La fosa de los comunes
"La verdad no se encuentra r¨¢pido y a veces no es la que uno desea o¨ªr", le dice la forense a Esteban, que fue criado en un orfanato y desea conocer la identidad de sus padres. En NN12, drama de Gracia Morales galardonado con el premio SGAE 2008, resuena la historia de los desaparecidos de las dictaduras argentina y chilena, de los ni?os arrebatados en las maternidades y de las v¨ªctimas del franquismo arrojadas a fosas comunes, que ser¨ªa mejor abrir para no dejar las cosas cerradas en falso.
Inspir¨¢ndose en la labor abnegada del Equipo Argentino de Antropolog¨ªa Forense, que en 25 a?os ha identificado a centenares de desaparecidos de m¨¢s de 30 pa¨ªses, la joven autora granadina crea una ficci¨®n con empaque documental, contada a trav¨¦s de informes forenses, de cartas donde una compa?era de reclusi¨®n de la madre de Esteban relata a los abuelos de este el destino de su hija secuestrada y el nacimiento del ni?o, y de soliloquios que la investigadora mantiene ante los huesos de la v¨ªctima, y ante su alma, encarnada por una actriz.
En NN12, la labor de la forense concilia pasado y presente: devuelve al hijo su identidad cierta y evita que su madre sea solo tierra bajo la tierra. Encarnada con un halo de continua extra?eza por Carolina Bustamante, la espectral mujer asesinada se vuelve profundamente carnal en el ¨²ltimo tercio del espect¨¢culo, cuando su autora entra en harina dram¨¢tica al hacerle revivir alguna de las noches que pas¨® con su verdugo, encarnado con una cotidianidad inquietante por el argentino Jorge Molina.
Como Wajdi Mouawad en Incendies, Morales evita con buen criterio situar la acci¨®n en un pa¨ªs concreto: el acento andaluz de las actrices nos trae a Espa?a, pero la fecha del secuestro de la protagonista nos devuelve al Cono Sur a cada rato, en un polis¨¦mico viaje de ida y vuelta. El director Juan Alberto Salvatierra mezcla en escena limpiamente pasado y actualidad, y lo vivido con lo enso?ado, apoy¨¢ndose en la luz irreal de Fernando Vidal y en la verosimilitud sint¨¦tica del espacio esc¨¦nico de Carlos Monz¨®n. Del texto destacan los mon¨®logos donde la madre evoca su fosa y la naturaleza inevitablemente ambigua de su relaci¨®n con el verdugo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.