Una c¨¢mara, un camino y un perro

No se considera un fot¨®grafo de animales, pero sabe c¨®mo retratar a estos seres vivos en mitad de una inmensa naturaleza, en un espacio abismal que traslada con su c¨¢mara con realismo, equilibrio y firmeza. Pentti Sammallahti (Helsinki, 1950) se define como un hombre t¨ªmido con alguna dificultad para retratar a personas. Tan s¨®lo unas pocas aparecen en alguna obra de su colecci¨®n, Au bord du monde, que inaugur¨® ayer en el Centro Andaluz de la Fotograf¨ªa (CAF), en Almer¨ªa.

Se trata de una muestra de 110 im¨¢genes en blanco y negro -salvo dos-, reveladas y tratadas en su laboratorio, un cuarto oscuro al que llama cari?osamente "para¨ªso". Sammallahti es un artesano ajeno a la era digital. "Llevo haciendo mi trabajo as¨ª durante 50 a?os. Si fuera 20 a?os m¨¢s joven, claro que utilizar¨ªa la tecnolog¨ªa digital", confes¨® ayer.

Le fascinan los paisajes "de cualquier parte del mundo" y el sentimiento que experimenta durante su contemplaci¨®n lo plasma t¨¦cnicamente a la perfecci¨®n en sus obras, de peque?o tama?o, porque no le gustan "las cosas monumentales" y le resulta m¨¢s sencillo controlar la calidad en un formato m¨¢s reducido.

Las fotograf¨ªas surgen, dice, "casi por casualidad" aunque sus obras parecen cuadros que lleven as¨ª toda la vida, sobre todo las inmensas panor¨¢micas de parajes nevados de su Finlandia natal o Rusia, pa¨ªs que visit¨® por primera vez hace 20 a?os y donde le desvelaron que se trataba del "para¨ªso de los perros en los caminos". "Desde entonces, siempre hay un perro y un camino en mis obras".

El fot¨®grafo franc¨¦s Henri Cartier-Bresson escogi¨® a Sammallahti como fot¨®grafo de cabecera. Sus im¨¢genes "parecen haber sido hechas para colgarlas en las casas, para vivir con ellas toda la vida", apunt¨® Alain D'Hooghe, comisario de esta exposici¨®n, in¨¦dita en Espa?a.