La contaminaci¨®n arruina la cr¨ªa de almeja en el parque de Corrubedo

En las aguas de Punta do Couso, en Ribeira, la empresa Inprocar buscaba la pureza de una zona protegida para criar la semilla de almeja que se planta en Carril. En su primer a?o de producci¨®n, hace ya nueve, superaron las expectativas que ten¨ªan y en el segundo, las triplicaron. Ahora, el 100% de su producci¨®n se muere "por la contaminaci¨®n del agua". "Se mueren hasta las madres", explica el presidente de la empresa, Jos¨¦ Luis Villanueva. Sobre la culpa de la situaci¨®n apunta a las propias empresas que eligieron -y consiguieron la autorizaci¨®n de la Xunta- para situarse una zona protegida por la Red Natura y el Parque Natural de Corrubedo. "Hay algunas empresas, no muchas, pero lo suficientemente contaminantes", explica.

En Punta do Couso, la Conseller¨ªa de Medio Ambiente tiene constancia de la presencia de cinco f¨¢bricas, todas relacionadas con el sector de las conservas, y defiende que las aguas de la zona presentan un "buen estado ecol¨®gico" y "no constan indicios de mortalidad por vertidos". Sin embargo, el organismo aut¨®nomo abri¨® un total de 22 expedientes por denuncias desde el a?o 2002 a estas empresas y el importe de las sanciones por infracciones asciende a m¨¢s de 150.000 euros. Los motivos concretos de las multas y a qu¨¦ empresas corresponden est¨¢n amparados por la ley de protecci¨®n de datos, explican desde Medio Ambiente, que indica que dos de las empresas tienen autorizaci¨®n de vertidos -una de ellas es Inprocar- y otras dos "aseguran" que han contratado a un gestor autorizado para tratarlos. La ¨²nica sin permiso es el Cocedero Barra?amar, que "est¨¢ en tr¨¢mites para conseguirlo", a pesar de que cont¨® en 2007 como director gerente con el actual director general de Competividade e Innovaci¨®n de la Conseller¨ªa do Mar, Juan Maneiro, que ya hab¨ªa tenido responsabilidades, siempre relacionadas con pesca y acuicultura, en anteriores gobiernos de la Xunta.

La empresa de cr¨ªa de almeja solicit¨® ante la Xunta una ampliaci¨®n de la tuber¨ªa con la que captan el agua del mar para evitar las zonas costeras y conseguirla de un ¨¢rea m¨¢s abierta. La resoluci¨®n de la Secretar¨ªa Xeral de Calidade e Avaliaci¨®n Ambiental -que considera que la obra, dentro de la zona protegida de Corrubedo, no precisa de una evaluaci¨®n de impacto ambiental- acepta el proyecto para que la prolongaci¨®n de la tuber¨ªa se quede "fuera de la influencia de las actuales vertidos de la ensenada donde se localiza".

En la zona donde se ampliar¨¢ la canalizaci¨®n, la cofrad¨ªa de Carreira-Agui?o explota una zona de percebe "de productividad media", puntualiza el informe de la secretar¨ªa general. Fue precisamente la cofrad¨ªa la que comenz¨® a denunciar en 2005 los vertidos que comet¨ªan las empresas. Las quejas, que fueron trasladadas a la Fiscal¨ªa, se?alaban la existencia de vertidos de forma "incontrolada" de materia org¨¢nica, aceites, grasas, detergentes y concentraciones muy bajas de ox¨ªgeno disuelto. Las denuncias se quedaron en nada porque el juez consider¨® que se trataba de algo puntual, indican desde la cofrad¨ªa, a pesar de que alguna empresa ya contaba con sanciones de la Xunta de a?os anteriores por incumplir las condiciones de vertido a las que le hab¨ªa autorizado. Medio Ambiente insiste en que Augas de Galicia hace inspecciones de las empresas para comprobar que no se producen vertidos sin autorizaci¨®n y que se cumplen los l¨ªmites especificados para cada caso.

Las aguas residuales de las localidades de Ribeira y Agui?o acaban tambi¨¦n directamente en el mar, a pesar de la obligaci¨®n de contar con una depuradora. El anteproyecto est¨¢ listo, indica Medio Ambiente, y una vez acabada ayudar¨¢ a mejorar la calidad de las aguas de la zona. Los vecinos se oponen a la localizaci¨®n escogida.