"La ciudad puede crear epidemias positivas"

Si se cobraran derechos de autor por los conceptos, Saskia Sassen podr¨ªa ser due?a de media Nueva York despu¨¦s de dar a luz al t¨¦rmino de ciudad global en 1991. La soci¨®loga, voz autorizada en cuestiones como la globalizaci¨®n, la inmigraci¨®n o el urbanismo, particip¨® ayer en la primera edici¨®n del Encuentro Internacional de Urbanismo Sostenible organizado por el Ayuntamiento de Vitoria. Con un estupendo espa?ol con acento argentino, fruto de su infancia en Buenos Aires, Sassen defiende la necesidad de dejar atr¨¢s la idea que las ciudades solo pueden generar din¨¢micas negativas para la biosfera y que el ser humano solo puede minimizar el da?o.

La pensadora cree que el Pa¨ªs Vasco est¨¢ muy bien posicionado ante los cambios que marcar¨¢n este siglo. Tambi¨¦n elogi¨® los discursos previos del lehendakari, Patxi L¨®pez - "me gust¨® mucho el concepto ese de vertebraci¨®n territorial"-, y del alcalde Patxi Lazcoz: "me pareci¨® muy valiente decir 'nos equivocamos' al crecer en superficie en lugar de optar por hacerlo en altura".

"Se da por sentado que las ciudades son malas y pervierten a la naturaleza"

"Con tecnologia, podemos delegar algunas cuestiones en la biosfera"

Pregunta. ?Cree usted que nos hacemos las preguntas adecuadas en materia de urbanismo?

Respuesta. Hay limitaciones en la manera en la que estamos manejando la cuesti¨®n. Se da por sentado que la ciudad siempre es un problema, como algo que pervierte la naturaleza y no implica cosas positivas, salvo las ventajas que conllevan la densidad de poblaci¨®n y el transporte p¨²blico. Y todas las medidas que tomamos son para remediar el da?o que hace la ciudad a la biosfera. Yo creo que este enfoque es demasiado t¨ªmido, lento y, sobre todo, nos hace perder una gran oportunidad.

P. ?Por qu¨¦?

R. Tenemos que recuperar la complejidad de la ciudad, con sus distintas ecolog¨ªas y sus m¨²ltiples escalas, porque lo que es malo a una escala puede ser bueno a otra. Esto nos permitir¨¢ ir delegando en la naturaleza algunas cuestiones.

P. ?Podr¨ªa darnos ejemplos?

R. En vez de centrarnos en limitar los efectos negativos del sistema de transporte, por ejemplo, deber¨ªamos entender en toda su complejidad lo que ocurre en la ciudad para intentar darle la vuelta a algunas cosas. Pensemos en una epidemia, el virus de la gripe que se propaga en un autob¨²s. Pues la ciudad puede generar epidemias positivas: En Copenhague, las bicicletas almacenan energ¨ªa que puede ser utilizada despu¨¦s. Tambi¨¦n tenemos que delegar en la naturaleza, que puede hacer muchas cosas si entendemos c¨®mo funciona y usamos un puente tecnol¨®gico para amplificar su potencial positivo. Los molinos de viento son un buen ejemplo, o las algas que se utilizan para limpiar aguas contaminadas, o el uso de una bacteria que vive en el hormig¨®n para que se autoreparen las grietas. Una vez que hemos recodificado la ciudad, muchas capacidades que nos parec¨ªan solo negativas nos aparecen desde otro prisma. El desaf¨ªo de la sostenibilidad se juega entones en un campo mucho m¨¢s rico.

P. ?Qu¨¦ papel puede jugar una ciudad de tama?o medio como Vitoria en esta nueva era?

R. Un gobierno local con un m¨ªnimo de capital puede activar a empresas locales. Curitiba, en Brasil [1,8 millones de habitantes] es el referente n¨²mero uno en c¨®mo reinventarse en cuestiones de sostenibilidad. Su ejemplo nos dice que una peque?a ciudad puede marcar la historia, porque es m¨¢s f¨¢cil reinventarse por cuestiones de tama?o. Eso se pod¨ªa hacer en Cutiriba, pero no en S?o Paulo o en Madrid.

P. ?Estamos volviendo a la etapa de las ciudades-estado que marcaron el medievo en Europa, mientras los Estados siguen perdiendo poder?

R. El mundo multipolar que viene va mucho m¨¢s all¨¢ del an¨¢lisis habitual de que China emerge como gran poder. Hay unas 100 ciudades que est¨¢n articulando una multipolaridad m¨¢s elaborada y desarrollada que la idea de una o dos superpotencias dominando el mundo. Estas empiezan a introducirse en el campo internacional, algo que antes solo estaba reservado a los estados nacionales. Es un gran cambio. La regionalidad que tienen aqu¨ª, o lo que est¨¢n haciendo Barcelona y Catalu?a. son posicionamientos muy interesantes para esta nueva etapa.