Un 'friki' a la fuerza
Miguel ?ngel Fern¨¢ndez, "concursante profesional", vivir¨¢ 10 d¨ªas en la Fnac
La camiseta le delata. Dibujados en est¨¦tica c¨®mic lleva a Cervantes, Poe, Carroll, Salinger, Faulkner, Wilde... Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Rubio es friki o como ¨¦l prefiere autodenominarse "culturalmente disperso". Se pirra por los libros, los c¨®mics, las series y las pel¨ªculas. Cuando habla no se aprecia nada del fanatismo y excentricidad que va unidos a los nuevos raritos, pero algo tiene que tener cuando ha sido seleccionado entre m¨¢s de 500 candidatos para ser El friki de Fnac. Ha demostrado ser el m¨¢s friki de todos y se ha llevado el premio: 5.000 euros y una estancia de 10 d¨ªas en una suite en la tienda de Callao.
Dormir¨¢ en la sexta planta en una habitaci¨®n estrecha adornada solo con un p¨®ster de la pel¨ªcula Siete metros sobre el cielo y un perchero. Se duchar¨¢ en s¨®tano y pasar¨¢ el d¨ªa entre el segundo y el quinto piso mirando dvds, ordenadores o libros.
Segu¨ªa 16 series a la semana y ve¨ªa los cap¨ªtulos mientras montaba en bici
Tiene dos perfiles de Twitter y una p¨¢gina en Facebook
"Todos somos 'frikis': de la 'Guerra de las Galaxias' o de Manolo Escobar"
Particip¨® durante 19 programas en el concurso televisivo 'Gafapastas'
Si quiere comida, tendr¨¢ que pedirla porque no puede salir de la tienda. "Me desintegrar¨ªa", bromea. Son las condiciones del concurso. Fern¨¢ndez Rubio asegura re¨ªrse de s¨ª mismo cuando las cosas le vienen mal dadas y se dedica a provocar la carcajada de los dem¨¢s. En la red le conocen como An¨®malo. En Twitter tiene dos perfiles: uno dedicado exclusivamente a humoristas (@Anomalo) y otro para las redes sociales (@Anomalario). Igual en Facebook: uno personal y una p¨¢gina de fan. Lo de darse a conocer se le da bien. Hasta hace poco se le pod¨ªa ver en el programa de La 2 Gafapastas. Justo el tipo de lentes que este "concursante profesional" lleva.
Con los 5.000 euros de premio que debe gastar en la misma tienda piensa comprarse, c¨®mo no, un ordenador. Y si da de s¨ª, una c¨¢mara de v¨ªdeo y algunas temporadas de series de televisi¨®n. ?Sobre Perdidos? Vio el final de madrugada y es de los que qued¨® convencido. En alg¨²n momento de su vida, lleg¨® a seguir 16 series a la semana. Ahora est¨¢ revisionando Expediente X. Ahora dice que se da cuenta de nuevos matices, por ejemplo, que a David Duchovny le beneficia el doblaje. No es la ¨²nica serie, claro. Las descarga ilegalmente de Internet, pero casi por obligaci¨®n. Para seguir el ritmo de emisi¨®n en EE UU y no esperar a que lleguen a Espa?a y porque Twitter no le da m¨¢s de tres d¨ªas. Si no ha visto el ¨²ltimo episodio, se entera a trav¨¦s de sus followers. Las ve mientras pedalea en la bici el¨ªptica que tiene en su casa. "Esto es muy friki", dice y se atreve a explicar que "dos horas dan para tres cap¨ªtulos de 40 minutos".
Siendo uno de los fundadores del D¨ªa del Orgullo Friki no se ha disfrazado nunca. Ni siquiera de Darth Wader. Dice ser "facil¨ªsimo de regalar". Cualquier libro o pel¨ªcula es bienvenido en su cumplea?os o Navidad. "Si lo tuviera repetido, pues lo cambio". No ser¨ªa raro ya que tiene libros por su casa, la de sus padres y la del pueblo. Desde William Goldman, el autor de La princesa prometida, hasta el f¨ªsico Richard Feynman. "Es muy cachondo", comenta. A la cabeza de su top ten est¨¢ Alan Moore, guionista brit¨¢nico conocido por c¨®mics como V de Vendetta.
Solo en su casa, tiene en torno a ocho baldas llenas de textos. Todos ellos ordenados por g¨¦nero, como en la tienda que estos d¨ªas es su casa y en la que ha pasado tantas horas. En su ¨¦poca de universitario, lleg¨® a trabajar unos meses en el gran almac¨¦n cultural. Como entonces, ahora atiende a los clientes y les da su opini¨®n. Forma parte del juego. "Cuando vengo solo, no hablo en voz alta". Ahora, tiene una c¨¢mara de v¨ªdeo que le persigue durante todo el d¨ªa y emite en streaming su estancia en Callao. Para Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Rubio "ser¨¢n como unas vacaciones". Tiene sitios especialmente designados para leer, ver pel¨ªculas, jugar a videojuegos... En algunas plantas se puede leer: "espacio reservado para que el friki haga frikadas".
Se gan¨® el nombre y el puesto gracias a un v¨ªdeo en el que explicaba por qu¨¦ quer¨ªa vivir en la tienda. No es que quisiera entrar, sino que quer¨ªa volver. "Yo nac¨ª aqu¨ª, en este mismo sitio" y se?ala el asiento desde el que habla. No era m¨¢s que una broma, pero convenci¨® a los organizadores. Lo ¨²nico de verdad es que su inter¨¦s por la cultura empez¨® cuando era ni?o. En su cuarto de adolescente ten¨ªa p¨®sters de superh¨¦roes y de pel¨ªculas. De Pena de muerte (con Sean Penn y Susan Sarandon), recuerda. "Todos somos frikis: de la Guerra de las Galaxias o de Manolo Escobar", teoriza. Lo que cuenta es tener mucho conocimiento sobre un tema, seg¨²n Fern¨¢ndez Rubio.
Lo ¨²nico que se le resiste son los videojuegos. No tiene ninguna consola como precauci¨®n. Tiene miedo de desaparecer: "Voy a casa de mis amigos, porque te acaban echando y as¨ª no te puedes enganchar".
Por lo dem¨¢s, todo muy normal. Tiene 30 a?os, naci¨® en Oviedo y vive con su mujer.
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