Contador a cero, Mariano
Tercer memorando imaginario.
A: Mariano Rajoy.
De: Ficticio departamento de Estrategia del PP.
Asunto: ?Y ahora qu¨¦?
En los dos apuntes previos que te enviamos (EL PA?S, 3 de marzo y 7 de julio de 2010), te advertimos del dif¨ªcil equilibrio que buscamos desde hace tres a?os: no desvelar nada que asuste a los centristas o enfade y active a los progresistas, y mostrar al tiempo que somos gente fiable con ideas para gobernar. ?Lo que nos est¨¢ costando, Mariano, no decir nada comprometido y aparentar que decimos algo interesante a la vez! El problema que tenemos desde el s¨¢bado es que, al anunciar que no competir¨¢ por un tercer mandato, Zapatero nos ha cambiado el gui¨®n, nos ha puesto el contador a cero, ha comenzado una partida nueva.
El candidato y el discurso del PP han envejecido de golpe. Ahora se abre una nueva partida
Perdemos al enemigo y ellos ganan un m¨¢rtir. Llevamos siete a?os presentando a Zapatero como el ogro enemigo de Espa?a, y ahora resulta que el ogro, en solo unas horas, se ha convertido en el patriota que sacrifica su reputaci¨®n por Espa?a y que luego deja el puesto con abnegaci¨®n. Se sabe que quien anuncia que se va tiene, por el mero hecho de hacerlo, una oportunidad para mejorar su valoraci¨®n p¨²blica, y es muy probable que en el caso de Zapatero mejore, porque los efectos de la crisis los tiene ya amortizados.Tenemos que prepararnos para que en los pr¨®ximos meses tu puntuaci¨®n no suba y la de Zapatero s¨ª. La gente le ver¨¢ con m¨¢s simpat¨ªa y m¨¢s respeto. Qu¨¦ error, por cierto, poner a Barber¨¢ y a Camps a contrastar con Zapatero tras su anuncio. Tenemos que ordenarnos. Seguimos cometiendo errores t¨¢cticos de libro.
De pronto, nos quedamos viejos. Zapatero parece ahora no solo m¨¢s patriota; tambi¨¦n m¨¢s sexy. No digamos Carme Chac¨®n. Incluso Rubalcaba, que tiene cuatro a?os m¨¢s que t¨² y cinco a?os m¨¢s que Calvo Sotelo cuando lleg¨® a la presidencia, parece rejuvenecido. Ellos van a cumplir: esto no es el PSOE de 1996. Tienen ganas y hambre de victoria. Es incluso probable que, de producirse, la competici¨®n entre el vicepresidente y la ministra de Defensa esta sea elegante y amable.
Cuando Gonz¨¢lez dimite en 1996 su partido est¨¢ hecho unos zorros tras la derrota electoral. No tienen, adem¨¢s, experiencia en primarias. Ahora, en cambio, Zapatero sigue en el poder y su partido a¨²n tiene opciones de conservarlo. Si lo hacen bien, vamos a envejecer d¨ªa a d¨ªa en el verano de las primarias socialistas: un sano, alegre y optimista contraste entre una mujer moderada, integradora, experimentada, con visi¨®n y con un nuevo relato progresista, y un veterano, pragm¨¢tico, inteligente y seductor vicepresidente; una militancia que podr¨¢ elegir, y una opini¨®n p¨²blica que asistir¨ªa a un democr¨¢tico proceso de elecci¨®n. ?Qu¨¦ contraste, Mariano, con el cuaderno azul en el que Aznar escribi¨® tu nombre!
Nada est¨¢ cerrado en las locales y auton¨®micas, y ahora menos. Nuestras encuestas, y las suyas, dicen que ellos podr¨ªan perderlo todo, pero tambi¨¦n ganarlo. Cospedal hace un dif¨ªcil papel en Castilla-La Mancha, defendiendo un d¨ªa una cosa y al siguiente la contraria, y disfraz¨¢ndose de manchega a tiempo parcial. Y es solo un ejemplo. Tenemos batallas cruentas en Asturias, en Baleares, en Cantabria... Ha habido casos en los que las locales han anticipado el resultado de las generales (1995), pero tambi¨¦n casos en los que no (2007). Lo cierto es que ahora nos va a costar m¨¢s hacer una campa?a nacional so pretexto de locales y auton¨®micas. Nos hemos quedado sin pared a la que lanzar la bola.
Cambio de estrategia para las generales. T¨² pod¨ªas representar el cambio hasta hace unos d¨ªas. Hoy el cambio m¨¢s grande, parad¨®jicamente, no ser¨ªas t¨², sino Carme Chac¨®n: mujer y joven (pero no tanto, como Felipe, Su¨¢rez, Kennedy, Obama, Cameron o el propio Zapatero, que ten¨ªan aproximadamente su edad cuando llegaron al Gobierno, y ninguno su experiencia). Nuestras encuestas, y las suyas, dicen que las mujeres y muchos j¨®venes se ir¨ªan en masa con ella.
Con respecto a Rubalcaba, imag¨ªnate un debate televisivo entre t¨² y ¨¦l: es escurridizo, simpatiqu¨ªsimo y extremadamente habilidoso. Lo sabe todo de pol¨ªtica. En cualquier caso, un mitin nuestro contigo m¨¢s Aznar y Fraga en primera fila, contrastar¨ªa mucho con uno de Chac¨®n y Rubalcaba con Felipe y Zapatero. Desde que anunci¨® que no ser¨¢ candidato, los socialistas, y el propio Zapatero, est¨¢n en mejores condiciones para volver a recuperar a sus votantes desencantados.
De manera que tendr¨ªamos que ver qu¨¦ hacemos, porque quiz¨¢ este clima deprimente de crisis econ¨®mica que tanto hemos ayudado a construir no sea suficiente para ponerte en La Moncloa. Nos tememos que nos va a hacer falta algo m¨¢s, pero a¨²n no sabemos qu¨¦: alguna propuesta a¨²n por definir; quiz¨¢ ayuda de Gallard¨®n, o de Rato, o de alg¨²n l¨ªder internacional; o confiar en que el paro aumente todav¨ªa m¨¢s; o que haya alguna otra mala noticia econ¨®mica... No sabemos todav¨ªa qu¨¦, pero algo se nos ocurrir¨¢.
Luis Arroyo es presidente de Asesores de Comunicaci¨®n P¨²blica.
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