 120. El impacto en los accidentes de tr¨¢fico, el aumento de multas por exceso de velocidad, la reducci¨®n de emisiones de gases contaminantes o la conveniencia de implantar otras medidas, como la conducci¨®n eficiente, son algunos de los flancos que ha abierto el debate sobre la controvertida reducci¨®n de la velocidad. M¨¢s controvertida a¨²n cuando Holanda acaba de aumentar el l¨ªmite de algunos tramos de sus autopistas a 130 por hora y el Reino Unido debate hacerlo hasta los 128.

Los automovilistas recomiendan la conducci¨®n eficiente como mejor opci¨®n

Las v¨ªctimas y los ecologistas piden que la medida sea permanente

En 2009, el 24,5% de los muertos en carretera perdieron la vida en autov¨ªas

La rapidez fue el factor concurrente en el 31% de los siniestros

El Real Autom¨®vil Club de Espa?a (RACE) cuestiona que la limitaci¨®n de la velocidad a 110 sea "eficaz" en la reducci¨®n del consumo energ¨¦tico y de las emisiones contaminantes. M¨¢s que reducir la velocidad, el RACE aboga por que los l¨ªmites se fijen en funci¨®n "de la climatolog¨ªa y de las caracter¨ªsticas de la v¨ªa", como sucede en otros pa¨ªses europeos. Para ahorrar en combustible, la "educaci¨®n en un consumo responsable" o la promoci¨®n del transporte p¨²blico podr¨ªan ser, seg¨²n el RACE, mejores alternativas.

Tambi¨¦n considera "poco significativo" el ahorro energ¨¦tico derivado de reducir en la carretera la velocidad en 10 kil¨®metros por hora el Real Autom¨®vil Club de Catalu?a (RACC), que subraya "la incoherencia" de las medidas del Gobierno para reducir la factura del petr¨®leo. Por una parte, disminuye la velocidad de 120 a 110, que, seg¨²n el RACC, tendr¨¢ poco impacto en el consumo. Pero por otro lado, el Gobierno impulsa la creaci¨®n de zonas 30 en las ciudades espa?olas, una decisi¨®n que, a juicio del club de automovilistas, aumentar¨¢ la emisi¨®n de gases y el consumo energ¨¦tico.

La confusi¨®n entre las dos limitaciones de velocidad, la de 110 y la de 30, radica en su finalidad. La creaci¨®n de zonas 30 responde a criterios de seguridad vial, para reducir el n¨²mero de muertes por atropello en zona urbana, -en 2009 murieron 269 peatones atropellados- y no de ahorro energ¨¦tico. "A 70 kil¨®metros por hora no se salva nadie, a 50 se salva el 50% y a 30 se salva el 95%", subraya el director de Tr¨¢fico, Pere Navarro.

Pero, reducir la velocidad en las autopistas y autov¨ªas, ?puede salvar vidas? En 2009, el ¨²ltimo a?o con cifras oficiales, murieron 89 personas en autopistas y 377 en autov¨ªas, el 24,5% de los 1.903 fallecidos en las carreteras espa?olas. La velocidad fue el factor concurrente en el 31% del total de los accidentes mortales.

En el caso de la limitaci¨®n a 110 por hora, su posible impacto en la siniestralidad vial es, seg¨²n Rubalcaba, un "efecto colateral". Para el ministro, el objetivo fundamental de la medida "es ahorrar gasolina". Aunque tambi¨¦n es un efecto colateral el posible aumento de multas por exceso de velocidad que denuncian las asociaciones de consumidores. "No es una cuesti¨®n de multas sino de colaboraci¨®n ciudadana ante un problema energ¨¦tico", protesta Pere Navarro.

Sin embargo, las asociaciones de v¨ªctimas y las organizaciones ecologistas han aplaudido la medida del Gobierno por sus efectos colaterales. "Si se demuestra su eficacia en cuanto a la reducci¨®n de accidentes, reclamaremos que sea definitiva y no temporal", afirma Francisco Canes, presidente de la Asociaci¨®n Estatal de V¨ªctimas de Accidentes de Tr¨¢fico.

Los ecologistas tambi¨¦n han apoyado la limitaci¨®n a 110 aunque con matices. "Nos parece razonable y positiva, pero insuficiente", advierte Paco Segura, de Ecologistas en Acci¨®n, que reclama planes a largo plazo.

Frente a las v¨ªctimas y los ecologistas, las asociaciones de conductores reivindican desde hace un tiempo el aumento de la velocidad a 130 kil¨®metros por hora. Uno de sus argumentos es, precisamente, que los coches modernos son m¨¢s eficaces a velocidades m¨¢s altas. Y que circulan por mejores carreteras. El consejero de Interior de la Generalitat de Catalu?a, Felipe Puig, hizo esta reclamaci¨®n de nuevo en febrero, cuando anunci¨® que estudiaba el aumento de la velocidad a 130 por hora en las autov¨ªas catalanas. Va a¨²n m¨¢s all¨¢ la plataforma Movimiento140, que hace honor a su nombre y reclama aumentar el l¨ªmite.

"La experiencia en todos los pa¨ªses que han modificado la velocidad al alza es que las muertes han subido", explica Pere Navarro. El claro ejemplo es, seg¨²n el m¨¢ximo responsable de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT), el de Dinamarca. "En 2004 elev¨® la velocidad de 120 a 130 por hora y en un a?o aument¨® un 20% el n¨²mero de fallecidos por accidente, porque contamin¨® a las otras carreteras", recuerda Navarro. El l¨ªmite m¨¢ximo actual de la red viaria danesa es de 110.

Seg¨²n el modelo potencial, propuesto por el investigador noruego Nilsson, un aumento del 1% de la velocidad media en una carretera producir¨¢, aproximadamente, un incremento del 4% en los accidentes mortales, del 3% de los accidentes mortales y con heridos graves y del 2% de los accidentes con todo tipo de v¨ªctimas. El modelo est¨¢ avalado por organismos como el Observatorio Europeo de Seguridad Vial, la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico y la Organizaci¨®n Mundial de la Salud.

?Y es seguro conducir a 110 por hora? El piloto de F¨®rmula 1 Fernando Alonso abri¨® el debate cuando afirm¨® el lunes que "a esa velocidad es incluso dif¨ªcil mantenerse despierto". No gust¨® a Rubalcaba la respuesta del bicampe¨®n del mundo. "Es un hombre muy viajado", dijo el ministro del Interior, quien asegur¨® que en las autopistas de Estados Unidos se va como m¨¢ximo a 110. "Yo cuando he ido nunca les he visto conduciendo dormidos, ni a los suecos, ni a los noruegos ni a los rusos ni a los ingleses ni a los irlandeses", opin¨® Rubalcaba.

Lo cierto es que conducir a 110 por hora s¨ª puede resultar m¨¢s relajante. "A esa velocidad baja la activaci¨®n, el sujeto se encuentra m¨¢s tranquilo y puede aparecer alguna distracci¨®n m¨¢s", explica Luis Montoro, catedr¨¢tico de Seguridad Vial de la Universidad de Valencia. Sin embargo, circular m¨¢s r¨¢pido tambi¨¦n altera el ¨¢nimo y afecta a la conducci¨®n. Seg¨²n Montoro, "cuando se incrementa la velocidad suben los niveles de estr¨¦s y puede producirse m¨¢s fatiga". Al final, es el conductor el que tiene que tomar conciencia del riesgo y conducir en consecuencia.

Pero si lo que pretende el Gobierno es gastar menos combustible los expertos en Seguridad Vial proponen otras soluciones sin tocar la velocidad. Seg¨²n la Asociaci¨®n Espa?ola de Fabricantes de Autom¨®viles y Camiones (ANFAC), "los coches con siete u ocho velocidades demuestran su mayor eficiencia en las autopistas y autov¨ªas r¨¢pidas". "En esas marchas largas se puede ahorrar mucho combustible", explica ANFAC. Sin embargo, el Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa (IDAE) corrobora la eficacia de la limitaci¨®n de la velocidad a 110 por hora. Seg¨²n un estudio de este organismo, el consumo medio de un coche de gasolina es de 8,58 litros cada 100 kil¨®metros a 120 por hora. Si circula a 110, consume 7,64 litros. En el caso de los motores di¨¦sel, el gasto desciende de los 6,09 litros a los 5,42 si se reduce la velocidad m¨¢xima permitida en 10 kil¨®metros por hora. Es decir, un 11% en los dos casos.

La ausencia de la conducci¨®n en ciudad en el plan de ahorro de carburante ha desatado muchas cr¨ªticas. "Limitar la velocidad a 110 por hora es un medida muy concreta y limitada solo a autopistas y autov¨ªas" y no tiene en cuenta el entorno urbano, considera Jos¨¦ Miguel B¨¢ez, presidente de la Confederaci¨®n Nacional de Autoescuelas (CNAE). Adem¨¢s, ANFAC estima que "en carretera quienes hacen m¨¢s desplazamientos son los camiones, que pueden circular como m¨¢ximo a 100 kil¨®metros por hora, por lo que a ellos no les afecta la medida".

La Asociaci¨®n Espa?ola de Centros M¨¦dico Psicot¨¦cnicos (ASECEMP), presidida por el diputado del PP y vicepresidente segundo de la Comisi¨®n de Seguridad Vial del Congreso, Ignacio Landaluce, insiste en la necesidad de rejuvenecer el parque de autom¨®viles, "especialmente con h¨ªbridos y veh¨ªculos el¨¦ctricos". "No es igual de seguro, no consume igual un veh¨ªculo de baja gama de m¨¢s de 10 a?os de antig¨¹edad que un veh¨ªculo nuevo de cualquier gama", defiende su secretario general, Bonifacio Mart¨ªn, doctor en Psicolog¨ªa y Seguridad Vial.

Seg¨²n Mart¨ªn, antes que reducir la velocidad a 110, es m¨¢s oportuno "estimular el uso de servicios p¨²blicos para el transporte urbano", "compartir veh¨ªculos particulares" cuando los usuarios realizan la misma ruta y "concienciar a los ciudadanos en un consumo racional". Es precisamente esta ¨²ltima medida, la de la conducci¨®n eficiente, la que mayor consenso re¨²ne. Todos coinciden en las cifras: un ahorro entre un 15% y un 20% de combustible.

"La conducci¨®n eficiente es la medida m¨¢s eficaz en las ciudades y los desplazamientos cercanos, los cuales concentran un amplio porcentaje de los grandes movimientos de tr¨¢fico", consideran en la Confederaci¨®n de Autoescuelas. Arrancar el motor sin pisar el acelerador, favorecer las marchas largas, controlar la correcta presi¨®n en los neum¨¢ticos o mantener la velocidad lo m¨¢s uniforme posible son peque?os gestos con grandes resultados en el bolsillo de los consumidores.