Gallard¨®n subir¨¢ los parqu¨ªmetros del centro para vaciarlo de coches

Los peri¨®dicos se politizan y los pol¨ªticos se vuelven periodistas. No hay quien se f¨ªe ya de nadie en este Carnaval. Alberto Ruiz-Gallard¨®n, candidato a la alcald¨ªa de Madrid del PP, present¨® ayer su programa electoral en un curioso formato de peri¨®dico web (incluso tiene una suerte de entrevista sobre econom¨ªa y ciudad del alcalde a Rodrigo Rato) El documento, elaborado y casi presupuestado al mil¨ªmetro durante meses por el equipo del concejal de Hacienda Juan Bravo (¨¢vido lector de prensa y aficionado al formato para presentar sus presupuestos), contiene el esp¨ªritu de los planes para los pr¨®ximos cuatro a?os. Para captar la atenci¨®n y no faltar a la tradicional pirotecnia electoral, cada d¨ªa de campa?a se desgranar¨¢ alg¨²n punto a modo de noticia.

Ayer fue el turno del empleo y la promesa de crear 150.000 puestos de trabajo. Pero leyendo atentamente el "peri¨®dico electoral", que dibuja entre l¨ªneas una amplia remodelaci¨®n en la manera de gestionar la ciudad (estructuras de gobierno, ¨¢reas, distritos...), queda claro que si Gallard¨®n alcanza su tercer mandato al frente del Ayuntamiento lo convertir¨¢ en el de la movilidad y la calidad del aire. Por ejemplo, se propone reducir la contaminaci¨®n con medidas que tiendan a limitar el uso del coche en el centro de Madrid, como es la subida del precio de los parqu¨ªmetros.

Las propuestas se ir¨¢n desarrollando a partir del lunes, pero est¨¢ claro que esta vez no habr¨¢ proyectos inasumibles. Las Administraciones, y ese ser¨¢ un elemento que se repetir¨¢ durante esta campa?a, est¨¢n bajo cero de dinero y de credibilidad. As¨ª que toca austeridad, ingenio y, sobre todo, realismo.No hay dinero para infraestructuras y s¨ª muchos problemas de contaminaci¨®n (tanta que la capital ha pedido una pr¨®rroga para el cumplimiento de su Estrategia de Calidad del Aire). Y en el cielo de Madrid, se?alan los datos, flotan cada vez m¨¢s part¨ªculas de NO

2, un contaminante procedente de los autom¨®viles di¨¦sel. Por eso, porque no son problemas independientes, de alguna forma Gallard¨®n pretende vincular la gesti¨®n de la calidad del aire y la movilidad en una misma estructura de gobierno liderada, probablemente, por el mismo concejal. Y la noticia es que el coche tiene cada vez m¨¢s los d¨ªas contados en el centro de Madrid.

?C¨®mo reducir a pr¨¢cticamente cero la circulaci¨®n en la almendra central? De muchas maneras. Pero la primera, m¨¢s novedosa y quiz¨¢ pol¨¦mica ser¨¢ aumentar el precio por aparcar en el centro de la ciudad. La candidatura popular quiere vincular la tarifa de la hora de estacionamiento (SER) a las zonas de bajas emisiones (casco hist¨®rico, bulevares, Chamber¨ª...). Es decir, en vez de tener peajes para acceder al centro y a las zonas protegidas medioambientalmente, como poseen ciudades como Londres, el pago/penalizaci¨®n se realizar¨¢ a la hora de aparcar en los parqu¨ªmetros. Los veh¨ªculos el¨¦ctricos actualmente ya no pagan ninguna tarifa.

Pero el programa anuncia tambi¨¦n la creaci¨®n de nuevas ¨¢reas de prioridad residencial: barrios donde solo pueden circular los vecinos, como ya sucede en Las Letras, Embajadores y Las Cortes. La medida, que arranc¨® con la inquietud de los comerciantes y de los automovilistas, ha terminado por ser un ¨¦xito inapelable. Ahora parece que se extender¨¢ a m¨¢s barrios.

Habr¨¢ tambi¨¦n m¨¢s peatonalizaciones integrales de calles importantes de la ciudad (se anunciar¨¢n la semana que viene) y se fomentar¨¢ el uso del transporte p¨²blico con medidas como la posibilidad de pagar el billete con el m¨®vil o la implantaci¨®n wifi en las marquesinas y estaciones. Otra promesa, que tambi¨¦n ha hecho el candidato del PSM Jaime Lissavetzky, permitir¨¢ a los viajeros de la EMT (autob¨²s) hacer transbordo pagando un solo billete. El l¨ªmite de tiempo entre cada cancelaci¨®n ser¨ªa de unos 90 minutos.

Adem¨¢s de la calidad del aire, Gallard¨®n va a tener que rectificar a marchas forzadas con el asunto de la bicicleta. Errores como olvidar el carril prometido en el nuevo eje Prado-Recoletos o hacer bandera de un anillo ciclista o carriles bici perif¨¦ricos que no tienen ninguna utilidad como v¨ªa de transporte diaria necesitan soluciones de verdad y urgentes. Y parece, leyendo su documento de promesas electorales, que esta vez llegar¨¢n. Un cap¨ªtulo del programa se titula Madrid en bici y anuncia la creaci¨®n de m¨¢s carriles y de "ciclocalles" (v¨ªas con prioridad para las bicicletas en las que no se podr¨¢ circular a m¨¢s de 30 km/h). Hasta que se presente la pr¨®xima semana no sabremos cu¨¢ntos ni d¨®nde. En cuanto al desarrollo del servicio p¨²blico de alquiler de bicicletas... no parece que las arcas vayan a permitir a corto plazo el proyecto. Se buscan f¨®rmulas econ¨®micas que lo hagan viable.

Tampoco gozan de buena salud los aparcamientos disuasorios prometidos en la anterior legislatura. Los terrenos situados en las entradas a Madrid, donde deber¨ªan ubicarse, no son propiedad del Ayuntamiento y para construirlos deber¨ªa pagar o llegar a un acuerdo con entes como Renfe o Adif para realizar alguna permuta. Lo mismo suceder¨¢ si quiere llevar a cabo, como anuncia en su programa, "la T4 ferroviaria" en la zona del Abro?igal. La estaci¨®n, una de las grandes obsesiones de Gallard¨®n para descongestionar la salida de Atocha, ser¨¢ complicada de conseguir.

?Grandes proyectos? Ninguno. Terminado Madrid-R¨ªo y sin un euro en las arcas, como mucho se rematar¨¢ el eje Prado-Recoletos, si la Comunidad de Madrid tiene a bien desbloquearlo despu¨¦s de dos a?os.