Cinco preguntas sobre el populismo que viene
Las elecciones del d¨ªa 22 permitir¨¢n calibrar en Catalu?a el voto a partidos que encarnan una nueva derecha populista. Esta apela a la movilizaci¨®n del pueblo como una comunidad homog¨¦nea ante problemas achacados a la inmigraci¨®n o a alguno de sus colectivos (musulmanes, gitanos rumanos), como el deterioro del orden p¨²blico, la competencia en el mercado laboral o la depredaci¨®n de prestaciones del Estado. A la vez, exhorta a romper con la clase pol¨ªtica tradicional, a sus ojos una ¨¦lite alejada del pueblo que ha favorecido la llegada de un aluvi¨®n humano for¨¢neo. Este discurso es propio de la Plataforma per Catalunya que lidera Josep Anglada, de diversos r¨®tulos minoritarios y, en parte, del l¨ªder popular Xavier Garc¨ªa Albiol en Badalona. Los pr¨®ximos comicios plantean cinco cuestiones sobre esta derecha emergente.
Los partidos populistas plantean buenas preguntas a las que aportan falsas respuestas
1. ?Crecer¨¢? Posiblemente s¨ª, por varias razones. En primer lugar, porque la PxC presenta 108 candidaturas y en el 2007 fueron 39. En segundo lugar, porque con una crisis econ¨®mica enquistada la demoscopia refleja un clima de opini¨®n que sintoniza con su mensaje, pese a que un reciente estudio (Inmigraci¨®n y Estado de Bienestar en Espa?a) demuestra que los t¨®picos peyorativos m¨¢s extendidos sobre los inmigrantes no tienen fundamento. Por otra parte, porque sus partidos ponen de modo contundente en la agenda pol¨ªtica temas que inquietan al electorado: seguridad ciudadana, creaci¨®n de guetos escolares, transformaci¨®n de barrios en suburbios, problemas multiculturales. Parafraseando al exministro socialista franc¨¦s Laurent Fabius al aludir al Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen, los populistas "plantean buenas preguntas a las que aportan falsas respuestas". Finalmente, progresar¨¢ porque la crisis del sistema pol¨ªtico catal¨¢n premia nuevas marcas, como atestiguan Ciutadans, Solidaritat Catalana per la Independ¨¨ncia, la PxC y las Candidatures d'Unitat Popular.
2. ?Qu¨¦ consecuencias tendr¨¢ su expansi¨®n? Depender¨¢ de su magnitud. Si es notable, veremos c¨®mo su dispersi¨®n local actual deviene una realidad m¨¢s homog¨¦nea en la medida que se extienda por todo el territorio y penetre en el cintur¨®n metropolitano barcelon¨¦s. El eventual ingreso de la PxC en el Consistorio en L'Hospitalet (segunda ciudad catalana), un ascenso de Garc¨ªa Albiol en Badalona (tercera ciudad) y una presencia de derecha populista en Ayuntamientos medianos y capitales de comarca har¨¢ que la pol¨ªtica catalana sea m¨¢s estridente. As¨ª, es probable que se ensanche la brecha entre un universo local pol¨ªticamente atomizado y radicalizado y un Parlamento de cierta placidez, donde una CiU de holgada mayor¨ªa puede pactar con diversos socios.
3. ?Ser¨¢ un voto coyuntural? Es dudoso. El polit¨®logo franc¨¦s Pascal Perrineau advirti¨® en Francia de que los electores del Frente Nacional antes de votarlo hab¨ªan experimentado una "lepenizaci¨®n de los esp¨ªritus". Es decir, el discurso lepenista gan¨® primero sus conciencias y luego se plasm¨® en las urnas. Desde esta ¨®ptica, es importante saber si los m¨¢s de 75.000 electores que capt¨® Anglada en las elecciones auton¨®micas vuelven a apoyarle y si Garc¨ªa Albiol y Alicia S¨¢nchez Camacho logran conservar los votantes que atrajeron al afirmar que CiU gobern¨® priorizando a la inmigraci¨®n musulmana (y no hispana) para preservar su proyecto nacionalista. De conseguirlo, esta derecha posiblemente inicie un proceso de "normalizaci¨®n pol¨ªtica": vendr¨¢ para quedarse.
4. ?Es una din¨¢mica catalana? El ascenso de la PxC es un fen¨®meno catal¨¢n que demuestra c¨®mo el cambio del sistema pol¨ªtico se produce desde el ¨¢mbito local, pero esta din¨¢mica tiende a exportarse al resto de Espa?a en la medida que tiene ¨¦xito. En tal sentido, por ejemplo, habr¨¢ que observar la evoluci¨®n del partido Espa?a 2000 en la Comunidad Valenciana, que obtuvo representaci¨®n en Onda y Silla en el a?o 2007 y es posible que mejore resultados.
5. ?Puede surgir una derecha populista estatal desde el nivel local? Probablemente emerger¨¢n siglas de implantaci¨®n provincial o auton¨®mica que podr¨ªan compartir un mismo r¨®tulo para concurrir a comicios legislativos. Entonces la derecha populista ser¨ªa la ¨²nica fuerza confederal espa?ola, pese a que la ultraderecha tradicional ha sido unitaria y centralista.
Xavier Casals es historiador.
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