La OTAN planifica una zona de exclusi¨®n a¨¦rea de hasta tres meses
El plan tendr¨¢ que superar las resistencias de Sarkozy y las condiciones de Turqu¨ªa
Con una planificaci¨®n prevista de hasta tres meses de imposici¨®n de una exclusi¨®n a¨¦rea sobre toda Libia, la OTAN asumir¨¢ "en los pr¨®ximos d¨ªas todas las operaciones" militares encomendadas por Naciones Unidas para proteger a la poblaci¨®n civil de la violencia del r¨¦gimen de Muamar el Gadafi, seg¨²n anunci¨® ayer la Alianza. Los embajadores aliados trabajar¨¢n durante el fin de semana para concluir los detalles de la absorci¨®n de las operaciones que hasta ahora ha venido realizando la coalici¨®n internacional. Una fuente aliada aventur¨® que la transferencia podr¨ªa producirse con motivo de la reuni¨®n del martes en Londres de los pa¨ªses que participan en la coalici¨®n junto a otros actores regionales. Con vistas a esa cita de ministros de Exteriores, Nicolas Sarkozy anunci¨® ayer que prepara junto al primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, "una iniciativa para mostrar que la soluci¨®n no puede ser solo militar; ser¨¢ una soluci¨®n pol¨ªtica y diplom¨¢tica".
"La soluci¨®n de la crisis ser¨¢ pol¨ªtica, no militar", dice el presidente franc¨¦s
La plena asunci¨®n de la responsabilidad militar por la Alianza fue fruto de un complicado pacto sellado en la noche del jueves entre los Gobiernos aliados y cuya consistencia todav¨ªa deber¨¢ probarse sobre el terreno. Pero el hecho es que hay acuerdo pol¨ªtico para que la OTAN dirija toda la campa?a militar en Libia. Los embajadores aliados intentar¨¢n durante el fin de semana cerrar flecos pendientes y cumplir los procedimientos para actuar en cuanto lo decidan las capitales. Entre las cuestiones que debatir¨¢n ma?ana por la tarde figura la aprobaci¨®n de un plan para imponer la exclusi¨®n a¨¦rea "por un periodo inicial de hasta tres meses". La hipot¨¦tica extensi¨®n de ese plazo requerir¨ªa una nueva decisi¨®n del Consejo Atl¨¢ntico.
Los 90 d¨ªas son solo un supuesto te¨®rico a efectos de preparar las contingencias necesarias, puntualizan fuentes aliadas.
Frente a la ejecuci¨®n de un embargo naval para combatir el potencial tr¨¢fico de armas hacia Libia, la imposici¨®n de una zona de exclusi¨®n a¨¦rea plantea la cuesti¨®n de los l¨ªmites, caballo de batalla del pulso que han venido librando Francia y Turqu¨ªa. Ankara se negaba a que la aviaci¨®n aliada atacara objetivos terrestres, como ha venido haciendo la coalici¨®n internacional para evitar al m¨¢ximo bajas civiles.
"La zona de exclusi¨®n a¨¦rea no da derecho a bombardear objetivos en el suelo", explicaba en conferencia de prensa el coronel brit¨¢nico Geoffrey Booth. "Pero la autodefensa es un derecho b¨¢sico". Neutralizada la aviaci¨®n de Gadafi, la amenaza puede venir tambi¨¦n de tierra, con misiles o bater¨ªas antia¨¦reas. Y Sarkozy precisa: "Exclusi¨®n a¨¦rea no es solo impedir el vuelo de aviones. Tambi¨¦n es destruir blindados que disparan sobre la poblaci¨®n. Las fuerzas de la OTAN proteger¨¢n a la poblaci¨®n civil". Lo que pone en alerta a Turqu¨ªa, que en la OTAN podr¨¢ vetar operaciones militares que hasta ahora Par¨ªs ha realizado sin cortapisas. "A la Alianza le queda por pasar esa prueba", comenta un embajador aliado, en referencia a los potenciales frenos turcos.
La OTAN ultima en estas horas la transferencia del comando y control de la exclusi¨®n a¨¦rea que viene realizando Estados Unidos desde Manheim (Alemania) para la coalici¨®n internacional a la base aliada de Esmirna (Turqu¨ªa). El comando y control de la Operaci¨®n Protector Unificado de embargo naval se ejecuta ya desde la base de la OTAN en N¨¢poles (Italia), que ser¨¢ tambi¨¦n cuartel general del mando de toda la operaci¨®n libia, dirigida por el general canadiense Charles Bouchard, actual n¨²mero dos en N¨¢poles.
Al potencial punto de fricci¨®n operativo que puede plantear Turqu¨ªa se suma el problema de acomodo en el nuevo estado de cosas de la ambici¨®n de Sarkozy de que los representantes de los pa¨ªses que intervienen en la coalici¨®n internacional sigan teniendo voz sobre lo que se hace en Libia. Con ese objeto se convoca la reuni¨®n del martes en Londres, de la que Par¨ªs desear¨ªa ver salir un grupo de contacto permanente para la gesti¨®n de la crisis libia y el dise?o del posgadafismo.
Oana Lungescu, portavoz del secretario general de la Alianza, mantiene que, diga lo que diga Par¨ªs, "la direcci¨®n pol¨ªtica de las operaciones es responsabilidad del Consejo Atl¨¢ntico
[la reuni¨®n de los 28 embajadores aliados] y el mando y control de las operaciones militares corresponde a la OTAN". Ante esa tesitura, Sarkozy responde que "las decisiones son tomadas por la coalici¨®n; la autorizaci¨®n de atacar la dan los pa¨ªses, y la OTAN discutir¨¢ los objetivos que le proponga la coalici¨®n". Lo que plantea la curiosa circunstancia de que un pa¨ªs como Catar, que est¨¢ en la coalici¨®n, dir¨ªa qu¨¦ hacer a la OTAN, en la que se sienta una Alemania que no quiere participar en el conflicto. "El grupo de contacto no puede dar instrucciones a la OTAN porque la OTAN es soberana", explica un embajador. "Solo podr¨ªa dar indicaciones", a?ade.
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